La Constelación Dorada. [TRILOGÍA DE ÁNGELES Y DEMONIOS] I

Capítulo 53: Descenso.

Tres meses después...

Mikael estando sentado en una silla seguía moviendo su pierna frenéticamente, terminaría rompiendo el suelo si continuaba, en su habitación miraba el reloj, viendo como ese tic tac marcaba incesantemente las horas pasar y a las seis en punto de la tarde la gran puerta del palacio fue abierta para dejar pasar a Luny, quien de inmediato fue con Garrett que curó todas sus heridas, Mikael seguía mirando cómo llegaba de la jodida escuela bastante lastimado, había prometido con Grayson no leer su mente pero realmente ya estaba empezando a desesperarse.

Risha llegó por su espalda y lo abrazó.

—No me vayas a pedir que me calme.

—Vale. —dijo Risha junto con una risita.

—Risha... ¿Tu sabes algo de esto?

—No... —le respondió dándole la vuelta a la silla en dónde estaba sentado Mikael y lo miró—. Luny no me dice nada de lo que le pase, tiene más confianza contigo, supongo... —Mikael soltó una risita.

...

Ese día cuando se puso el sol cómo era de habitual, Luny se escabullía del palacio yendo hacia el mundo humano quedándose horas mirando la luna. Mikael cruzó el portal y caminó lentamente hasta quedar junto a él, respiró profundamente y lo miró.

—Necesitamos hablar —le dijo seriamente—, deja tu forma de animal. —soltó junto con un suspiro, Luny a pesar de que no quería le obedeció y se sentó en el suelo sin quitarle los ojos a la brillante luna que estaba frente a ellos—. ¿Que ha estado pasando, Luny?

—Nada.

—Llegaste hoy con un brazo roto. La semana pasada llegaste con varias heridas, y eso se ha venido repitiendo en los últimos meses —se notaba en el tono de su voz que estaba molesto— ¿Que está pasando? —volvió a preguntar ya con su paciencia llegando al final.

—Papá...

—Sino me dices lo averiguaré yo mismo. ¿Quien es él que te ha estado lastimando tanto, Luny? —él por su parte no quería responder, no le gustaban los problemas pero sabía que seguir ocultandolo de su padre era peor...

—Haiden... —dijo al final y comenzó a juguetear con sus dedos—. No se que es lo que tiene conmigo —sin quererlo comenzó a llorar eso empeorando la situación ya que la mirada de Mikel se oscureció, estaba mucho más molesto ahora—, siempre que estamos haciendo el entrenamiento solo me pega a mi.

El silencio que hubo hizo que Luny se sintiera mal, mientras tanto, Mikael quien apretaba fuertemente su mandíbula, escuchaba pacientemente a Cesil y Mikanel pelear en su mente, el primero quería llegar a una solución adecuada, creía que con una charla con café y galletas todo se solucionaría y el segundo solo quería ver sangre correr por todos lados.

Mikael suspiró cuando el que ganó la discusión por mucha más ventaja fue Mikanel. Cesil había aceptado.

Sin duda habría sangre.

—Vale... —dijo simplemente, Luny lo miró, Mikael tenía el seño fruncido y la mirada fija en la luna, sus manos estando fuertemente apretadas dejaban ver su furia interna.

—¿No me habías dicho que podía entrenar con el tío Gratt? —dijo de repente, Mikael lo miró.

...

Mikael había pasado cerca de veinte minutos estando dentro del bosque de Gratt, se detuvo cansado y escuchó una suave risa cerca de él y el camino se abrió frente a él, frunció el seño cuando llegó a la casa de Gratt y lo consiguió colgando de cabeza de la rama de un árbol con los ojos cerrados respirando profundamente.

—No me mires así de feo Mikael, solo estoy relajándome. —dijo sonriendo.

—Interesante manera de hacerlo. Gracias por hacer que un árbol creciera frente a mi —dijo con gracia señalando su ropa manchada de su propio sangre—, fue un bonito detalle de tu parte romperme la nariz.

—Yo no decido dónde crecen mis árboles, ellos crecen sin más.

—Si claro, y yo soy demonio completamente. —Gratt rió.

—¿A qué vienes, Mika? —inquirió bastante curioso.

—Luny quiere entrenar contigo. —Gratt abrió los ojos y sonrió.

—¿Por qué no le dices que le pregunte a Grayson antes de hacerse esa maldad? —bromeó pero al ver la seriedad que tenía Mikael delante de él dejó de sonreír, Gratt frunció el seño cuando notó que la protección de su mente no era tan fuerte como recordaba viendo todos los recuerdos que tenía dándose cuenta de su molestia y de su seriedad—. Dile que venga mañana a primera hora... —bajó del árbol y fue hasta donde estaba Mikael mirándolo con seriedad— solo.

...

Luny en la mañana en lugar de ir por el mismo camino hacia el edificio central en dirección a la escuela desvió sus pasos para adentrarse entre el bosque para ir a la casa de Gratt, atrayendo la mirada de todos sus compañeros, incluído Haiden, quien lo veía receloso preguntándose a dónde iba.

Luny se detuvo cuando sintió que ya estaba caminando demasiado, recordaba que era un camino corto pero ahora... Había escuchado que la magia de Gratt hacia de ese camino un laberinto confuso que cuando pensó que iba a perderse escuchó una suave risa junto a él y alguien agarró su brazo jalandolo fuera del bosque sintiendo varias ramas golpear su cara hasta por fin llegar a un claro.

Al estar frente a Gratt él le sonrió.

—Eres bastante valiente para entrar en mi bosque.

—Creí que iba a perderme.

—Creo que solo estabas dando vueltas alrededor de la casa. —sonrió y caminó lentamente hasta detrás de su casa siendo seguido apresuradamente por Luny—. Mika me dijo que querías entrenar conmigo... ¿Por qué?

—Solo quiero dejar de ser débil.

—Tienes más poder que cualquiera, Luny, y yo lo se, solo necesitas despertarlo.

—¿Me ayudarás?

—Yo no ayudo, yo entreno. Yo volví a Grayson en lo que es ahora, también entrené a mi hermano menor y los volví fuertes. Si estás dispuesto a sufrir puedo entrenarte.

—Lo haré... —dijo con miedo pero no iba a arrepentirse ahora.

...

Chase estaba en su escritorio revisando algunos informes que Grayson le había mandado, pasando sus ojos por cada línea rápidamente y siguió con el siguiente, todo estaba bien.

Alguien tocó la puerta.

—Adelante... —dijo sin dejar de mirar la carta.

—Discúlpeme, su majestad. —Kin entró en la oficina con una mirada inquieta, estaba bastante preocupado.

—¿Por qué tienes esa cara Kin?

—Señor... yo... Mi lazo me dió esta carta, señor. —dijo colocándola en el escritorio, Chase la tomó—. La envía el rey de los ángeles.

—¿El rey..?

𝒀𝒐𝒉𝒂𝑹♡︎