•TROLLS & WIZARDS•

•12•

Ella volteó y miró al gran Gumm Gumm que estaba detrás de ella, sus ojos se abrieron lo más que podían al ver al mismísimo príncipe Gumm Gumm asesinándola con la mirada, listo para atacar en cualquier momento.

-Vaya, vaya. Me pregunto qué estará haciendo la sobrina del rey Arturo sola por este bosque.- habló él con su voz macabra y sonrisa cínica.

Claire miró a su alrededor, había muchos arbustos y árboles por los cuales esconderse al momento de correr, podría perderlo, pero sabía que también había una gran posibilidad de que él la siga hasta atraparla. No había de otra, tiene que pelear contra él.

-Yo puedo preguntar lo mismo acerca del hijo de Gunmar.- ahora habló ella manteniendo una postura firme y calmada, escondiendo por dentro los insesantes latidos de su corazón.

-¡Estos son nuestros territorios! ¡Nuestro bosque!- exclamó enfurecido y dió dos pasos hacia ella- Así que cualquier troll, mago o humano será despedazado al pisar este bosque.- engrandeció su sonrisa y se colocó en posición defensiva.

La princesa exhaló y realizó un discreto hechizo de ayuda guiado a Hisirdoux, antes de hablar.

-Tú sí que hablas demasiado.- dijo por lo bajo, después estiró sus brazos par lanzar un rato morado contra él y la pelea dió inicio.

El Gumm Gumm bloqueaba muy bien los ataques de la maga, utilizaba su gran espada para bloquearlos y, en ocasiones, para hacer que reboten nuevamente hacia ella. Claire sin duda era la que tenía problemas, se estaba cansando y su magia no le duraría mucho y tampoco tenía ningun arma con la cual defenderse en una batalla cuerpo a cuerpo. A duras penas lograba esquivar los ataques del príncipe y abrir portales para moverse con mayor rapidez, así era, hasta que se quedó agotada.

-No.- lamentó en un susurro cuando intentó abrir un nuevo portal, pero ya no tenía magia.

Bular aprovechó su distracción y corrió hacia ella para propinarle un puñetazo en al lado izquierdo de su rostro, la pelinegra emitió un quejido por el dolor y no pudo evitar caer al suelo, mientras se tomaba la zona afectada, estaba segura que pronto le saldrá un gran moretón en su pómulo.

Aquel era su fin. Ya no tiene fuerzas para ponerse de pie, su cabeza daba vueltas por el brutal golpe, Douxie aún no llegaba a su auxilio y sólo esperaba que Bular acabara con su vida de una forma veloz y sin dolor.

Sin embargo, cuando vió al Gumm Gumm alzar su espada y luego bajarla para asesinarla, otra espada que reconocía bien se atravesó y evitó su fatídico final.

-Pero qué mier...- Bular no pudo acabar su expresión, porque el dueño de la otra espada utilizó su fuerza de troll para empujarlo y alejarlo de Claire, aquel troll azul lo fulminaba con la mirada.

-¿Jim?- preguntó la princesa más para sí misma y frunciendo el entrecejo.

-¡Aléjate de ella!- el ojiazul la ignoró por completo y le gritó al Gumm Gumm- Estos no son tus terrenos, Bular. Tú, tu padre y su ejército del terror no son bienvenidos en Arcadia ni en ningún otro lugar, porque no se lo merecen.- añadió furioso y lo volvió a atacar.

La de ojos marrones sólo atinó a observar exhausta la pelea, con su gran espada, Jim le hacía una pelea justa a Bular, pero el Gumm Gumm ya venía cansado por su batalla contra ella, por lo que sólo le bastaron unos minutos al pelinegro tomar ventaja sobre Bular, quien al verse perdiendo la batalla, emitió un fuerte rugido que los hizo estremecer y se retiró corriendo, desapareciendo en el frondoso bosque.

-¿Estás bien?- preguntó la chica al troll que estaba dándole la espalda frente a ella, pudo percatarse de cómo Jim se tomaba el brazo derecho.

-Sólo me hizo un corte, estoy bien.- contestó el Lake girándose para verla aún en el piso, pero ya se encontraba sentada- Tú no te ves bien.- comentó al verla muy cansada y con el pómulo izquierdo morado e hinchado.