Capítulo 1: El partido de Quidditch

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   En honor a sus queridos padres sangre pura, se juró humillar a los miembros de Slythering tanto como pudiese.

   Enemistarse con personas de la casa de las serpientes se volvió el hobbie favorito de Mayka. Desde las más sencillas bromas con dulces amargos, hasta los embrujos más asquerosos. En clases ni siquiera lo intentaba, Lili Evans era la mejor, y eso estaba bien, era de su propia casa.

   El Quidditch era el único campo que faltaba por cubrir. Aunque había excelentes jugadores, la chica no quería perder oportunidad de golpear a más de uno con la bludger. Por esa misma razón fue que intentó entrar al equipo desde su tercer año en el colegio. Entrenaba sin descanso en vacaciones u horas libres de clases, pero nunca era suficiente para el capitán. Pero este año, su último año, por fin fue seleccionada, y el primer partido se acercaba sin esperar.

   Ese día, Mayka se levantó particularmente temprano. Se juraba a si misma que no estaría nerviosa. Y, sin embargo, allí estaba, con un cosquilleo que no le permitía caminar con normalidad. Quería hacerlo bien, sentía que podía. Pero el aleteo en su pecho advertía que podría quedarse sin aliento en cualquier momento.

   Claro que sus intenciones no eran meramente molestar alumnos, sino que deseaba realmente ser buena jugando. Después de todo, no estaba en su naturaleza la habilidad de utilizar una escoba para volar, y aún así, era algo que le fascinaba hacer. Por eso ganó algunas burlas en las pruebas... y luego de ellas. Sobre todo, venían por parte de cierto grupo de inmaduros que amaban molestar a otros. Lili se convirtió en su ídola, le contó sus verdades a James Perfecto Potter. Eso pareció calmarlo un poco. Todos adoraban al muchacho y a su mejor amigo Sirius, pero Mayka era de las pocas desafortunadas centro de sus burlas, así que no compartía el sentimiento. Pero debía intentar simpatizar con el muchacho, ya que era el capitán del equipo desde hacía unos años.

   El desayuno era el momento favorito del día de la chica. Despertar hambrienta y encontrar la mesa del gran comedor rebosante era considerado por Mayka, uno de los grandes placeres del colegio. Extrañamente, eso era distinto este día. Sentía, con cada bocanada, que no podría tragar más. Así que lo dejó.

   —Más vale que desayunes bien Nott. Tenemos el primer juego de la temporada hoy y contamos contigo —comentó el capitán del equipo, que se acercó sin que la chica lo note.

   —Mira que has mejorado bastante desde las pruebas anteriores. Se lo he dicho a James. Pero de nada sirve mejorar si te desmayas en mitad del partido por no desayunar correctamente —prosiguió su mejor amigo.

   —Nadie va a desmayarse, Black, pero es mi primer juego. Quizás sería más sencillo si algunos no me hubieran apodado Bundimun errante —señaló la muchacha con reproche, lo que provocó únicamente unas pequeñas risillas—. Ahora quiero que vean que puedo ser rápida y también buena golpeando, así los estudiantes dejan de usar ese estúpido apodo.

   —Lo siento, fue mi culpa, pero no puedes negar que te queda bien —habló Sirius, esbozando una amplia sonrisa.

   —Ya, que va, tenemos que jugar Bundimun. Come algo y ven rápido, nos vemos allí —interrumpió James antes de que la muchacha tuviera oportunidad de replicar.

   Al decir esto, los chicos se abrieron paso al gran comedor en dirección a las canchas. Para Mayka, se habían vuelto extrañamente más amables este año. Quizás era porque habían crecido, pero nunca se sabía.

   Unos minutos más tarde, ya se hallaban todos presentes para comenzar el juego.

   «Tenían razón», pensó, algo preocupada. No desayunó bien, y estaba comenzando a sentir dolor de estómago. Sumado a los nervios, no podría sentirse menos preparada. Ignoró esas emociones y se elevó en su escoba al comenzar del juego.

   En un principio, iba todo de maravilla. Mayka golpeó un total de tres veces la bludger. Primero para evitar que golpeen a su amiga Amelia. Después intentó golpear al buscador del equipo contrario, pero sin éxito. El tercer golpe sí que dio resultados al alcanzar al guardián de Slythering, Jacob Lima. Gracias a ese gran golpe, el muchacho quedó inhabilitado para el resto del partido. Mayka sintió que se veía como un pequeño avión de papel cayendo en círculos al suelo, todo gracias a su golpe.

   —¡Buen tiro Nott! Tenemos los aros libres —comentó Brian Graves, su compañero golpeador.

—Parece que la nueva golpeadora de Gryffindor ha encontrado su primer objetivo, y Lima no pudo hacer nada al respecto. Ya llevan al pobre a la enfermería y... ¡Tanto de Gryffindor! Señoras y señores, Black no perdió su tiempo y se hizo con la quaffle —dijo el chico Hufflepuff encargado de relatar cada partido—. El golpeador de Slythering no está nada contento con esto y va en busca de la bludger. ¡Tanto para Slythering! El cazador se había apresurado a atrapar la quaffle e intenta tomar posesión de ella nuevamente, pero le han ganado ¡Segundo tanto de Gryffindor! Amelia Migdon marcó seguida de un golpe de la quaffle que casi le acierta. Mientras tanto, parece que Carrow ha encontrado la Snitch y va en su búsqueda. Potter no pierde el tiempo y se acerca veloz.

   Al oír a Macfusty decir esas palabras, Mayka se apresuró a buscar la bludger para intentar golpear al buscador. Demasiado tarde, la halló en manos del golpeador enemigo, sólo quedaba cubrir a Potter para tomar la Snitch.

   —Burke le da a la bludger, directo a Potter. Los buscadores siguen tras la Snitch, descendiendo veloz hasta casi el suelo, pero Potter saca ventaja luego de empujar a Carrow contra las gradas. La va a atrapar, pero la bludger se acerca. Va a golpearlo y Nott evita el golpe con su bate. ¡Excelente jugada de parte de la golpeadora! Pero una segunda bludger se acerca, la golpea y cae al suelo en picada. Pero ha conseguido su cometido. Potter está a salvo y atrapó la Snitch ¡Ha ganado Gryffindor señoras y señores!

   Vítores y gritos de emoción se hicieron presentes al instante. Mayka sintió el peso de las palabras de Macflusty en su propio cuerpo. Le habían dado en el estómago, que ya estaba vacío. Agradeció profundamente que todos estuvieran ocupados festejando la victoria, porque no pudo soportar más. El peso de los nervios, la falta de sueño y alimento, y finalmente, el golpe recibido en el abdomen comenzaron a hacer efecto y a marearla. Quería correr a la enfermería cuánto antes, pero alguien se interpuso en su camino

 —¡Increíble Bundimun! Ahora ese será tu apodo por lo veloz, nada de errante. Después de todo atrapaste todas ja ja —comentó un alegre Sirius al descender cerca de la golpeadora

   —Se... —Mayka no fue capaz de decir más.

   Se dio la vuelta con intención de alejarse, de una vez por todas, del movimiento y los estruendos de alumnos festejando. Pero no tuvo mucho tiempo hasta que su estómago comenzó a lanzar a tierra, algo que solo Merlín sabrá qué, porque no había comido casi nada. Sirius se acercó junto con otros jugadores que se aproximaban para festejar. A Mayka le pareció sentir que las caras de felicidad se disipaban. O quizás era ella, que comenzó a caer en lo que pareció cámara lenta, a la par que su vista se apagaba cada vez más hasta quedar en la completa obscuridad y silencio.




  Espero que hayan disfrutado este primer capítulo de esta historia. En lo personal fue muy divertido escribir! Espero traer el segundo capítulo lo antes posible. Y espero su opinión en los comentarios!

¡Reencarnada en Hogwarts! Cambiando el destino |𝑆. 𝐵𝑙𝑎𝑐𝑘★| COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora