Capítulo 46: Razonamiento

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-Cierto... ¿Qué te dijo pies ligeros para que estuvieras con nosotros? – Aquella pregunta hizo que el corazón de Ty Lee se alterara, al menos eso pude sentir en la vibración que emanaba.

-Bueno...es algo complicado, creo que nadie había visto en mi lo que sentía, es decir, no soy una mala persona-

-Mi estancia en esa isla dice algo diferente...- Por si nadie sabía, ella fue mi guardia en algunas ocasiones.

-... ¿Si sabes quién soy entonces? -

-Sí, tú y otra chica iba para vigilarme ambas son buenas en ataques aéreos, por lo que no podía hacerles nada- Aunque en ocasiones y gracias a ellas, ahora el que alguien esté en el aire ya no es impedimento para que no pueda pelear.

-Perdona por todo-

-Escucha, no te rompo huesos solo porque Aang cree en ti, pero no somos amigas o algo por el estilo-

-Bien...-

.

POV Ty Lee.

Caminé por los alrededores, en ocasiones le dejaba comida a Aang quien aún meditaba profundamente, decidí no molestarle y seguí recorriendo toda la isla.

En una noche caminando note que una luz se acercaba, decidí ocultarme hasta que este se acercó mucho a la isla, al visualizar mejor de quien se trataba era nada más y nada mes que Zuko.

Al arribar a la isla este se estiro y observo la isla.

- ¿Quién está ahí? -

Esquive su ataque, al parecer estaba más atento que de costumbre.

-Zuko-

- ¿Ty Lee? ¿Qué haces aquí? – Pregunto extrañado, cosa que me sorprendió dado que no hace mucho el me había visto pelear a lado del Avatar.

-Eso mismo iba a preguntar-

- ¿Estas bien? – Dude un poco, pero note que Zuko no estaba bien del todo, no había sanado sus heridas y estaba ya en busca del Avatar.

-Sí, ¿Tu? -

-Olvida las preguntas, dime que sabes sobre el paradero del Avatar- Exigió este algo desesperado.

- ¿Qué? Te enviaron solo-

-No puedo volver sin noticias, Azula dijo...- Ahí fue donde Zuko cayó en cuenta.

- ¿Si? -

-No...no estas secuestrada, no tienes esposas, ¿Por qué estás tan libre? Caminabas por la isla, estabas vigilando... ¿Estas con ellos? – Se puso en guardia.

-Zuko-

-Maldita sea, ¿Por qué? -

-Larga historia, si piensas pelear sabes que perderás, estas agotado, si estuvieras en tu mejor forma no podría contigo, pero no hace mucho peleaste, además de que estas muy estresado dado que olvidaste que peleaste contra el Avatar, la maestra tierra y conmigo- Él se quedó atónito, apenas y el recordaba eso, lo cual era un mal indicio, seguramente su padre le dijo algo o Azula le hizo algún tipo de cosa, pero Zuko estaba muy mal.

-Pensé que...NO, ya eres una traidora, al igual que Iroh, no hay forma de que pueda ayudarte-

-Estoy mejor lejos de ese lugar- Dije sonriendo.

-Ya no importa, serás ejecutada- Dijo este enojado.

- ¿Dejaste que decidieran eso para tu tío? -

-Así son las cosas...- Menciono el, quede sorprendida ante su actitud tan fría.

-Estas mal Zuko, no sé qué tanto has pasado durante toda tu vida, pero no eres una mala persona, tu padre y Azula te han estado manipulando para que sea algo que no eres- Razone un poco con él, no había forma que el fuera el mismo niño que conocí, lleno de amor y buenos sentimientos.

-Mi honor...-

-Honor esto, honor aquello, ¿Qué es lo que quieres Zuko? – Él no lo pensó y dijo.

-Quiero...capturar al Avatar-

-Está detrás de ti- El volteo rápidamente.

- ¿Qué? -

-Lo siento- Dije luego de darle un golpe.

- ¿Qué? - La tierra lo atrapo, mire a mi alrededor.

-Vaya, nunca pensé que lo hicieras-

-Toph-

-Sentí una vibración diferente y vine en cuanto escuché que un dejo de vibrar- Explico ella, tomo a Zuko y ambas caminamos.

- ¿Preocupada? – Ella negó con la cabeza, supongo que aún no somos amigas...pero ya casi.

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