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— ¿Por qué te haría algo?.—le susurro apretándola mas a mi, haciendo que nuestros centros se rocen y aunque la situación no es para nada favorable no puedo evitar ponerme dura, y mi mente deja de pensar claramente.
— No lo sé, no me gusta cuando te pones así.—me dice tratando aun de zafarse de mi agarre y mirando nuestros cuerpos tan juntos, pero aprovecho el movimiento para rápidamente cogerle el culo con ambas manos y apretarla mas a mi haciendo que suelte un leve jadeo.
— Claro que te gusta.—le digo soltándola y yendo hacía la puerta para cerrarla, sé que mi padre esta abajo, pero que lo jodan, que jodan a todos mientras yo me la cojo a ella, volteo a mirarla se había sentado en una esquina de la cama mirándome mientras despacio su mano se dirigía a su vagina sobre sus jeans.
Me pare frente a ella haciendo que mi pene estuviera a la altura de su cara, su mirada estaba oscuro, ya la conocía bien cuando se mojaba le cambiaba hasta la voz, mis manos se dirigen a la pretina de mi pantalón para liberarme pero ella las quita, la veo sorprendida pero solo me da una sonrisa para luego desabotonarme ella y bajar mi bóxer, por el movimiento tan brusco hace que mi polla le golpee ligeramente el rostro y eso envía un escalofrío en todo mi cuerpo que seguro ella noto porqué de inmediato se la mete entera en la boca, siempre he tratado de ser cuidadosa con ella pero ahora sé que no es lo que realmente quiere.
— Trágatela toda.—le ordeno mientras mis manos van fuertes a su cabeza e inclinándome un poco mas hacía ella se la meto toda en la boca, noto como pone resistencia con sus manos en mis piernas tratando de detenerme, pero empujo más fuerte, haciendo que me mire con suplica, pero nada va a detenerme y esta vez esa mirada inocente ya no funciona conmigo, se la saco de golpe y empieza a toser— Ves como si te gusta.—le digo mientras le cojo de la barbilla pero ella no me mira— Mírame.—le ordeno, y su mirada vuelve a mi, me lanzo sobre ella haciendo que mi peso caiga sobre ella, con una de mis manos bajo hasta su centro, acariciándole suave y notando lo mojada que ésta.
— No.—logra decir jadeando, ¿No, qué?.
— ¿Ahora no quiere coger conmigo?.—le digo repartiendo besos en su cuello haciéndola jadear, sé que si quiere, pero necesito escucharlo de ella.
— Si quiero.—me dice buscando mis labios pero me aparto para seguir bajando hasta sus pechos— Pero así no, estas muy enojada, me vas a lastimar.—solloza mientras trata de cogerme la cara para que la vea, pero me niego.
— No te voy a lastimar.—le digo— Solo vamos a coger, así como coges con media escuela.—le susurro bajando por su abdomen repartiendo besos llegando hasta sus jeans para bajarlos de un solo tirón— Mierda.— digo, estaba empapada y eso solo hacía que yo cada vez este más dura y con mas ganas de entrar en ella, acerco mi rostro a su centro y con la boca trato de retirar su tanga, noto como suelta pequeños gemidos y me ayuda a quitársela, dejo un suave beso sobre su coño húmedo haciendo que sus manos se vayan directo a mi cabeza para empujarme, pero me aparto, le tocará sufrir.— Voltéate.—le ordenó, mientras vuelvo a subir hasta su rostro, y sus ojos se llenan de miedo.
— Nunca lo he hecho por ahí.— me dice con miedo pero obedeciendo y volteando sobre la cama dejándome ver su culo desnudo y suelto una carcajada, se cree que soy tonta.
— Puedes ahorrarte las mentiras.—le digo tomando mi pene y acercándome a ella, no iba a esperar más, nunca había querido que la follara por el culo porqué según era virgen, pero ahora que sé que no lo es me la voy a follar por donde a mi se me de la gana; le agarro de las caderas haciendo que su culo choque con mi polla dura y lista para ella, me acomodo en su centro pero siento que trata de zafarse de mi agarre así que le agarro el cabello fuerte, haciendo que pierda el movimiento y acomodo nuevamente mi polla en su entrada y de una sola estocada estoy dentro de ella, noto como sus movimientos son desesperados por zafarse, pero mi mente solo procesa lo apretada que esta, lo caliente y lo bien que se siente.
— Me duele.—solloza— Salté.—me grita llorando, y por un momento pienso que lo que me dijo era cierto, pero rápidamente descarto la idea, y sigo haciendo mi trabajo, entrando y saliendo de ella primero suave porque realmente estaba muy apretada y me lo dificultaba, pero después cuando sentí su culo iba cediendo a mi polla, las embestidas se hicieron mas fuertes, la escuchaba gritar, no sabía muy bien si de placer o de dolor, pero no me importaba, con mis manos en su cabello montándola como un potro monta a su yegua.
Mis manos dejan su cabello para dirigirse a sus pechos, firmes a mi toque, regresa mirarme y le veo los ojos rojos y cristalizados. Las embestidas se empiezan hacer más rápidas y noto como empieza a mover el culo hacía mi, he dejado de escuchar gritos para escuchar gemidos, se nota que los esta reteniendo así que me salgo de golpe y me levanto, haciendo que regrese a mirarme.
— Ven.—me dice levantándose conmigo, y eso hago, vuelvo a tumbarla en la cama, embistiéndola de un solo golpe haciendo que otra vez de un grito seco, esta vez entro y salgo de ella con tal fuerza que hasta yo me desconozco, siento como sus piernas me rodean haciendo que el agarre se intensifique, de pronto noto como empieza a levantar aun mas sus caderas hacía mi, sus gemidos se hacen mas fuertes y su coño se aprieta a mi polla, puedo ver como suelta la ola de placer que la he invadido, pero yo aun tengo fuerzas para más.
Les dejo este videito para que vuelen su imaginación:
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