DURMIENDO CON EL ASESINO

CAPITULO 169

Domingo

6 de la mañana

Pete: mi alarma programada me despertó, Vegas me tenía muy bien abrazado despacito me levanté de la cama y fui al baño. me bañe rápidamente, saque de una bolsas un disfraz de gatito muy sexy que compre ayer con mis amigos.

Me llegó un mensaje.

Las esposas desesperadas

Khum: 📩 ¿ya están listos? por qué yo si.

Luna : 📩 están locos si creen que me pondré lo que me trajo tawan anoche

Khum: 📩 que tiene ?

Luna: 📩 recuerdan que estoy hospitalizada?

Khum: 📩 tu solo colócatelo y ya.

Tay: 📩 tengo sueño 😴

Khum : 📩 me importa un cacahuate pónganse lindos.

Porsche : 📩 deja dormir 💤

Pete : 📩 tu ganas ya me puse el traje.

Khum: 📩 ya saben que hacer, los veo más tarde.

Una vez que ya tenía el disfraz puesto salí a buscar a mi alfa que aún seguía dormido abrazando mi almohada que yo se lo deje para que el creyera que aún sigo en la cama con el.

Me acerque silenciosamente, esposando sus manos.

Miauuuuu......... Miauuuuu.

Vegas : escuché un maullido de gato, nosotros no tenemos 😺 al abrir mis ojos me quedé sorprendido 😳 no se que decir, Pete llevaba puesto orejas de gato. Trague saliva

¡oh Pete!

Me senté rápidamente en la cama.

Pete : Miauuuuu que le parece mi disfraz amo Miauuuuu.

¿Amo quieres cariñito ? Lo decía sin dejar de tocar mis piernas llevando mis manos a mis pechos.

Vegas: quise tocarlo pero no podía este diablillo me había esposado . Pete suéltame te lo ordeno.

Pete : no mi amor hoy el que ordena soy yo.

Saque un látigo que tenía escondido. Sabes lo que haré con esto?

Vegas : no cariño.

Joder Pete se ve demasiado sexy. Intenté de una otra manera soltarme las esposas no podía.

Pete : disfruta

puse música comenzando a bailar sensualmente, poco a poco fui sacándome la bata que llevaba puesto dejando ver el disfraz completo de gato. Vegas estaba que no podía más. Desesperado por agarrarme. Yo seguía tocándome.

Vegas : no soportaba ver a Pete de esa manera quería agarrarlo. Cómo se mueve, como se toca.

Suéltame Pete no lo voy a repetir otra vez.

Pete : Feliz día daddy.

Vegas : sonreí a lo que el dijo, me quedé mirando como movía su cuerpo.

Pete : Los ojitos de Vegas cambian de color.

Hoy es tu día Vegas, el día de los alfas deja que yo te haga llegar al paraíso.

Me subí encima de Vegas besando suavemente su cuello, rozaba con mis manos su entrepierna, a este hombre se le había parado y no precisamente el corazón, lo tenía muy duro.