Olvidado

Capítulo 6: Enojo.

POV Katara.

-¿Por qué debemos ir?- Pregunto nuevamente Jet, estábamos en el dirigible, había una flota pequeña de 3 soldados los cuales eran encargados de mantener esta cosa en el aire.

-Es el Avatar, sabemos que está vivo- Le recordé a Jet, habíamos visto a un sujeto hacer aire control, por lo cual teníamos la esperanza de que el equilibrio del mundo volviera a su normalidad.

-Lo sé, pero pudimos irnos en otra que no tuviera al príncipe desterrado- Menciono señalando a Zuko.

Estuvimos ocultos un rato hasta que decidimos caminar un poco por el dirigible.

-¿Qué hacen ahí?- Pregunto el desterrado, ambos nos pusimos nerviosos y notamos que el príncipe estaba esperando una respuesta.

-Señor, nosotros...- Jet se levantó rápidamente e hizo un gesto de saludo.

-¿Quién los envió? Dije específicamente que...- Jet rápidamente le interrumpió.

-Señor, si algo llegara a pasarle no podrían enterarse los demás, nosotros no interferiremos en su camino- Fue una buena excusa incluso el príncipe lo pensó un poco antes de seguir regañándonos.

-...-

-Bien, arreglen todo y dirijan el camino, iremos al primer templo del aire- Dijo luego de un rato.

-¿Por qué a ese lugar?- Pregunte con cierto temor.

-El avatar es el ultimo maestro aire, por lo tanto seguro tendrá algún tipo de lugar secreto en ese templo- Menciono el príncipe.

-Ya veo- Dije pensativa.

-No más charla- Ordeno y siguió a sus asuntos, Jet y yo nos miramos y nos fuimos a buscar en algún lugar del dirigible algún tipo de forma de salir en cuanto sea el momento.

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POV Aang.

-¿Qué paso aquí?- Al llegar al templo todo lucia algo viejo, quizás se habían mudado o algo por el estilo, sin embargo me parecía extraño, no me había tanto tiempo, quizás solo unos días o semanas.

-¿Hola?- Hable, camine por todos los lados del templo.

-No lo sé amigo, todo luce diferente- Le dije a Appa quien gruño un poco, encontré un balón de mi juego favorito, recordé lo bien que la pasaba con mis compañeros, incluso cuando arrojaba tartas con mi amigo Gyatso.

-¿Cascos? ¿Qué harían unos cascos aquí?- Mire que había unos en el suelo, cubiertos de nieve y algo quemados.

Caminando un poco llegue hasta uno de los cartas, había esqueletos y uno en particular llamo mi atención.

-Gyatso...- Mire el emblema que tenia del elemento aire, al darme cuenta de todo, me encontraba en el centro de una pila de esqueletos, todos de soldados y amigos nómadas.

-Nos abandonaste...- Se me hizo un nudo en la garganta, ¿Qué había pasado aquí?

-Nos dejaste...- Escuchaba una voz que me hablaba de la nada el esqueleto inerte se movió, se arrastraba hacia mí.

-Huiste- Caí al suelo mientras moraba como el esqueleto de mi amigo se movía, ¿Qué paso?

-¿Por qué nos dejaste Aang?- No hui, todos me presionaron tanto, la tormenta no me dejo regresar.

-Yo...- No pude articular palabra alguna.

-¿Qué ha pasado?- Sali de aquel lugar y me encontré con unos soldados, al verme se alertaron y supe que eran maestros fuego.

-¡¿QUÉ FUE LO QUE HICIERON?!- Perdí el control de mi mismo.

Sin saber cómo note que empecé a brillar, los soldados me miraron asustados, no siquiera tiempo tuvieron de escapar cuando le arroje una ráfaga de aire, no deje que cayeran al suelo y los arremetí contra los muros, no deje que tocaran el suelo, seguí impulsando la fuerte corriente de aire hasta que la misma rompió los muros del ya tan lastimado templo.

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"La ira es la emoción más fuerte, en otro universo, el avatar tenia a una chica que le consolaba en sus momentos mas tristes, pero sin ella, ahora es una emoción errante siendo liberada, esos soldados no vivirán mucho, no hay quien detenga esta fuerza poderosa"

"Miren al héroe de la historia perder el control, solitario, sin poder hacer nada, nada mas que liberar su enojo, incluso si eso implica la destrucción de un templo y también...la muerte"

POV Katara.

-¿Qué es eso?- Señale una luz.

-Es el Avatar, dirígete hacia halla, lo capturare y de esa forma recuperare mi honor- Dijo el príncipe golpeando el tablero, apunto a la dirección y el dirigible fue en camino aquella luz.

-En camino-

Mire a Jet quien me devolvió la mirada, estábamos seguros de que algo estaba pasando con el Avatar y si Zuko llegaba no iba a ver nada que lo detuviera, no sabíamos de la capacidad del príncipe desterrado pero sabíamos que si era de la nación del fuego, él era un problema.

-¿Qué es eso?-

Una ráfaga de aire impacto contra el dirigible, era una tormenta la que nos atacaba y podíamos ver un punto brillante el cual llamaba la atención de todos.