El Juego Del Amor

Capitulo 10

A la mañana siguiente el ruido que provenía de la calle logró despertarme, abro los ojos lentamente, pero vuelvo a cerrarlos, la comodidad me gana, realmente no quiero levantarme. Hace mucho no dormía así, me remuevo en la cama, estrechándome a lo que estoy abrazando.

Un momento... ¡Estaba abrazada a alguien!

Abro los ojos de golpe y lo primero que veo es a Sang Woo dormido a mi lado. Mi cabeza estaba apoyada en su pecho y su mano estaba tocando mi espalda. Sus ojos cerrados, viéndose tranquilo. Me levanto despacio para no despertarlo, me puse las zapatillas y salí del cuarto. Después al baño, hice lo que tenia que hacer para salir del departamento.

Necesitaba tomar una decisión, tomar la oportunidad de regresar a los juegos o no. Y mientras más lo pensaba, más ganaba la negativa.

**

Narra Sang Woo

Cuando despierto, Eleonor ya no estaba a mi lado. La llame un par de veces, salí de la cama para buscarla por todo el departamento, pero no había rastro de ella.

En medio de la soledad y cuando estaba convencido de que no se encontraba por ninguna parte, saqué una soda de la nevera y me senté en el sillón.

"¿Por qué te fuiste?"

En medio del silencio susurré en voz baja. No estaba, y yo solo espero que regrese.

**

Narra Eleonor

Veo a los niños corriendo y jugando entre ellos en medio del parque, sus mamás juegan con algunos de ellos. Sonrió al ver la escena. Mis ganas de algún día ser mamá crecen al presenciarlos. Pero son rotas cuando regreso a la realidad en la que estoy. ¿Cómo lo mantendría? ¿Qué clase de futuro podría darle yo? Si algo tenía claro es que si llegara a tener a mi hijo o hija, no iba a dejar que pasara por todo lo que yo pase. No lo permitiría.

La única manera de tener dinero para cumplir mis sueños es entrar nuevamente al juego. Por otro lado también pensaba en Sang Woo, se que no estuvo bien el irme sin decirle nada, ni siquiera dejándole una nota. Pero hago bien en alejarme de él, es alguien bueno, y no me gustaría que mi ex jefe le haga daño, si es que él regresa a los juegos.

Debo hacerlo.

**

Narra Sang Woo

Veo el mercado de pescadería de mamá, mientras me oculto detrás de un puesto para que no me vea. Se le ve feliz atendiendo su negocio. Se lo abrí cuando comencé a ganar dinero y ahora de igual manera yo mismo lo hipoteque, al igual que la casa y mi departamento. Todo sin su consentimiento. Ella aún no lo sabe. Me duele que se entere de lo que tuve que hacer.

Necesito volver a entrar a los juegos.

"¿Sang Woo?, ¿Qué haces aquí?" Asustado, me doy la vuelta rápido al escucharlo. Es Gi Hun.

"Solo observo." doy una rápida mirada a él, que me mira confundido antes de volverla a mi madre

"Tu mamá aun no sabe nada" lo escucho decir

"No, y espero que no lo sepa nunca."

Estuvimos en silencio unos momentos más antes de escucharlo suspirar sonoramente.

"No puedo creer que estés endeudado. ¡Tú eres el orgullo de Ssangmun-dong!" exclama con entusiasmo

Lo está diciendo de nuevo.

"Yo no soy el orgullo de nadie. Así que, por favor deja de decir eso." le digo agotado

Gi Hun mira con una mueca "Vamos. Te invito a tomar un café."

Acepté su invitación. Y mientras Gi Hun recogía nuestros pedidos, lo espere sentado afuera del puesto, decidí ganar tiempo y prendí un cigarrillo.

"Tu... ¿recibiste la tarjeta?" se acerca, dándome la bebida caliente y permanece de pie a mi lado.

Levanto la mirada "¿Para regresar?" Gi Hun asiente "Así es"

"¿Y lo vas a hacer?" suena entre sorprendido y inquieto

Yo asiento una vez más sin ninguna duda, fumando del cigarro. "No tengo opción. La policía me busca y tengo que pagar la deuda, sino le quitaran el negocio y la casa a mamá"

Él permanece en silencio analizando mi decisión "Sí, entiendo."

"¿Y tu?" pregunté a mi antiguo amigo

"No lo se aun. Pero quiero ayudar a mi mamá, y necesito ser un buen papá para mi hija." se toma una pausa corta "Necesito pensarlo."

Asentí como respuesta sin decir nada.

Voy a regresar a los juegos. ¿Volveré a verla allí dentro? Quiero y espero volver a verla. Me importa demasiado reencontrarme con ella y poder protegerla tal como se lo prometí.

**

Narra Eleonor

En medio de la noche, la idéntica camioneta negra estacionó frente a mí, justo como la vez anterior.

"Luz roja, Luz verde." dije, no tenían que indicarme esta vez lo que tenía que hacer.

Abrieron la puerta, dejándome entrar. La cerraron de inmediato. El humo volvió a expandirse en el interior el auto, hasta conseguir que me quedara dormida.