Mi novio es el Rey

25.Feliz cumpleaños

Dos meses después...

Conecte mi teléfono a una pequeña bocina, elegí la canción y ¡que truene la bocina!

—¡AHHH!—despertó del golpe, cayéndose de la cama envuelto en las sabanas.

—¡FELIZ CUMPLEAÑOS MI AMOR!—grite para que lograra escucharme por encima de las mañanitas con Cepillin.

Llevaba un pequeño pastelillo en las manos con una vela en forma de estrella. No hay algo más mexicano que despertar al cumpleañero con las mañanitas antes de que salga el sol, sin importar que despertemos a los vecinos, y después estrellarle el chocolate o el pastel que llevaras en ese momento. Pero jamás alguien se había caído de la cama; o al menos no antes de Austin que supiéramos.

Apenas se había logrado levantar cuando lo ataque con un: —¡QUE LE SOPLE!, ¡QUE LE SOPLE!—su cara era de confusión a más no poder.

Le acerque más el pastelillo y una sonrisa enorme en mi rostro, con bastante duda soplo la vela, —¡QUE LE MUERDA!, ¡QUE LE MUERDA!

Sosiégate, Daniela.

Antes de que pudiera acercarse por su cuenta, ¡VAS!, le embarre todo en la cara, pero ello no dejo fuera que su camisa se ensuciara. Se quito el pastel de los ojos y a pesar de la cobertura de chocolate y crema batida esos luceros azules que tenía resaltaban a más no poder, como dos faroles en altamar guiando a los barcos.

Corte A, me levante para ir por una toalla, pero logro jalarme de los pies y termine debajo de él empezando a besarnos.

Corte B, estábamos teniendo sexo en el suelo, con mis senos llenos de chocolate y nuestras caras con crema batida.

Corte C, el teléfono vuelve a sonar interrumpiéndonos en el momento clímax, —Sigue—habló poniendo sus manos en mi cintura moviéndome en círculos, pero el teléfono seguía y seguía sonando, —un momento.

—N-no, ya estoy por llegar—le valió un pepino, salió de mí y buscando su teléfono en la cama. Una impotencia sexual me invadió, tuve que dejar ir un fantástico orgasmo porque mi novio no puede poner su teléfono en vibrador.

Me envolví en las sabanas, puse los ojos en blancos y me fui a dar un baño. Deje que la tina se llenara un poco con agua tibia, que a decir verdad era más fría que caliente.

—¡Alexa!, Home sweet home.

—Home Sweet Home de Mötley Crüe, es amazon music.

Me quedé ahí con los ojos cerrados, en lo que me pareció horas, pero fueron quizás dos minutos cuando Austin apareció frente a mi con una sonrisa enorme y su mano apenas rozando la superficie del agua cerca de mi pierna, —Bueno, al menos uno tuvo Happy Ending—hablé pegando mis piernas a mi pecho.

—Oh vamos, sabes que no es mi intención que ello pase, pero...—cambio de tema como siempre que no quería afrontar la verdad, —¿ya viste que soy tendencia en Tik Tok? Siempre que entro encuentro por lo menos cinco o seis videos con escenas de la película y transiciones a Elvis cuando canto if i can dream.

—Así como clips de la película ya han sido subidos al Youtube por el mismo Warnes Bros.

—¿De verdad?—pregunto, —No lo sabía, ¿y cuál es tu favorito?

—Trouble.

Sonrió enormemente, —y regresando a lo otro...¿me perdonas?

—Si, pero ya van dos veces que me haces lo mismo.

—De acuerdo, lo lamento, ¿si?—besó mi frente.

—¿Qué vamos hacer por tu cumpleaños?—me recargue en el filo de la tina, quedando más cerca.