Otoño

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Es Lunes, una semana nueva inicia y no de la manera que me gustaría, olvidé que otoño inició el mes pasado y es realmente hermoso, hojas secas tiradas en las calles que irán muy bien con las vibes de Halloween.

Lo de ayer sigue dando vueltas en mi cabeza, no paro de pensar en qué pasará con mi familia.

Mamá no se levantó hoy, no tenía ánimos y la entiendo. Steve vino a dejarme a la escuela sin ganas, tenía la mirada cansada y parecía que quería llorar, siempre trata de hacerse el fuerte, aunque ésta vez no está funcionando pero a pesar de sentirse mal, fue a trabajar.
Y papá, el se fue ayer después de discutir.

Eddie no ha escrito y yo tampoco lo hice, no tengo cabeza para pensar, estoy perdida, me siento en otro mundo.

El día ha pasado muy rápido, no puse atención a clases y no fui al comedor.
Sam me envía muchos mensajes, mensajes que no respondo últimamente, estoy tan distraída con tantas cosas que se me olvida que tengo mejor amiga.

Voy caminando hacia la salida, estoy pensando si ir a casa o al bosque, aunque en este momento preferiría ir a California, me sentía mejor estando allá, sin saber sobre lo destruida que está mi familia.

—Buenos días, Stella —dijo con una sonrisa.

—Hola —saludé sin mirarlo.

—¿Pasó algo? —Dustin dijo preocupado.

Soy muy sentimental aunque no lo parezca, y creo que necesito desahogarme, pero me fue imposible hacerlo frente a él así que solo lo abracé.

—Okay —sonrió—, todo estará bien, ¿sí?

Su abrazo fue muy reconfortante, Dustin siempre está cuando lo necesito.

—Dustin, estoy muy mal —lo aparté de mí.

—¿Puedo ayudarte en algo?, lo que sea —tomó mi hombro.

—Sí —me límite a decirle.

Él asintió con la cabeza esperando a que le dijera.

—Ve con Steve, por favor, te necesita, esta en el trabajo.

Mi hermano la estaba pasando peor que yo y Dustin es su mejor amigo, sé que lo necesita.

Dustin asintió rápidamente, se despidió de mi y salió corriendo hacía la salida. Creo que no hizo falta decirle nada más para que entendiera.

Al final decidí ir al bosque, quiero tomar un poco de aire y estar sola. Pero una llamada interrumpió el momento, aunque agradecía.

—¿Qué te esta pasando?, ya no me hablas —preguntó Sam.

—Sam, lo siento, no he tenido tiempo...

Le conté todo lo que ha pasado últimamente, la voz se me cortaba pero ni una lagrima salió, de verdad quería llorar pero simplemente no podía.

Sam supo cómo consolarme y me dijo que vendrá en navidad y eso me hizo sentir mejor.

Mierda, la navidad está cerca y mi familia se fue a la mierda.

Ahora mismo estoy sentada en la banca de picnic que está detrás de la escuela, la que tanto le gusta a Eddie.
Eso me hizo acordarme de él, hoy no lo he visto y no ha enviado ningún mensaje. Me puse de pie y caminé hacia la escuela para buscar su camioneta pero no estaba.

Le he marcado tres veces y no responde, decidí ir a su casa, necesito ver a mi chico, creo que es el único que de verdad puede hacer que olvide toda la mierda que esta pasándome.

My Freak | Eddie Munson | Terminada ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora