Una chica extraordinaria

33. El juicio

Pov Poché

Los días que le siguieron a la noche de la final, fueron bastante movimos e incluso emotivos. Primero Vale tuvo su musical y junto a Daniela, su familia y mi mamá estuvimos en primera fila, fue sin duda un show espectacular. Mi mamá no podía dejar de llorar porque había pasado muchísimo tiempo desde qué había podido verla en una presentación. Y por mi parte yo sentí mucho orgullo, porque a diferencia de ocasiones anteriores, Valentina y yo ya habíamos logrado arreglar nuestras diferencias. Ese mismo día en la noche fuimos a cenar para festejarla y fue una noche muy linda. Yo continúe con mis ejercicios para poder regresar a jugar y mientras yo entrenaba en casa, Daniela comenzó a regresar paulatinamente a los entrenamientos. Mi hermana comenzó con los ensayos para el show de Maria Becerra y estaba muy feliz. Y por último Daniela y yo celebramos nuestro primer mes como novias, justo ese día ella había tenido entrenamiento y yo le pedí a Mafe que la invitara a salir para distraerla y que no llegará temprano al apartamento y aceptó a regañadientes porque no quería que estar lejos de mí en nuestro primer mes como novias. Mientras ellas salían, yo aproveché de comprar las cosas que necesitaba para sorprenderla con una cena, preparando una pasta acompañada de vino y con cheesecake de postre. Decore el apartamento con globos de corazones y además compré unas velas aromáticas para ambientar todo. Cuando vi el resultado me sentí orgullosa y más cuando vi la reacción de Daniela, después de todo había valido la pena tenerla lejos durante nuestro día.

*flashback on*
Pov Daniela.
Me sentía muy frustrada y estresada, hoy era un día especial para Poché y para mí; y lo que menos había podido hacer era pasar tiempo con ella, primero porque tenía entrenamiento y luego porque a mi mamá se le ocurrió la brillante idea de que la acompañara a hacer unas compras y luego que fuéramos a almorzar juntas y aunque quise no pude negarme ¿por qué? porque empezó a decir que desde que estaba de novia solo me la pasaba con poché y ya ni pasaba tiempo con ella. Que estrés mk.

—¿Puedes quitar esa cara de amargada? Ya estamos llegando — Dijo mi mamá de manera divertida.

Y aparte se ríe de mí, no puede ser.

—No tengo cara de amargada, es solo que quiero llegar pronto al apartamento. — Conteste sonriendo, pensar en Poché me hacía feliz.

—Ya casi llegamos Dani, por cierto ya pareciera que vives allí, ni has estado en casa de tu papá. — Dijo riéndose sin despegar la vista de la calle mientras manejaba.
—Es que a veces nos quedamos en la casa y otras veces en el apartamento de Poché, pero últimamente hemos estado más en el apartamento. Me gusta como es nuestra convivencia.
—Yo creo que en menos de lo que pensemos, van a estar viviendo juntas. — Respondío estacionando el carro del edificio — En fin, ya llegamos, gracias por haberme acompañado, te amo hija. — Agregó y se acercó a besar mi frente. Me despedí dándole un abrazo y bajé rápidamente para ir con mi amor.

Entre al edificio saludando al celador y tomé el ascensor privado para llegar al último piso, que daba directo a su apartamento. Al salir de la caja metálica me fije en que en el piso habían unas flechas que apuntaban hacia el apartamento y abrí los ojos sorprendida. ¿Acaso...?

Caminé emocionada, porque eso solo podía significar que mi amor me tenía una sorpresa. Y efectivamente, al llegar a la puerta había un letrero que decía:

"Hola mi chiqui, bienvenida a nuestro hogar, para poder entrar debes tocar 3 veces y estar preparada para tu regalo, feliz primer mes de toda nuestra vida juntas. Te amo".

Y en la nota habían muchos dibujos de corazones, era una nota muy tierna, con mi celular le tomé una foto para guardarla de recuerdo e hice exactamente lo que me pidió, instantes después abrió la puerta dejándome verla y sin esperar más tiempo la besé.