La bastarda roja ||Versión Black.

Capítulo 7.-Viniste.-

Narrador omnisciente.

-¿Daemon pidió ayuda?-Pregunta Alyrya a sir Christopher.

-No exactamente.-se ríe su guardia.-Uno de sus soldados lo hizo.-

-Informale al rey, por favor.-Pide Alyrya mientras arrulla a Viserya que ya estaba cumpliendo tres años.

-Están listos para salir.-le informa.

-Entonces hazlo ahora.-Brama mientras empiezan a caminar.

Aelor aparece cuando salen al pasillo, tomando a su hija en sus brazos.

-Qué suerte que apareciste. Debo ir por Aegon.-

-Ve.-Le dice Aelor mientras besa a la bebé que balbucea.

Alyrya corre por los pasillos hacia la habitación de Alicent.

-¿Dónde está mi sobrino?-Clama apenas ingresa.

-Alyrya.-La saluda Alicent.

Luego de estos tres años y un niño de por medio, ambas decidieron hacer las pases. Alicent agradecía enormemente que Alyrya amara a Aegon como su sobrino. Se había disculpado infinidad de veces por lo de Aelor y el veneno, pero Alyrya tenía en claro que era culpa de Otto.

-T..ía.-Balbucea Aegon estirando las manos hacia ella.

-Taoba.-Lo saluda Alyrya tomandolo entre sus brazos.-¿Cómo está mi bebé precioso?

-Acaba de comer, tal vez duerma todo el camino.-le sonríe Alicent tomando su enorme panza.-¿Viserya?-

-Con Aelor.-Contesta Alyrya mientras juega con Aegon.-Debemos irnos, mi reina.-

-Claro.-

Alicent se había arrepentido enormemente de seguir las órdenes de su padre, Alyrya era verdaderamente una buena persona. No una perra como decía su padre.

Cuando suben al carruaje, Alyrya deja a Aegon en el suelo que juega muy alegre con Viserya. Escucha la conversación de Rhaenyra y Viserys pero se abstiene de opinar algo, Aelor observa a los niños jugar alegres haciéndolo sonreír.

Al llegar al campamento, todos los reciben, entran a la carpa y los sirvientes no esperan para empezar a atenderlos con diferentes comidas y bebidas. Alyrya se mantiene a un lado de Viserys escuchando a todos los chupa medias que venían a pedir la mano de Rhaenyra.

-Hermano, permiteme.-Viserys asiente mientras toma de su copa.

Alyrya se levanta y camina hacia la sirvienta que Juega con Viserya y Aegon.

-Laila, me los llevo. Descansa.-

-Gracias, princesa.-Le agradece.-Tienen demasiada energia.-

Alyrya sale de la carpa con ambos niños de sus manos, para que juegen un poco en la tierra. Los niños deben ensuciarse, buscando a Aelor con la mirada lo ve, charlando animadamente con Deborah Lannister, la rubia toca de más el fornido brazo de su esposo, haciendola rabiar en silencio, suelta a las pequeñas bestias que tiene en sus manos y da un suspiro, antes de acercarse donde pueda verlos sin molestarlos.

-¿Ese no es tu esposo?-Indaga Harwin mirandola burlón.

-Cierra el pico, idiota.-Brama fastidiada.-Que se la coja. No me interesa en lo absoluto.-

-Eso conmigo no te habría pasado.-

-Me quedaré con la duda, sir.-Ambos ríen como tontos.

-¿Quieres que finja estar ebrio y le tire una copa de vino en el vestido?-Pregunta codeando su brazo mientras se acerca.