Capitulo 20

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Pronto todo se volvió una masacre entre la oscuridad. Las personas comenzaron a matarse unos a los otros. Salí de la cama, quería correr e ir al punto acordado, pero alguien me toma del brazo.

De inmediato pensé en Sang Woo, él dijo que si no aparecía vendría a buscarme.

“Sang Woo eres-“

“¡No soy el imbécil de tu macho!”

El solo escuchar el sonido de su voz me hicieron temblar.

Kang Mi me jalo hasta la pared bruscamente y pude al fin mirarlo a los ojos.

“¡Muy bien, chicos! ¡Sigan haciendo lo que les ordene!”

le dijo a su equipo que estaba a su alrededor. Ellos se van, dejándome sola con él, estaba arrinconada contra la pared.

“¿Qué planeas hacerme?”

sone temerosa al verle la mirada

“¿No qué eras muy valiente, zorrita?”

me toma del cabello

“Enfréntame como lo estabas haciendo antes… o ¿es que acaso solo te hacías la valiente frente a tu nuevo cliente en turno?”

Al terminar de decir eso, me tira al suelo y me da un golpe en el estómago, de inmediato el dolor me invade.

“¡Ay!”

chille cuando el segundo golpe llegó

“¡Ya basta! Mi equipo vendrá, idiota.”

“Tu equipo no te va ayudar, ¿y sabes por qué?”

me jala más fuerte del cabello, acercándome a su rostro

“Porque estan mas ocupados por salvarse ellos mismos, que a ti, puta de mierda.”

me pega un puñetazo en el rostro

“Ahora si me voy a divertir contigo.”

Solo rogaba porque Sang Woo me venga a ayudar.

Narra Sang Woo

Nos vinieron a atacar como lo habíamos pensado. Estábamos reunidos donde se suponía que era el punto de reunión, pero Eleonor ni el abuelo estaban.

“¡Gi Hun, ¿me escuchas?!”

lo llame en medio del alboroto, esperaba que estuviera cerca, casi no podía verlo

“¡Sí te escucho!”

Gritó al igual que yo

“El abuelo no está, tampoco Eleonor. No los veo por ningún lado. Iré a buscarla, fíjate con Ali si encuentran al viejo.”

“¡Entendido!”

Como puedo, me voy a buscarla. Todo estaba descontrolado y las luces no paraban de parpadear haciendo esto mas imposible de ver. Habían varios jugadores que intentaban golpearme, pero yo pude alejarme y defenderme lo más rápido que podía. Tenía que encontrar a Eleonor. Pase por varias personas entre tanto alboroto.

Cuando por fin llegue a donde se supone que debía estar, la vi. La estaba golpeando el maldito de su jefe. Corrí hacia ella.

“¡Ey, suéltala!”

Narra Eleonor.

Escuchar su voz me hizo pensar que era un sueño. Me descubro los brazos y abro los ojos lentamente. Sang Woo lo tomó de la sudadera, lo golpeó con una barra de metal y lo tiró hacia el otro lado. Me ve en el suelo y me toma de los brazos para ayudarme.

“¿Estás bien?”

sonaba preocupado.

No lo estaba, él había sido muy violento. Me dolía todo el cuerpo y el rostro. Se había enganchado conmigo.

“No. No lo estoy.”

contengo las lágrimas.

“Tranquila.”

entonces me abraza fuerte

“Ya estoy aquí. No debí tardar, perdona.”

En medio de su abrazo, logró ver a Kang Mi levantarse con velocidad y agarrar una barra de metal, acercándose a Sang Woo inmediatamente.

“¡Cuidado!”

Ambos nos separamos, pero de nada me sirvió advertirle. Él golpea a Sang Woo en su espalda, haciéndolo caer al suelo.

“¡Maldito imbécil!”

lo insulta mi jefe volviendo a reponerse, suelta su arma y comienza a avanzar a mí. Podía haber huido en ese momento, pero no podía dejar a Sang Woo, no podía hacerlo. La barra de metal que tenía Sang Woo había caído al suelo y la tomé entre mis manos.

Cuando Kang Mi estába por golpearme, le propenso un golpe en el estómago, haciendo que grite del dolor.

“¡Hijo de puta!”

aprovechó que está herido y lo golpeó una y otra, y otra vez.

“¡Infeliz!”

Cada golpe fue por todo lo que me había hecho, a mí, a Sang Woo, y por todos los años de humillación.

Cuando ya no pudo intentar levantarse por el dolor que le ocasione, cuando ya solo podía soltar alaridos de dolor en el suelo. Me apresuré a ayudar a levantar a Sang Woo, pues se estaba esforzando por levantarse. 

“Tenemos que irnos de aquí. Vamos con los demás.”

Intente ayudarlo pero él no me dejo. Después de que se le pasara el dolor, me tomó de la mano.

“Ya no nos separaremos mas.”

Dicho esto, íbamos a irnos, cuando de pronto se nos ponen en frente dos tipos, pude reconocerlos, eran los ayudantes del bastardo de mi ex jefe. Sang Woo de inmediato me pone tras de él tratando de defenderme cuando nos rodearon sin dejarnos salida.

Dios mío, quisiera que esto terminara ya.

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