Addicted [l.r.h.] #1

78. La segunda versión de la historia

CAPÍTULO 78:

78. La segunda versión de la historia

—No puedo irme yo...

—¡Luke! —el rubio miró hacia atrás, Ashton se estaba acercando a él.

—Oh diablos. —se quejó en un susurro.

—Luke, ¿Qué...

—Sí, mamá estoy bien. —él dijo tragando saliva. No podía cortar porque su amigo sabría que andaba en algo raro— Ashton está conmigo, salimos un rato.

Dylan se quedó callada. Luke suspiró al notar que ella se había dado cuenta de que a partir de ahora ya no estaba más solo.

—Te veré luego... —el rubio volvió a hablar.

Esta vez las palabras fueron con doble sentido, tenía que despedirse porque no podía seguir con la conversación con Dylan. También sabía que las cosas iban a ser diferentes a partir de ahora, sabía que las cosas podían salir muy mal. Desde ya tenía en cuenta que todo el asunto era más que serio y jamás pensó que Tucker pudiera capturar a PJ y golpearlo para que siga confesando, que dé sus razones, que le diga en dónde estaba ella pero no lo hizo. El único sonido que emitía eran los gritos que intentó contener. Cuando ya no le quedaban más fuerzas para gritar, Luke salió lo más lejos que pudo de allí. No estaba dentro de esa atroz habitación, pero aun así los gritos resonaban a través de las paredes. No podía aguantar estar en ese lugar donde tenían encerrado al chico con el que estuvo hablando hace unas horas, mucho menos sabiendo cuanto significaba él para Dylan. Salió de aquel oscuro y frío lugar, caminó un par de cuadras y encontró un sitio donde pudiera estar solo. Fue allí cuando llamó a Calum y le mandó la dirección. Dylan le había dicho que ella había destruido su teléfono, pero PJ se había encargado de darle nuevos datos para poder comunicarse con él. Quería salir antes de aquel viejo despacho pero no podía salir porque sí, seguía bajo vigilancia, no podían confiar en él aún. Cuando encontró la oportunidad se alejó, tomó aire fresco y disfrutó del silencio mientras veía a la gente pasar. ¿Cómo podían caminar con tanta tranquilidad si a veinte metros están golpeando con ferocidad a un chico que ni llegaba a los veinticinco años?

Tenía ganas de vomitar y lo hizo. Agradeció que nadie lo viera en aquel lugar, tenía miedo, estaba vigilado, estaba en un lugar completamente desconocido con gente desconocida y lo peor de todo, es que allí hacían cosas horrendas.

Una vez que terminó de hablar con el moreno, él le dijo que iban para allá y Luke insistió en que Dylan no viniera. Él sabía perfectamente que harían con ella si se aparecía. Jamás iban a hacer el cambio, a ella la iban a encerrar y torturar peor que a PJ. Iba a ser lento y doloroso, le revolvió el estómago al escucharlo de la boca de Tucker y se le sumó un gran dolor de cabeza cuando su mejor amigo sonreía ante aquellas palabras como si él también disfrutara de aquel castigo.

Él quería que todo se termine, no le gustaba estar allí para nada, hasta la compañía de Ashton era extraña. Sentía como si ya lo hubiera perdido, ¿desde cuándo tenía deseos tan oscuros? Tal vez él era igual que su padre, fingiendo que tenía la vida perfecta, siendo el hombre perfecto, teniendo la familia perfecta pero no era más que una gran mentira. Era un gran mentiroso, un hombre que pretendía ser alguien más a la perfección y eso mismo vio en su mejor amigo, no era el mismo y se sintió engañado, engañado y estúpido.

Luke seguía con Dylan al otro lado de la línea, no sabía lo que le iba a esperar y es por eso que se cansó de retenerlo, no quería pretender de la misma manera que lo hacía Ashton. Ella se iba a ir pero ahí estaba, ni se imaginaba qué podía pasar después de todo eso. Lo que sí sabía era que ahora estaban de los lados opuestos aunque lo único que quería hacer Luke en ese momento era desaparecer y alejarse de toda esa mierda en la que se metió en un principio.