lasciamelo tenere

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Enid despertó, pero no se podía mover por el peso que tenía encima.

Merlina seguía dormida.

Con cuidado se movió y caso su celular para ver que hora era.

SANTA MIERDA.

Eran las 9pm tenía que volver a casa o su madre la mataría.

Se levantó sin despertar a Merlina, lista para irse, pero alguien tomó la punta de su Hoodie.

-¿Uh?

-Quedate... -Pidió una adormilada Merlina.

La mayor sonrió enternecida por esto, inconscientemente la menor quería que se quedara. 

-Anda, porfavor.

Con cuidado Enid se arrodilló para quedar cara a cara con la azabache.

- con gusto me quedaría, pero no puedo, no quiero que mamá se preocupe.

-Importa una mierda lo que sienta tu madre, ahora ven... -Extendió sus manos para que la mayor la volviera a abrazar.

-Oh, lo siento, pero a mi me Importa, pero mañana puedo venir por ti y así ir juntas a la escuela - acaricio el cabello de su menor.

-Ahg, bien, bien... - El silencio inundó la sala por unos minutos.

Minutos en los que Enid descubrió algo: Cuando Merlina recién despertaba era muy melosa.

- Enid.

-¿Sí?

- Yo... -Jalo un poco más su Hoodie- Me gustaría que te quedarás, pero no puedes.

-Así es.

-Tu... Tu aroma me relaja, Yo, no se, te doy 20 dólares por tu hoodie.

-¿Eh?

- Si, 20 dólares.

-Oww, Merlina, si quieres mi.Hoddie sólo debes pedirla, yo con gusto te la doy -con cuidado se quito aquella Hoddie Gris claro.

Todo esto bajo la atenta mirada de Merlina.

-Toda tuya -Le extendió la Hoodie, esperando a que la tomará.

-Gracias - con timidez la tomó- ¿Tú quieres un suéter o algo? Es tarde, te puedes enfermar.

-Nah, estaré bien, mi casa no es muy lejos, llegaré en 10 minutos, 5 si corro.

-¿Segura?

-Sip -Con un poco de miedo quito el flequillo de la frente contraria, acercándose con cuidado.

-¿Qué mierda haces? -sus dudas fueron resueltas cuando Enid beso su frente- ...

-Nos vemos mañana - se despidió con la mano para al fin salir de aquel hogar.

Merlina que aún no salía del shock sólo suspiro, esa chica se estaba entrando mucho en su corazón.

Se pudo la Hoodie que recién le dieron, dispuesta a ir a su habitación a seguir durmiendo.
Estaba a la mitad de la escalera cuando escucho a su Padre hablar.

-Y él necesitado soy yo ¿Eh?

El color subió a Merlina, era la primera vez que se veía así de viva.

-¡Haré que te trague tus palabras!

- Si no es que antes buscas que Enid te trague a ti - Su hermano se unió a las burlas.

Insoportables.

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Por favor no me sueltes. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora