Conar
La puerta de madera de caoba resiste los embates, alguien del otro lado golpea con fuerza y trata de entrar.
La manija se esta moviendo violentamente. Sin apartar la mirada me pongo lo que parece una pijama que encontré guardada entre una caja dentro del armario. Era un pantalón de rajas y una camisa blanca.
La herida de la puñalada aun me duele pero no le doy demasiado importancia. Algún dia dejara de doler.
Me concentro en mantener la calma. Debo actuar con sangre fría o todo se va a ir al cárajo. Estiro mi mano sobre la pistola que descansa en la mesita de noche.
Abby esta sentada en el suelo y me mira con los ojos muy abiertos.
El miedo parece emanar de ella como una especie de oleaje constante, como si fuera parte de su aura.
Dudo que eso exista.
Nunca he sido un hombre espiritual mas bien soy del tipo que se guía por principios, por las leyes humanas. Por el largo brazo de la ley y por el equilibrio en la balanza de la justicia.
Sin embargo, con la caída del mundo he tenido que plantearme ciertas cosas.Mantengo los ojos en Abby y su mirada tiene una mezcla de agudeza y terror, su cabello rubio cae desordenado sobre sus hombros cenicientos, y la forma en que esta sentada, con las piernas ligeramente cruzadas; con la espalda recta, le otorga un aire sensual a su cuerpo escultural.
Aprieto los dientes.
Algo en mis pantalones se retuerce.
Suspiro al sentir el latigazo doloroso.
La sangre caliente inunda mi cuerpo y de repente me doy cuenta que suelto respiraciones temblorosas.
Deseo tanto tocarla; cariciar su cuerpo magestuosamemte lleno de curvas, morder sus labios carnosos ...
Deleitarme con sus pequeños gemidos entrecortados.Aparto la cabeza de forma exasperada.
No es momento para pensar en algo así.
Hay algo que nunca había percibido en ninguna otra mujer y lo noto en ella.
¿Que podrá ser?
Me pregunto constantemente sin conseguir una respuesta satisfactoria.
La he visto moverse en situaciones limite con una destreza extraordinaria. Hemos estado rodeados de estos muertos ambulantes y ella no es de las que retroceden. Al contrario, es capaz de lanzarce contra ellos y defendernos.
Ha hecho mucho por mi en este corto tiempo que hemos estado juntos.
La miro de nuevo con disimulo y debo decir que me sorprende.
¡Que mujer!
Habría sido un prodigio en la policía...
Intento ocultar una sonrisa Imaginandola vestida como una oficial..
Que imagen tan excitante...La puerta vuelve a estremecerse con otro golpe.
Entonces camino despacio con la pistola entre mis manos extendidas.
—¿Porque haces tanto ruido?—
Inesperadamente se escucha decir, pero la voz es en un tono acusador—Me pareció escuchar el grito de una mujer...
Estoy congelado.
Claramente eran hombres los que estaban del otro lado. Hubiera preferido mil veces que fueran algunos de esos muertos que andan por ahí.Miro a Abby y ella consciente del peligro inminente se lleva las manos a la boca; pero no emite ningún sonido.
—Estas seguro?—Continua la primera voz
—Claro, estupido—Contesta el otro interlocutor.—¿Que debemos hacer?Hubo un silencio prolongado hasta que la primera voz añade con un tono bastante tranquilo.
—¿A quien llamaste estúpido?—
—A ti, estúpido...
Con ese intercambio de palabras vienen un par de sonidos amortiguados.
Parece que esos sujetos se estaban golpeando.—¿Que pasa con ustedes dos—Irrumpe otra voz mas grave.
Alguien mas había llegado y por su tono era innegable que tenia autoridad sobre esos dos.—No es nada Luther, es solo que este inutil dice que escucho el grito de una mujer del otro lado. Pero la verdad no creo que quede nadie aquí..
—Me estas diciendo mentiroso?—Rezonga el que escucho a Abby.
—Solo digo que aveces te imaginas cosas...
ESTÁS LEYENDO
El Club De La Dimensión M
Horror[En proceso] Sipnosis: ¿Como reaccionarias si un día despiertas y te encuentras con que el mundo, que conocías se cayo a pedazos?