Príncipe del Cielo [ vhope ]

10

Hoseok se levantó del piso y corrió hacia Seokjin, pero no llegó y por lo contrario fue lanzado contra una pared cuando Taehyung lo empujó con su niebla oscura. Fue tan fuerte que Seokjin se sobresaltó y corrió hacia el pelinegro para verificar su estado. Hoseok estaba bien pero eso no pareció disminuir el enojo de Seokjin y atacó a al demonio al igual que se tratase de cualquier otro. Sabía que sólo para herirlo, porque tenían órdenes de no matarlo.

Seokjin gruñó y se lanzó contra Taehyung con su mayor ataque posible, lastimándolo tan fuerte que cayó contra el piso, porque definitivamente no se esperaba ese ataque.

—¿Vas a matarme? Creo que el Cielo no estaría muy feliz si lo haces. Aún siguen pidiéndome volver. —Le recordó el demonio al mismo tiempo que Hoseok se reincorporaba adolorido por el golpe.

—Matarte es lo que más deseo en estos instantes —dijo acercándose de a poco—. Si te atreves a tocarlo, juro que lo haré.

Taehyung rió bajo. —Entonces tendrás que hacerlo porque hice más que eso.

El más alto apretó los dientes y volvió a atacarlo, está vez cuerpo a cuerpo. Taehyung no se quedó atrás y le siguió el ataque. Hoseok no sabía que hacer, el ruido de golpes era espantoso y él no era tan fuerte como ellos. Seokjin era un ángel antiguo especializado en bajar a la Tierra y matar demonios, mientras que el otro era un demonio poderoso al igual que alguna vez fue un ángel poderoso. Si se metía ahí, era posiblemente para ser un estorbo.

Sin embargo, al ver que Taehyung comenzaba a tomar cada vez más fuerza y estaba orillando a Seokjin a una esquina -con la ayuda de su niebla negra- el ángel pelinegro se alertó. En algún momento pareció tocar algo sensible de Seokjin que éste gritó y notó que sus poderes se redujeron hasta casi volverse nulos.

—¿Q-qué... me hiciste? —jadeó Seokjin sin aliento, Hoseok caminó hacia él temblando de lo que sea que estaba pasando, no podía evitar notar que su compañero parecía estar sufriendo de un dolor insoportable. Y los ángeles no sufrían dolores a menos que fuesen muy extremos.

—¿Tú qué crees? —preguntó Taehyung divertido y comenzó a hacer movimientos circulares con la muñeca—. Despídete de tu puta existencia y del ángel que me pertenece pero que creíste lograr enamorar —agregó elevando una mano como si fuese a lanzarle algo. Hoseok corrió a Seokjin y lo abrazó, cubriéndolo, dándole la espalda por completo al castaño, esperando que sea lo que sea que fuese a lanzarle, se lo lanzara a él.

—Hoseok, suéltame. —Apenas pudo pedir Seokjin intentando alejarlo y el pelinegro se preocupó más aún al darse cuenta que estaba tan débil que ni siquiera podía empujado o moverlo.

Él no resistiría a un ataque de Taehyung en esas condiciones. De eso estaba seguro.

—Fuera de ahí —gruñó Taehyung pero lo único que consiguió es que Hoseok envuelva más sus brazos alrededor de Seokjin—. ¡Aléjate o te mataré a ti también!