Addicted [l.r.h.] #1

8. Miles de dudas

CAPÍTULO 8:

8. Miles de dudas.

Parecía que iba a llover en cualquier momento, aun así Dylan tomó su bicicleta y se dirigió al colegio. Nuevamente la rutina de siempre: miradas. De todos modos, seguían sin incomodarle pero se estaba cansando de ellas. Al llegar al aula 102, Calum la estaba esperando apoyado en la pared de brazos cruzados. Había algo extraño en él, algo que no le terminaba de cerrar. ¿Por qué se interesaría en ella en el primer día que llegó? ¿Por qué la defendía? ¿Por qué la seguía? ¿Por qué quería estar con ella? Y lo que levantó aún más sus dudas, ¿por qué quiere saber tanto sobre su pasado?

Dylan no estaba dispuesta de contarle sobre su pasado a un completo extraño. De hecho, no quería hablar de eso con nadie más, no era algo que le agradara o se sintiera a gusto, aunque por más de que haya cometido cientos de errores, no se arrepentía de nada.

- Hola. -mencionó Calum cuando ella puso sus ojos en él.

- ¿Qué quieres? -respondió de mala gana. Faltaban solo un par de minutos para que inicie la clase.

- ¿Ahora no te puedo saludar? -respondió con arrogancia.

- No te me vas a quitar de encima, ¿verdad? -Dylan se paró recta y entrelazó sus brazos en su pecho.

- Eres más inteligente de lo que creí.

Dylan rodeó los ojos y entró al aula se sentó en uno de los asientos de atrás que estaba vacío. Calum entró después de ella y tomó asiento en el asiento delantero que estaba en diagonal del suyo. Él la miró sobre su hombro y guiñó un ojo para luego volver a mirar al frente, ella estaba seria, dirigió su mirada hacia el otro lado donde se encontró con el perfil del rubio que la sorprendió anoche. Parecía estar un tiempo allí ya que estaba leyendo el mismo libro que el de ayer en la mañana. Estaba completamente desconectado del resto, pasaba desapercibido para cualquiera, algo que nunca fue usual para él antes que ella desapareciera. Dylan sentía como si hubieran cambiado de roles, ella no era más que una estudiante ordinaria que no llamaba la atención de nadie, ni siquiera para hacer amigos. Bastante drama tuvo después de Riley y se alejó de la gente del instituto como si nunca los hubiera conocido. Ahora todo el mundo sabía su nombre y creían saberlo todo sobre ella.

Segundos antes de que sonara el timbre, Luke levantó su mirada y se encontró con los ojos de Dylan mirándolo fijamente. Fue solo un segundo haciendo contacto visual hasta que él volteó para quedar con la vista completamente al frente.

Él tenía algo que a Dylan le llamaba la atención. Habían cambiado muchas cosas en el instituto pero su caso parecía ser particular. Sabía que él tenía una adicción, si no fuera por eso no hubiera ido a Black Earth esa tarde, o mejor dicho, todas aquellas tardes antes de que fuera para regresar el día de ayer. Luke despertaba una intensa curiosidad en Dylan y ella estaba dispuesta a averiguarlo.

- ¿Ya le echaste el ojo al rubiecito de ojos claros? -la voz de Calum la sacó completamente de sus pensamientos.

La clase ya había acabado y no prestó atención alguna. Ambos estaban caminando por el pasillo y ella no notó que él caminaba a su lado. Al principio parecía ser buena compañía pero había comenzado a irritarla y levantar sospechas, antes de que vaya más lejos tenía que cortar con todo aquello.

Lo tomó del brazo bruscamente y lo arrinconó contra la pared, no le interesaba llamar la atención por aquello, el pasillo no estaba lleno pero había gente.

- ¿Eres policía? -Dylan sonó bastante dura. No le extrañaba que los policías sigan buscándola, después de haberse involucrado con los lobos no le cabía dudas de que quieran seguir investigándo.