•TROLLS & WIZARDS•

•08•

4 Meses después...

4 Meses han pasado desde que se iniciaron las clases y desde la primera vez que Claire y Douxie pisaron Arcadia. Muchas cosas habían cambiado, la princesa dejó de darle prioridad a la misión que le encomendó su tío y disfrutaba más los momentos de clases junto a sus amigos; pues Hisirdoux llegó a complementarse bien con Jim y ahora eran mejores amigos. El cazatrolles y Toby no olvidaron el vigilar a los magos, pero al ir acercándose y conociéndose, llegaron a la conclusión de que no eran malas personas y pronto les dirían la verdad.

Otra cosa que cambió fue la electricidad que Jim y Claire sentían al entrar en contacto, pues la misma era más fuerte, porque sus sentimientos hacia el otro también se fortalecieron. Ahora ambos pelinegros aceptaban estar enamorados del otro, sus amigos lo sabían y se lo tomaron de distintas formas. Tobías se emocionó desde el inicio y le sacó en cara al ojiazul que él siempre tuvo razón; mientras que Douxie por su lado, desaprobó en un principio que su mejor amiga, a quien considera una hermana menor, se enamorara de un humano de otra dimensión. Sin embargo, al ver la química que ella compartía con él y verlo tratarla bien, poco a poco lo fue aceptando, hasta que le comenzó a gustar la idea de que estén juntos.

-Los trolls y magos de Camelot están planeando una rebelión en contra del reino de Arturo.- anunció Merlín, mientras entraba en la biblioteca, donde ambas princesas y su aprendiz lo esperaban.

-¿Han tenido alguna información de los trolls en el mundo humano?- le preguntó Morgana a los jóvenes, quienes se miraron mutuamente intimidados.

-No, alteza.- terminó respondiendo el de mechones azules.

Y era verdad. Desde que secuestraron al cazatrolles no han tenido ningún avance en su misión, ni siquiera se habían vuelto a topar con él de una forma significativa, sólo lo han visto un par de veces más, pero a lo lejos.

-Tenemos que advertirle al rey.- indicó el mago supremo con firmeza- Ya tenemos suficiente con la guerra contra Gunmar, si opresión contra los inocentes debe parar por el bien del reino.- señaló directamente a la hermana de Arturo.

-Mi hermano es un testarudo, no cambiará de opinión.- dijo ella no muy convencida, pero la determinación en Merlín no se esfumó de su rostro- ¡Bien! Veré qué puedo hacer para convencerlo.- aceptó la princesa en resignación.

-Nosotros nos enfocaremos más en saber de los trolls en Arcadia.- intervino nuevamente el aprendiz del mago, captando sobretodo la atención de su amiga, la cual lo observó con los ojos bien abiertos.

-Gracias.- sonrió Morgana.

No obstante, su sonrisa desapareció casi al instante, cuando su hija golpeó con su puño la mesa redonda de madera  que los cuatro rodeaban.

-¿Por qué quieren saber dónde están los trolls de Arcadia?- demandó con un tono de voz irritado- Ellos no tienen nada que ver con nosotros, ellos parecen estar en paz con los humanos. ¡¿Acaso no van a responderme?!- exigió al ver que ninguno de los dos iba a hablar.

-¡Silencio, Claire!- la calló su madre, pero la menor no quitó su mirada desafiante- Tomen sus cosas y ya vayan a la escuela, no lleguen tarde.- les indicó con voz tan estoica que Douxie tomó su maleta sin rechistar.

La de cerquillo blanco se tomó más tiempo para alcanzar su mochila, sin dejar de mirar a su madre, y luego creó un portal. Dejó que su amigo lo atraviese primero, ella dejó una última mirada a su progenitora y desapareció a través del portal, el cual desapareció.

-Deberíamos decirles.- habló la princesa una vez que ellos ya no estaban- Están preguntando cada vez más.- argumentó.

-Aún no.- negó Merlín- Ellos tienen que empezar solos su propio destino, no podemos ayudarlos.- agregó y Morgana suspiró profundamente, antes de tomar su vara y salir de la habitación dejándolo solo.