Douxie veía con irritación cómo Claire no dejaba de mirar a aquel pelinegro de ojos azules y, por alguna razón, él tampoco dejaba de verla a ella. El mago intentó ignorarlos y prestar atención a la clase, pero se le era imposible, no dejaba de lanzarse miradas fugaces cada dos segundos.
-¡Auch!- le reclamó en voz baja su mejor amiga una vez que recibió su codazo en el brazo- ¿Y eso?- preguntó alzando una ceja.
-Hazme el favor y deja de mirarlo, ¿quieres?- le dijo dejando notar su molestia.
Le Fay frunció el entrecejo y rodó los ojos negando con la cabeza. No le había dicho aún a Hisirdoux, pero había algo de aquel chico que no le cuadraba, fue muy raro cuando tuvo contacto con él y sintió aquella electricidad recorrer su cuerpo. Además, las miradas que él también le lanzaba, la hacían sospechar que él también las sintió.
¿O tal vez ella lo atraía a él y él a ella?
¡No! Por supuesto que no. Está más que prohibido enamorarse de un humano, sería condenada con el delito de traición por su tío.
La campana sonó y era momento del receso.
• • •
-Creo que no es necesario recordarte que no puedes enamorarte de él, ¿no es así, Claire?- le preguntó el chico de ojos marrones en un suspiro cansado.
Ambos caminaban por el patio de la escuela, observando el panorama escolar, tratando de buscar algún indicio que les indique que haya algún troll cerca, pero todo parecía reducirse a adolescentes pasando un buen rato en su descanso.
-No sé de qué hablas.- gruñó ella por lo bajo- Claramente, no tienes que decirlo. Y no, no me atrae en lo más mínimo, sólo nos chocamos y sentí una energía extraña. Creo que podríamos empezar nuestra misión por...- Claire no pudo seguir hablando, porque un estruendoso rugido se escuchó en los pasillos de la escuela.
Ambos adolescentes se miraron mutuamente alertados, mientras que todos los demás estudiantes corrían despavoridos fuera de la institución, por las explosiones y rugidos que se escuchaban dentro. Ellos no esperaron más y corrieron adentrándose, en cuanto llegaron a la pelea y se sorprendieron al ver lo que sucedía. Un Gumm Gumm logró entrar a la escuela, pero eso no era lo más sorprendente, sino que había otro troll peleando en contra de él; este troll era más pequeño y de un color azul, era muy distinto al Gumm Gumm, un tipo de troll que jamás habían visto con anterioridad.
-¿Cómo lograron entrar?- preguntó Douxie al aire en un susurro y escondiéndose con Claire- Hay un sol radiante afuera y no hay mucha sombra.- añadió argumentando su pregunta.
-Eso es lo de menos.- aseguró la muchacha de inmediato- ¿Qué es lo que haremos?- su cuestionamiento alteró al pelinegro.
-¿Interferir en una pelea de trolls? ¡No hay forma!- dijo desconcertado.
-Pero si ya hemos luchado en Camelot contra ellos. Es una oportunidad de derribar a dos pájaros de un tiro e interrogarlos para que nos den su ubicación. Con eso será más que suficiente para que mit tío los extermine.- las palabras salían de su boca sin ningún remordimiento, cosa que asustó al chico, haciendo que se detuviera a verla con atención.
Al sentir su penetrante mirada sobre ella, Claire dejó de mirar la pelea frente a ellos y desvío sus ojos a los de su mejor amigo, con la mirada, le pidió una explicación de lo que pensaba.
-Tú jamás has estado de acuerdo con el rey Arturo de sentenciar a muerte a todo aquel troll que respire. Tú misma has bajado a los calabozos para verificar prk tu cuenta si todos los Gumm Gumm son malos y has visto que no. ¿Por qué ahora dices eso?- interrogó preocupado.
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•TROLLS & WIZARDS•
FanfictionTrolls y Magos han sido enemigos durante siglos. ¿Pero qué pasaría si la sobrina del rey Arturo, Claire Le Fay, hija de Morgana Le Fay; y Hisirdoux "Douxie" Casperan, hijo y aprendiz del mejor mago de todos los tiempos, Merlín; conocen al Cazatroll...