Me salvaste del infierno

927 65 10
                                        

Se encontraba en aquella lúgubre oficina, la luz que entraba desde las grandes ventanas debían hacer que ésta siquiera se sintiera de calida, pero era todo lo contrario.

En su escritorio estaban lo típico en una oficina, un ordenador, papeles, lapicera y demás, aunque lo más importante en ella era aquella foto de hace unos siete años se había tomado con la persona la cual es su persona especial, la que siempre estaría para él en las buenas y en las malas, o bueno, eso se suponía.

Aquél hombre de barba aún recuerda el día en que la conoció, el día que fue su primera cita, incluso su primera pelea, pero la más importante de todas el día de su boda. Un evento que debía ser el inicio de una buena vida en pareja, con un hermoso inicio y que debía ser un “Felices por siempre”.

¡PURA MIERDA!

Después de su increíble luna de miel su vida se volvió un maldito infierno, el peor de todos. Aquélla mujer destruyó todos sus sueños, sus metas, sus malditos anhelos.

Al primer año las cosas iban “bien” lo mismo con el segundo y el tercero, hasta llegar al sexto, fue allí cuando descubrió que su “dulce” y “fiel” esposa se revolcada en su casa con el tipo que era el ex-novio de ella, el que estuvo antes de él. Debido a eso se dió cuenta que esa era la razón por la cuál en siete años no habían podido tener su primer hijo, de que siempre que iban con el médico de confianza de ella, no era ni más ni menos que el amante, el cómplice.

Ese maldito usaba su profesión para hacer lo peor que alguien con ese poder no debía hacer. Con eso, con eso le importa una mierda ser el hombre y esposo perfecto, al principio terminaba en la cama con cualquiera que se cruzará en su camino con el fin de tener una noche con él, ya no le importaba nada, solo que no sería un estúpidos como su esposa.

Así siguió con unos meses, cuando apareció ese chico, el que una vez fue parte de su vida y que por miedo y manipulación de su familia nunca logró decirle cuánto lo quería, lo mucho que anhelaba compartir con él.

Pasó el tiempo y al principio solo eran charlas por el teléfono, luego llegaron las llamadas, continuando con eso las salidas, en todas cada una de las cosas dichas anteriormente eran sobré su fallido matrimonio, le contó que ella solo lo quería por su dinero, por el dinero de la familia y que planeaba quitarle todo y dejarlo sin una sola moneda.

Él siempre lo escuchaba, nunca lo dejaba de lado, pero lo más importante, era quién nunca le daba la espalda, ese chico también sufrió, sufrió por mucho tiempo el no haberle profesado de igual forma el mismo sentimiento. Decidió desaparecer de su vida cuando la gran noticia del año llegó a sus oídos… La boda.

Después de haber compartido tanto tiempo juntos ese sentimiento que nunca se había extinguido del que sólo quedaban unas cuantas chispas volvió a convertirse en un incendio, al principio el chico se resistió, pero le fue imposible seguir rechazando lo y se dejó atrapar por las llamas de la pasión.

◆═════════●★●═════════◆

Sus pensamientos fueron frustrados por el sonido del teléfono que se encontraba al lado suyo.

—¿Qué ocurrió? Erika —le preguntó a la chica del otro lado de la línea.

—Disculpa que te interrumpa, Derek —se disculpó—, pero Jennifer llamó y me mandó a preguntar si asistirás a la cena con tu madres y sus padres.

Derek rodó los ojos, se le había olvidado que hoy cumplirían siete años de casados y que Jennifer había planeado una cena por ello.

—Dile que no podré asistir, que me resultó un viaje de trabajó a último momento —una gran sonrisa cruzó su rostro.

One-Shot FicsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora