Ese resultó ser un buen día, las nubes en el cielo habían huido ante la majestuosidad del astro rey, en los jardines del conjunto palaciego, los montículos de nieve comenzaban a derretirse lentamente.
Una señal de que el invierno estaba en sus últimos momentos. Aunque de igual manera el aire era lo suficientemente frío como para enrojecer la piel.
Jiang WanYin tomó una bocanada de ese aire llenando sus pulmones. Hacía un par de días que habían regresado de CaiYi; aparentemente Lan WangJi no había encontrado lo que buscaba. Obstinadamente su cabeza no dejaba de dar vueltas, puesto que una noche Xue Yang había terminado colándose en su habitación ¿Quién lo había estado siguiendo? Parecía que alguien estaba constantemente detrás de su espalda en los últimos días; palabras mismas del Alpha.
Ahora también tenía que lidiar con eso.
Anhelaba en demasía aquellos días pasados en los que podía batirse a duelo con los soldados, aquellos momentos en los que sólo era Sandu-SengShou.
Pero la realidad estaba a nada de levantar la cabeza y propinarle un buen golpe.
Mientras daba un pequeño paseo por los extensos jardines, en su aturdimiento terminó alejándose más de lo debido.
Unos ruidos extraños llegaron a sus oídos, decidió ir a investigar la causa de la conmoción.
El alboroto había sido causado por un grupo de hombres armados que sostenían sus espadas desenvainadas.
Junto a ellos, alguien gritó.
Jiang WanYin reconoció de inmediato al joven que cayó al suelo.
— ¡A-Ning! — el grito de WanYin fue absorbido por el ruido que los rodeaba.
Por un momento se quedó aturdido, ¿Por qué su A-Ning había sido arrojando al suelo?
Al verle, Wen Ning intentó incorporarse, pero apenas se hubo enderezado, alguien sujetó sus muñecas detrás de su espalda. Afortunadamente no parecía haber sido golpeado.
“Debe ser la gente del ministro Wei” pensó WanYin furioso.
Aquella ocasión, Xue Yang aprovechó para informarle una cosa: Wei ChangZe había puesto gente a su alrededor para vigilarlo, tenían la encomienda de proporcionarle detalladamente todo lo que hacía.
Teniendo en cuenta eso, era complicado saber quién de entre todo el personal le era verdaderamente leal.
No pasó mucho tiempo cuando en su campo de visión vislumbró cómo uno de los guardias agarró el delicado cuello del Omega y lo obligó a arrodillarse arrojándolo contra el suelo.
Incluso antes de que Wen Ning llegara a tocar el frío suelo cubierto de nieve, WanYin había salido corriendo.
— ¿WanYin?—con un toque de extrañeza, la voz de Lan WangJi quien pasaba por ahí resonó detrás de él, pero WanYin no se detuvo.
— ¡¿Qué creen que están haciendo?!—
Ante la voz furibunda, uno de los guardias, que parecía ser el que estaba al mando volteó lentamente abriendo los ojos sorprendido.
— Usted es…¿Su majestad?— Oh, ¿Nos conocemos?— inquirió el Omega.
— ¿Eh? No, es sólo que usted es famoso después de todo.— respondió con desdén.
La actitud de tal persona se le hizo sospechosa a WanYin, después de todo, aunque la gente supiera su nombre, los guardias comunes no deberían ser capaces de reconocerle inmediatamente. Cuando mucho, todo lo que debían saber sobre su persona sería que era un Omega varón, joven y orgulloso, con rasgos hermosos y exóticas pupilas.
![](https://img.wattpad.com/cover/315614364-288-k119699.jpg)
ESTÁS LEYENDO
ZORRO
FanfictionLa llegada al imperio Lan del príncipe Omega de YunMeng pone todo de cabeza. Para algunos es un zorro perverso que con sus engaños subvirtió todo aquello por lo que arduamente habían trabajado, para otros, es alguien inteligente e ingenioso como un...