14. mall expedition

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Froté mis ojos y miré el despertador, ya era hora de que me levantara, tenía que salir pronto con Sabrina.

Me revolví entre las sábanas y después de unos minutos fui a cambiarme de ropa.
Unos vaqueros verdes militar, una camiseta de color negro, la chaqueta de cuero de Dixon, unas botas y mis mitones negros.

Cepillé mi cabello y lo recogí en forma de trenza.

Bajé las escaleras, estaba sola en casa, así que me preparé un café y agarré una manzana.

Cuando lo terminé de desayunar salí de casa y me dirigí al portón de Alexandria, había quedado allí con Sabrina.

-Rick.

-Hola Dalia, ¿cómo estás?.-Me dió un leve abrazo.

-Bien, necesito un coche, Sabrina y yo nos vamos de expedición.

-Hay libre un jeep negro.

Sonreí con emoción.-Para mí.

-Sígueme.

Caminé junto a Grimes, llegamos al lugar donde guardaban los vehículos y subí en este con el sheriff, lo llevé hacia la entrada y dejé las llaves puestas.

-Conduces bien.

-Gracias, no llegué a sacarme el carné, pero aprendí igualmente gracias a mi padre.

-¿Sabrina tardará mucho?.-Preguntó Rick.-

-No lo sé, pero habíamos quedado aquí hace quince minutos, así que mas le vale darse prisa.

-Luego nos vemos, tened cuidado.-Besó mi mejilla.

-Hasta luego Rick.-Sacudí mi mano en forma de despedida.

Apoyé mi espalda sobre la puerta del coche esperando a Espinosa.

Luego de unos minutos la vi correr hacia el jeep.

- Llegas tarde.-Le reñí.

-Lo sé, lo siento.-Me dio un abrazo.- He tenido unas inconvenientes con algo.

- ¿Con algo o con alguien? - Insinué con una sonrisa divertida.

- Solo tengo quince, enferma.

- Mañana tendrás dieciséis, no lo estoy tanto. - Murmuré mientras guardaba unas bolsas en el maletero del vehículo.

-Por ahí viene tu ballestero, intenta no comértelo con la mirada.

- ¡Sabrina!.-Reproché.

Dixon se acercó a mi y me envolvió en sus brazos mientras yo apoyaba el mentón en su hombro.

- Ten cuidado.

-Lo tendré Dixon.

Agarró mi rostro con ambas manos y posó un casto beso sobre mis labios.

-Lo mismo para ti, mocosa.-Revolvió el cabello de Sabrina.

Subimos al coche y saqué un disco de mi bolsillo.

-¿Qué es eso Dal?.-Pregunto curiosa.

-Un disco de Lady Gaga, ¿te gusta?

-Dios sí, me encanta, es de mis cantantes favoritas.-Aplaudió emocionada.

Lo introduje en la rendija que había para CD's y sonó Paparazzi.

-Esto sí que es música Dal.-Respondió emocionada.-

-¿Estas lista para un día de compras de chicas?

-Oh si, me encantaba hacerlo con mi hermana antes.

-Pues vamos.

𝐒𝐂𝐀𝐑𝐒 - 𝐝𝐚𝐫𝐲𝐥 𝐝𝐢𝐱𝐨𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora