Hasta Que La Mafia Nos Separe <NamJin>.

56.

Holis, si ven algún error o falta de ortografía por favor díganmelo, a veces se me pasan varios, no olviden votar y comentar, los quiero ♡
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Namjoon caminaba al lado de Taehyung, ambos hiban llegando a la bodega. Ese día llegaría un nuevo cargamento, Namjoon estaba emocionado pues era el primer cargamento que recibiría, las miradas temerosos y orgullosas de los empleados lo hacían sentíe bien, se sentía poderoso y eso le gustaba mucho.

— papá llamó — dijo Taehyung llamando su atención.

— ¿papá?

Fueron pocas las veces que vió a su padre, por lo general a Seonho no le gustaba entrometerse en su "trabajo", prefería pasar todo el día en su granja cuidando a los animales. A Namjoon le daba vergüenza verlo, a pesar de no recordar su pasado se sentía culpable por casi matarlo.

— si, llegará a la mansión esta noche, quiere ver como van los preparativos de la boda de Hyuna. Recuerda que será en una semana y quiere entregar a Hyuna en el altar, pero quiere hacerlo junto a tí.

Namjoon solo asintió, no se sentía cómodo al estar al lado de Seonho, cada vez que lo veía terminaba de rodillas frente a él, mientras le pedía perdón entre lágrimas. Odiaba el sentimiento de culpa.

— que bueno que llegan — un chico pelinegro llegó hacia ellos, quizás era un trabajador más, pero lucía muy sonriente para trabajar es "eso".

— Namjoon, él es Eunwoo, se encarga de traer la mercancía.

El pelinegro extendió su mano en forma de saludo, el cuál fué correspondido — es un gusto conocerlo, señor Kim, soy un gran admirador suyu y..... ¡Seokjin!.

Gritó y corrió hacia el mencionado, le rubio hiba llegando, tarde, como siempre. Namjoon vió como el pelinegro abrazó alegremente a Seokjin y sintió una opresión en el pecho, no le gustaba que ese chico se acercara a Seokjin.

—perdón por llegar tarde — dijo apenado — ya deberías de haber regresado a tu trabajo — se dirigió a Eunwoo, quien seguía aferrado a su cintura.

— no te preocupes, yo siempre esperaré por ti — dijo con una gran sonrisa y un pequeño sonrojo, le gustaba Seokjin y no era para nada disimulado.

Los presentes se dieron cuenta de eso. Taehyung Sonreía al ver cómo su hermano elevaba una ceja mientras empujaba su mejillas con su lengua.

Namjoon estaba celoso.

Namjoon aún sentía algo por Seokjin.

Eso le alegraba, quería que su hermano volviera. Namjoon había cambiado tanto y sabía cuál era la razón, bueno, sabía quién era el culpable. Minho, ese chico hizo a su hermano cambiar y también sabía que lo estaba influenciando para no vivir en la mansión.

No le agradaba Minho....

— es hora de trabajar — la voz de Namjoon sonó ronca y sería al igual que su rostro.

Los presentes asintieron y entraron a la bodega. Tenían mucho trabajo que hacer.

El día pasó entre trabajo y comentarios malintencionados por parte de Namjoon hacia Eunwoo y por supuesto un muy enojado Seokjin al ver la manera en que Namjoon trataba al menor.

Cuando llegó la noche solo se encontraban ellos cuatro.

— hay problemas en el red lust — dijo Taehyung terminando de colgar una llamada — regresaré tarde a casa, lleva a Seokjin por favor.

Taehyung salió apresurado de la bodega, por otro lado Namjoon llegó a donde se suponía que se encontraba Seokjin.

Su rostro se volvió rojo del enojo al ver la escena frente a sus ojos. Eunwoo estaba cerca del rostro de Seokjin.

Estaban apunto de besarse.

Sín pensarlo se acercó a ellos y tomó a Eunwoo por el cuello de la camisa, propinandole un firme golpe en la mandíbula.

— no te le vuelvas a acercar, maldito!.

Tomó la mano de Seokjin y lo arrastró por el pasillo. El menor forcejeó hasta que logró soltarse de su agarre.

—¿¡que te pasa!? — preguntó enojado.

— no quiero que te vuelvas acercar a ese imbécil, si lo haces lo mataré — soltó furioso.

—no tengo porqué obedecerte, y no tiene porqué importarte con quien esté. Tu tienes novio, yo también puedo tenerlo. No te tengo miedo Namjoon.

Namjoon se jaló sus cabellos desesperadamente, se sentía tan impotente.

—¡MALDICIÓN! — gritó, para luego voltear hacia Seokjin y unir sus labios en un brusco beso.

Seokjin se sorprendió al principio pero luego se dejó llevar por el delicioso sabor de los labios del Mayor, extrañó tanto esos labios.

Namjoon lo alzó e hizo que rodera con las piernas su cintura, todo eso sín separarse del beso, ambos lo anhelaban, querían sentirse de nuevo.

Llegaron hacia una pequeña mesa, Namjoon lo sentó sobre ella. Mientras besaba su cuello se desacían de las prendas. De los labios de Seokjin salió un pequeño chillido al sentír como sus pezones eran succionados deliciosamente.

Un dedo se abrió pasó en su entrada, Namjoon lo estaba preparando, debía prepararlo bien, ya que sería difícil entrar en él al no tener lubricante.

— estoy listo~ — jadeó al sentír los dedos de Namjoon en su interior. Quería sentirlo ya.

Namjoon se posicionó entre sus piernas y metió lentamente su miembro, gruñó al sentir lo apretado que estaba.

Las embestidas fueron lentas pero duras, haciéndolos delirar, ambos extrañaban la sensación de sentirse uno solo.

Seokjin apretó las piernas alrededor de la cintura de Namjoon, haciéndolo llegar más profundo. Mientras Namjoon lo penetraba una bajó su mano a su desatendido miembro y empezó a acariciarlo.

— e-estoy cerca~ — dijo apenas, mientras veía el hermoso rostro de Namjoon.

El mayor estaba sudado y su cabello estaba pegado a su frente, en cada gruñido que salía de su garganta sus hoyuelos se marcaban más, haciéndolo lucir demasiado sexy.

Un queño grito salió de los labios de Seokjin, su vientre se sintió caliente pues su semen había caído en él. Su interior se sintió viscoso, ahí se dió cuenta que Namjoon también se había corrido.

El mayor juntó sus frentes, aún sin salír de su interior besó sus labios, en un tierno y dulce beso.

— creo que.... Estoy enamorado de tí

Seokjin abrió sus ojos sorprendido, encontrándose con los ojos cristalizados de Namjoon.

— Quiero recordar, quiero recordarte, yo..... Quiero amarte, Kim Seokjin. Por favor ayúdame a recordarte.

Seokjin limpió las lágrimas del mayor y beso sus ojos en un tierno beso.

— yo te ayudaré, Namjoonnie, pero por favor, no te vayas de nuevo.

Se volvieron a besar en un tierno beso, solo eran ellos dos en el mundo.

Estaban tan sumergidos en su mundo, que no se dieron cuenta que alguien los escuchaba tras la puerta, alguien con el corazón partido, sangre corriendo de su labio y lágrimas cayendo en sus mejillas.

Después de escuchar todo, Eunwoo se dió cuenta que su amor no sería correspondido, así que decidío mejor alejarse.

No podía competir contra el "Gran Kim Namjoon"...

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