XXXIII

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Luego de aquella desastrosa noche, Jimin despertó con sus ojos hinchados, efectos de haberse quedado dormido llorando.

Restregó sus ojos acostumbrándose a la luz y volteo a ver a su lado, un dormido Taehyung le hizo sonreír.

A pesar de todo, Taehyung se mantuvo a su lado consolándolo demostrándole que su amistad si era verdadera.

Lo tapó un poco más con la sabana y se levantó hacia el baño para lavarse los dientes y su rostro.

Al terminar agarro su suéter ya que estaba haciendo mucho frío y bajo las escaleras sigilosamente hacia la cocina encontrándose así a Jungkook quien bebía de su café mientras leía el periódico.

— Buenos días. — le saludo.

Sin embargo, el pelirosa solo lo volteo a ver y regresó su mirada hacia el periodico ignorándolo por completo, al terminar su café lo dejó en el lavador y camino hacia la salida.

Pero Jimin lo detuvo agarrando su antebrazo.

— Por favor, no me ignores y habla conmigo.

— No tenemos nada de que hablar. — Jeon ni siquiera le dirigió la mirada. — Cuando regrese de trabajar será mejor que tu ya no estés aquí. — Lo vio por encima de su hombro. — Y cuando mi hijo nazca yo te enviaré a un abogado para que tenga derecho a verlo, de lo contrario, no quiero saber más de ti.

— Jungkook, por favor escúchame, te lo ruego.

— Te quiero fuera de mi casa. — exigió molesto. — Y de mi vida.

Un movimiento rápido y se safo del agarre caminando hacia la salida sin decir nada más dejando a Jimin con su corazón hecho pedazos en la cocina.

Sin embargo, Jimin no lo culpaba, se merecía su desprecio por haberlo engañado todo este tiempo.

Pero de verdad dolía, dolía verlo así.

Con un suspiro no lo pensó más y se dirigió de regreso a su habitación a armar sus maletas.

Tendría que regresar a su viejo departamento y darle un tiempo a Jungkook, no sería fácil pero le daría su espacio.

Taehyung quien estaba durmiendo, se revolvió y abrió sus ojos levantándose de pronto viendo como Jimin sacaba sus conjuntos del closet hacia las maletas.

— ¿Te iras? — le pregunto.

Jimin entonces volteo a verlo y sus ojos se llenaron de lágrimas nuevamente mientras hacía un puchero inconscientemente.

— No quiere verme aquí y créeme que su desprecio duele mucho. — sollozó.

Taehyung se levantó y fue a abrazarlo, el pelinegro empezó a llorar más fuerte desahogándose por completo.

Luego de unos minutos, ambos tomaron asiento en la cama, Taehyung aún mantenía sus manos entrelazadas con las de Jimin quien había calmado su llanto.

— ¿Ya me dirás por que hiciste todo esto?

Jimin levantó su mirada hacia su amigo y asintió.

— Créeme que si alguien me hubiera dicho que Jungkook se iba a convertir en el amor de mi vida, jamás hubiera hecho lo que hice. — musitó. — Todo empezó cuando yo entré al primer año de secundaria, en ese entonces yo no me preocupaba por mi físico o vestimenta por lo que me ponía lo primero que veía. — agarró aire. — El primer día de clases fue literalmente un infierno para mi, ahí conocí a Jeon Jungkook, el estaba en un grado superior y era uno de los chicos más populares de toda la secundaria sin mencionar que también tenía fama de vender drogas. — rió.

 𝗣𝗲𝗿𝗱𝗶𝗰𝗶𝗼𝗻 𝗖𝗮𝗹𝗹𝗲𝗷𝗲𝗿𝗮 ✧ 𝙹𝙹𝙺 - 𝙿𝙹◌ೄDonde viven las historias. Descúbrelo ahora