Chuuya

2.7K 262 259
                                    

Y ahora me siento como un gran imbecil

Creo... Que metí la pata. Le dije a Dazai que se veía lindo y lo primero que hizo fue entrar a su habitación y cerrar la puerta, y la verdad hice exactamente lo mismo, para después tirarme en la cama y procesarlo todo. Dios mío... ¿Que pasó esa noche?

Me quedé observando al techo un rato, pensando en todo lo ocurrido, en lo tierno que se veía con su traje de Tomioka, en como es tan torpe para bailar, en lo mucho que sonreía... Esa estúpida sonrisa suya, que solo hace que me sienta feliz al verla...

-Tal vez... Me gusta más de lo que pensé.. -comienzo a tener ideas en voz alta y la única imagen que consigo ver en este momento, es a él mirando a las estrellas.

Un enorme suspiro salió de mis labios al pensar nuevamente en como se encerró en su habitación. Tal vez lo dije de una manera muy extraña, tal vez ni siquiera debí haberlo dicho, tal vez ya se dio cuenta de que lo quiero y le resulte incómodo. ¿Debería preguntarle? No creo, creo que lo mejor es dejarlo así, seguramente ni siquiera ha notado lo que siento.

Y espero que se quede de ese modo.

Después de pensar un rato las cosas, un enorme sueño se apoderó de mí. Sentí como mis ojos comenzaban a pesar y se cerraban lentamente, sin siquiera haberme quitado el disfraz. Y mientras me dormía, nuevamente solo podía ver una sola cosa en mi mente antes de perderme en mis sueños toda la noche... Solo podía verlo a él.

***

Después de la fiesta de Halloween, Dazai ha estado extraño conmigo. No ríe, no me molesta, no canturrea mi nombre con su desespante voz. Ha sido esquivo conmigo, evita que nos quedemos solos, incluso después de cenar me evita a veces, diciendo que olvidó algo o que quiere quedarse abajo, en el césped. No lo sé... Tal vez si metí la pata definitivamente. O tal vez le ocurra algo. Quizá Atsushi sepa algo al respecto.

-¿Si le ocurre algo a Dazai? -preguntó desconcertado -. La verdad yo lo he visto tranquilo, de hecho mejor que otros días.

-Entonces... ¿Por qué se ha portado así? -pregunté en un suspiro. Arsushi solo me sonrió.

-A veces Dazai hace cosa muy extrañas, pero se le pasa pronto. Sólo hay que darle un poco de espacio -su voz sonaba extremadamente dulce, como si quisiera decirme que no me preocupara.

Decidí hacerle caso, después de todo, lo conoce desde hace más tiempo que yo y han vivido más cosas que yo.

Sin embargo, veo como se relaciona con los demás, como habla con los demás y su actitud hacia ellos es la misma que antes del baile. Con el único que cambió su comportamiento es conmigo...

Y eso me hace pensar que no debí haberle dicho lo que dije...

Esperé una semana para ver que procedía entre ambos, pero las cosas seguían iguales, de hecho me hablaba menos ahora... Incluso cuando estamos con Atsushi, Kunikida y Tanizaki actúa como si yo no estuviera. Ya ni siquiera se sienta conmigo en el comedor, de hecho ha comenzado a faltar a algunas comidas...

¿Tan malo es que me guste? ¿Tan malo es que lo haya notado?

Me encontraba en biblioteca con Kunikida haciéndome todas esas preguntas, cuando él me hizo regresar a la realidad.

-¿Me estás escuchando?

-¿Que? Ah, claro -dije, mirando fijamente a mi cuaderno.

Mi estúpido compañero -SoukokuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora