Chuuya

3K 307 528
                                    

Si quiero a ese idiota...

-¡Señor Rengokuuuuu! -grité, con un tomo de manga en mis manos.

Al regresar de casa de Atsushi, dejé los mangas en mi mueble, hice tarea, fui a estar con Dazai en biblioteca un rato, nos colamos a centro de cómputo a ver una película, y en la noche decidí leer el primer tomo. Pensaba tomarlo con calma pero... Me leí los 4 esa noche, tuve que pedirle a Atsushi que me dejara los siguientes el domingo para seguirle.

Me estaba encantando, de verdad. No podía separarme de los mangas. Me encantó el personaje del señor Rengoku, ahora entiendo porque Kunikida tiene tantas ganas de vestirse de él. El único problema...

-No, no, no. Señor Rengoku, noo! -comencé a agitar el manga frente a mí mientras gritaba.

-Dios mío, Chuuya, relajate -dijo Dazai, mirándome -. Todos en cafetería te están mirando.

-¡Eso no me importa, Dazai, Rengoku acaba de morir! -grité, mostrándole el recuadro del manga -. Maldito Akaza, aaahh

Dazai solamente sonrió y le dio un bocado a su pay antes de mirarme.

-No juzgues a Akaza -dijo tranquilo. Casi lo ahorco -. Él no lo quería matar, y es más profundo de lo que crees -lo miré desconcertado, pero él sonrió -. Anda, acaba de leerlo, no pienso decirte nada.

Siguió comiendo mientras yo seguía leyendo, cada vez más enganchado. Me gusta, es una historia un tanto secilla, pero la verdad te pica mucho, y si quiero saber como continúa la historia. Tendré que esperar a que Atsushi me pueda prestar el resto.

***

Me encontraba leyendo en mi cama, envuelto en las cobijas, sintiendo como hacía algo de frío afuera, pero no podía dejar de leer, ya me encontraba en el último tomo, y, cuando por fin lo acabé... Eran las 3 de la mañana.

-Maldita sea -dije, dejando rápidamente el manga en el escritorio para apagar la luz -. Mañana tendré sueño todo el día y me toca con el profesor Ango a primera hora...

Dije, antes de tirarme en la cama esperando caer dormido. Tal vez no debí leerme los 21 tomos en 4 días.

Pero valió la pena.

***

-Buenos días, Chuuya -canturreó Dazai, viendome entrar al salón -. Hoy no fuiste a desayunar.

-No iba ni a venir -respondí, dando un gran bostezo -. Me dormí demasiado tarde, y me desperté hace 10 minutos.

-Si, tú cabello me lo dice -sonrió, acomodandolo, antes de que le quitara la mano -. ¿Ya terminaste de leer?

-Así es -volví a bostezar, esta vez estirandone -. Ya sé de quien quiero ir.

Dazai me sonrió antes de dirigirse a su sitio, al tiempo que el profesor Ango entraba por la puerta. Ah... no entendí su tarea, pero Kunikida me la trató de explicar, espero que esté bien.

Las primeras 3 clases estuve cabeceando todo el tiempo, de verdad que solo quería ir a mi habitación a dormir, ya no aguantaba. El profesor Mori me dijo discretamente que podía ir a dormir a enfermería diciendo que estaba enfermo, le dije que no hacía falta... Pero me dormí en su clase.

-Dios mío, ya no aguanto y apenas vamos a mitad del día -dije, tirandome en el cesped en el recreo.

-¿A que hora te dormiste, Chuuya? -preguntó Tanizaki, sentándose junto a mí

Mi estúpido compañero -SoukokuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora