Capítulo 33

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-No, así no se pronuncia, es Hola.- Corrijo a Jackson.

-Hola.- Dice correctamente Jack.

-¡Bien!, dame un besito.- Me inclino y el besa mis labios con una sonrisa satisfecha.

-Hola, io ser Jackson.- Intenta decir una frase completa.

-Yo soy.- Le corrijo.

-Yo soy Jackson.- Intenta nuevamente.

-Si, exelente mi amor.- Le digo con un una sonrisa mientras lo abrazo.

Bien, la cosa es esta, desde hace un par de semanas, Jackson está tratando de aprender mi idioma natal, el español,  le cuesta pero lo intenta, un día apareció luego de llevar a los niños al colegio con un diccionario Inglés-Español, y decidido me dijo "Quiero aprender español, parece fácil", obviamente me reí pensando que era una broma, pero luego al otro día mientras merendábamos en la Push, volvió a reiterar que quería aprender, así que haciéndonos espacios en nuestras agendas, empezamos con las cosas basicas "Hola", su nombre y su edad, seguimos con las dos primeras y no alcanzamos la tercera todavía, pero es un progreso bastante bueno.

El otro día trato de hablar con mi madre, no le entendió nada y ella a él tampoco, por lo que tuve que intervenir en su comunicación y ser su traductora personal.

-¡Mami!, ¡Mami!.- Los llamados de Mateo sonaron desde afuera e inmediatamente corrí con Jackson detrás de mí para ver qué le pasaba. 

-¿Que paso?- Pregunto mientras los recorro con la mirada en busca de alguna herida.

-¿Podemos ir a la casa del abuelo Billy?.- Mía pregunta con su cara angelical, y ya se que en esta posible batalla Jackson fue derrotado con su hermosa carita. 

-Mía, recién son las ocho de la mañana, de seguro el abuelo está dormido o apenas despertan...- Un llamado en forma de grito hizo que detenga mis palabras, para ver a Jacob, Quil y Embry, viniendo a paso apresurado hacia nosotros, intercambiando una mirada con Jackson nos comunicamos que llevaremos a los niños con Billy.- Vamos a la casa del abuelo.- Les digo con una sonrisa disimulada mientras tomo sus pequeñas manos y caminamos hasta la puerta.

-Abuelo, abuelo.- Gritan en sintonía los niños mientras entran como Pedro por su casa.

-Billy, ¿Sabes que está pasando?.- Le pregunto una vez lo veo mirar por su ventana que da a nuestra casa.

-Jacob me contó por arriba, te recomiendo que vayas querida, al fin y a cabo eres una parte importante de la manada.- Me responde dándome una breve sonrisa mientras se da la vuelta y juega con los niños. 

Dando un suspiro me apresuro a llegar rápido  a casa, al entrar Jackson se encontraba apoyado contra en mostrador con cara indiferente pero con tan solo verlo a los ojos vi su absoluta preocupación, saludando a los tres adolescentes que se encontraban sentados en la isla de la cocina con una excesiva preocupación, me encamine hacia Jack quien abrió los brazos para abrazarme y mantenerme ahí, por lo que considero su propio consuelo.

-¿Que sucede chicos?.- Pregunto rebosante de curiosidad. 

Los tres adolescentes intercambiaron miradas entre ellos y luego miraron a Jackson esperando su veredicto final, este asintió con la cabeza y el que empezó hablar fue Jacob. 

-Hoy de madrugada fue la graduación de Bella y la duende chupa sangre tuvo una de esas visiones extrañas que tiene ella, en la visón se vio un ejército de fríos viniendo para matar a Bella, pero vienen a Forks por lo que los humanos estarán en peligro y como protectores de la tribu es nuestro deber proteger a los humanos, los chupasangre quieren darnos un entrenamiento ahora pero no es como que lo necesitáramos.- Terminó de hablar Jacob y todo quedó en silencio.

DiamanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora