Jenna
Cuando veo a T/n en el piso corro hacia ella pero Michael, quien por los gritos ha salido a ver que pasa, me detiene y también detiene a Miranda, mirándonos con reproche veo como le da leves palmadas en las mejillas para que reaccione, puedo notar el leve temblor en sus manos y la desesperación en su mirada.
— ¿Qué han hecho?.—me suelta— Tiene problemas cardiacos, tu lo sabes.—me señala— ¿Qué es todo este griterío?.—dice observando a Miranda de manera acusadora.
— Yo solo quería que supiera la clase de novia que tiene.—suelta Miranda y mi hermano voltea a verme.
— ¿De que hablas?.—pregunta en un tono que ya conozco, su sentido protector, siempre va a defenderme, aunque no lo sé muy bien si después de esto.
Justo cuando Miranda estaba dispuesta a hablar T/n reacciona, mirando a mi hermano primero, y luego a mi notando que su mirada se hace dura al verme e intenta incorporarse rápidamente pero Michael se lo impide.
— Calma, te acabas de desmayar, necesitas descansar.—le dice suavemente mientras le toma del brazo para ayudarle a levantarse.
— No.—dice cortante— Necesito irme a casa.
— Te acompaño, no puedes ir manejando así.—a Michael realmente se le ve preocupado pero T/n ni siquiera lo mira, solo me mira a mi.
— ¿Desde cuando quieres acompañarme tu a algún sitio?.—voltea a ver a mi hermano— ¿No estabas muy enojado porqué me cogía a tu virginal hermanita?.—le espeta acercándose firme a él.
— No se lo que ha pasado entre ustedes, y tampoco me interesa.—Michael se mantiene firme sin retroceder— Solo quería ser amable de todas maneras.
— No es necesaria tu amabilidad.—le dice recogiendo su móvil del piso— Sabes, te alegrara saber que al final si rompí otra regla de amistad.—le dice mirándome— Nunca pelearnos por una perra.
— No te refieras así a mi hermana.—le dice Michael acercándose de nuevo— Mejor vete, no quiero tener problemas otra vez contigo.
— No los tendrás, adiós.—cuando escucho esas palabras salir de su boca, regreso a mirarla, veo como camina lentamente hacía su coche, mis piernas no reaccionan a lo que dice mi mente, quiero ir tras de ella, pero algo me lo impide, mi hermano y Miranda tienen los ojos puestos en mi, y yo no siento fuerzas para poder hacer nada.