Vegas: al despertar note la ausencia de Pete en la cama no es la primera vez que se desaparece veo la hora son las 2: 30 de la madrugada, Pete están escurridizo que no me doy cuenta cuando sale de mi cama estoy pensando seriamente en esposarlo a la cama, salgo a buscarlo la casa estaba siendo protegida por varios guardaespaldas muy bien armados, seguro que está en la habitación de los bebés, si hay estaba cantando a los cachorros una hermosa canción en su idioma sureño.
Pete: ¿no puedes dormir? en la puerta está mi amante mirándome me causa gracia su rostro hermoso lo amo tanto no dejaré que nadie me vuelva apartar del ¿Por qué me miras así?
Vegas: por qué te amo ¿qué haces aquí?
Pete: vine a ver a los bebés.
Vegas : amor en estos últimos días se ha vuelto costumbre que te encuentre a esta hora de la madruga cantando a los cachorros.
Pete: ¿Vegas quieres que te cante?
Vegas: si por favor, hazlo mientras te retuerces de placer encima mío pidiendo por más, ellos están bien vamos a dormir.
Pete: ¿no puedes dormir sin mi verdad?
Vegas : la verdad no, quiero que calientes mi cama abrazarte sentir tu aroma ¡Te deseo!
Pete: llegamos a la habitación, apague la luz de la habitación solo nos alumbraba la luz de la calle que entraba por nuestra ventana, Vegas me tumbo en la cama me abrazaba me besaba desesperado, su cuerpo estaba tan caliente.
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Ere mío escuché decirme, está noche soy tu amante, tu hombre todo lo que quieras sus caricias son más arrebatadoras sube nuestra excitación, me recorre con sus manos todo mis cuerpo, besos mordiscos mis pechos ya estaba rojos, él tenía puesto su pantalón su miembro empezaba aunmentar su tamaño, me lo metí todo en la boca, se acostó boca arriba para dejarme mamarle con más libertad mis labios recorrían rítmicamente su miembro duro que parecía que explotaría. Cambiamos de posición quedamos yo debajo del separo mis piernas mientras se mordía los labios, alzó mis piernas a sus hombros.
Vegas: nunca voy a dejar de decir ¡damn how sexy you look!
Pete: aprieta mis pechos succionándolos con su boca ¡Agggggggggvegas! ¡Agggggggg! Me tomo de la cintura colocando mis piernas alrededor de su cintura me estaba volviendo loco quería sentirlo dentro mío.
Vegas: cariño tranquilo tenemos toda la noche
Pete: deslizo sus dedos por mi entrada no necesitaba lubricar ya estaba suficientemente húmedo introduciendo uno dedo, ¡ahhhhhhhhh! Vegas ¡aggggg! Posiciono su pene en mi entrada sentí como algo grande y duro entraba de golpe en mi ¡ayyyyyyyyy!........¡aggggggg!......¡uffffffff sus embestidas eran violentas sentía dolor y placer al sentir su virilidad mis gemidos se escuchaban por la habitación. Los dos estábamos gozando tanto, el tenía rasguños por todo su pecho, moretones en su cuello, abrí más mis piernas para él.
