El Juego Del Amor

Capitulo 38

El otro día pasó natural, podía decir que fue el día más normal que pasamos desde que entramos aquí, y eso fue por la falta de gente y porque muchos seguían algo ajenos desde el último juego. Cuando llegó el momento al día siguiente, llego el quinto juego.

Esa mañana nos despertaron con la misma música, y entramos a una habitación. Donde sería el juego.

'Bienvenidos al quinto juego. Por favor, escojan a su compañero de equipo. Tienen 10 minutos.'

Ya no cometería el mismo error que la vez pasada. Mire a Sang Woo a mi lado.

"Sang Woo..."

"Sera mejor que busquemos a otras personas para jugar. Ya sabes lo que estos maniáticos son capaces de hacer. Si este juego es como el de las canicas, tú y yo moriremos."

Suspire hondo y le di la razón

"Tienes razón."

"Busquemos a otras personas para hacer equipo."

Yo solo esperaba que nuestra hipótesis fuera correcta. ¿Pero quien querría? Gi Hun y Sae Byeok se fueron a buscar pareja también, pues habían estado de acuerdo con Sang Woo.

Diez minutos solamente para buscar pareja no era mucho tiempo, ni tampoco habia muchas opciones. Buscaba a alguien con quien jugar con Sang Woo caminando cerca de mi, en eso Mi-nyeo se acerca a nosotros.

Ahora no tenía tiempo para ella de nuevo. ¿Cuándo dejaría de fastidiar?

"¿Que dices? ¿Ahora si vamos a tener nuestro duelo de putas?"

Volteo a verla sorprendida...

"¿Qué es lo que acabas de decir?"

Ella se acerca hasta quedar a centímetros de mi rostro, con ese aire retador. Yo por supuesto no me quedo atrás y le mantengo la mirada.

"Te reto a jugar conmigo."

Me desafía ella

"Amor, no aceptes."

Escucho decir a Sang Woo No le hice caso.

"Bien, esto es un duelo."

Acepté sin dejar de mirarla a los ojos.

"Ganará la mejor."

Continúa diciendo ella con una sonrisa egocéntrica.

Volteo a ver a Sang Woo, pero él solo se marcha, al parecer esta enojado por no hacerle caso, después hablaría con él, ahora solo me concentraba en la chiflada frente a mí. Suspire, los minutos pasaron hasta cuando el tiempo se acabó.

Nos llevaron a otro cuarto, habían varias mesas repartidas en el suelo de forma ordenada, con muñecos de ajedrez rojos y azules, algo diferentes y extraños de los que solía ver usualmente.

'Esto es el juego del ajedrez. Cada jugador, con su pareja se sentara y jugaran este maravilloso juego. Él que café se convertirá en el ganador. Tienen 30 minutos. Que comience el juego.'

"Carajo"

mascullo Mi-nyeo

Supongo que podía interpretar eso como una ventaja. Efectivamente hay que ser muy astuto e inteligente para este juego. Me senté con mi compañera en las mesas de adelante. Teníamos 30 minutos para jugar, busco a Sang Woo con mi mirada y lo encontré jugando con alguien, por suerte había encontrado a alguien con quien competir.

"Empecemos ya."

Dijo Mi-nyeo, pasando las manos por su rostro sudoroso y por los rizos de su cabello.

Asentí

"Bien."

comenzamos a jugar.

La verdad, no me consideraba mal en esto, no era una experta pero al menos podía defenderme en este juego. Pasaron varios minutos y íbamos empatadas. Faltaban 9 minutos para terminar y ya se habían comenzado a escuchar los disparos. Señal de que ya muchos habían comenzado a perder.

Le quite otro castillo a Mi-nyeo, la escuche soltar una maldición y yo no le hice caso. Continuamos jugando, hasta que por fin le gane...

"¡Jaque mate!"

En serio le había ganado la partida. No podía con la emoción. Después de un momento en el que pude controlar las emociones dentro de mí, volteé hacia ella y tenía los ojos cerrados, de forma imprevista los abrió de golpe y se puso de pie.

"¡Maldigo tu suerte!"

chillo furiosa, sabía que estaba entrando en pánico por lo que ahora iba a pasar

"Yo sin embargo no lo hago, todo lo contrario. ¿Y sabes por qué?"

Ella se queda callada, casi podía ver cómo echaba humo de lo furiosa

"Porque no siento rencor por ti, a pesar de querer robarte a mi novio."

"Vamos, juguemos otra vez, entonces. Tengo un hijo, recuerda."

Me tomó de los hombros insistentemente para convencerme.

Miró en dirección al reloj.

"No hay mucho tiempo. Lo siento."

Me doy la vuelta, escuchando los gritos de esa loca insultándome y acusándome de haber hecho trampa y al mismo tiempo exigiéndome otra ronda para la revancha. Podía seguirla escuchando cada vez más lejos y sus gritos se volvieron ecos, sabía que en cualquier momento iba a suceder.

Cerré los ojos, esperando el momento, hasta que escuché un disparo directo que hizo que esos gritos cesaran.

Entre al cuarto donde ya estaban Sang Woo junto con Gi Hun y Sae Byeok, estaba feliz de que ellos estuvieran vivos. Corrí prácticamente hacia ellos.

"Me alegra verlos bien a todos."

Ellos me sonrieron.

"Al parecer te toco con esa la loca."

Dijo Sae Byeok

Asentí y mire Gi Hun

"¿Estas bien, Gi Hun?"

Él afirmó con la cabeza y me sonrió a boca cerrada

"Estoy feliz de que tú también estés a salvo."

"Bueno, no fue tan difícil ganarle."

Voltee a mirar a Sang Woo, él estaba sonriéndome. Me acerco a él y le doy un beso en la mejilla.

"Otro juego ganado."

Murmuré con mis manos en sus hombros.

"Otro más."

Afirma sin dejar de sonreírme.

"¿Deberíamos ir a festejarlo no lo crees?"

Susurre con emoción en su oído.

El asintió cómplice

"Claro. Solo quiero estar contigo."

Y espere para que así fuera. Hasta la hora en la que apagaron las luces. Felices y festejando solo de la manera en la que nosotros podíamos hacerlo, siendo prudentes, sin que nadie escuchara.