Addicted [l.r.h.] #1

62. Huir

CAPÍTULO 62:

62. Huir

Después de que Dylan terminara de llorar y lograra calmarse un poco. Ya había oscurecido y le envió un mensaje a su hermano por si podía hablar con él y Kyle le respondió de inmediato. En ese mismo momento, Dylan marcó su número y lo llamó, no le importó que le consumiera todo el crédito hablar con él por un par de minutos, no necesitaba el teléfono para nada más.

-Hola, Dyl. -saluda su hermano apenas atiende el teléfono- ¿Cómo estás?

Ella toma una bocanada de aire y suspira.

-Bien -mintió-, ¿y tú?

-Yo estoy de maravilla, hace un rato Ailén se fue a acostar, estaba cansada y yo ahora estoy hablando contigo. -ella pudo percibir su sonrisa.

-Siento si te llamé muy tarde. -ella se disculpa. No era usual que lo haga, se sentía ajena sí misma.

-No pasa nada, yo todavía estoy estudiando. ¿Pasa algo?

Kyle pudo percibir que todo no andaba bien, no se escuchaba como siempre.

-¿Todavía quieres que vuelva contigo, Kyle? -ella preguntó de la nada. Ya no quería dar más vueltas.

-Por supuesto que sí, Dylan. -él respondió más animado- ¿Por qué lo preguntas?

-¿Puedo volver? -ella preguntó con suavidad- Si no te molesta voy a estar contigo hasta que me consiga un empleo y busque donde más estar.

Hubo una pausa, Dylan podía escuchar los suspiros de su hermano.

-¿Kyle? -Dylan volvió a preguntar.

-Sí, Dylan, no importa, puedes quedarte conmigo todo el tiempo que quieras.

Kyle estaba emocionado, nunca creyó que ella cediera, mucho menos tan rápido.

-El problema es que no me alcanza para el pasaje, tuve que gastar para hacer las compras, el alquiler, ya sabes -ella siguió con su punto-, prometo devolvértelo, te lo juro.

-No pasa nada, Dylan. -él casi se traba con sus propias palabras- Yo me encargo de eso, ¿cuándo quieres venir?

-Lo más antes posible. -dijo algo desesperada- Ya no tengo por qué estar aquí.

Trató de aguantar las lágrimas, no quería volver a llorar.

-Puede que tarde un par de días, voy a hacerlo lo más rápido posible, ¿sí? -él respondió de inmediato, estaba feliz por la noticia. Quería preguntarle qué había sucedido pero prefirió evitarlo, con el solo hecho de saber que su hermana pequeña iba a volver con él, era suficiente.

-Gracias, Kyle. -ella susurró.

-No hay de qué, Dyl. -ella pudo percibir su sonrisa- No puedo creer que vengas, te extraño.

Dylan sonrió. A pesar de todo lo que había pasado, se alegró de saber que alguien todavía la quería a pesar de que no haya tomado muy buenas decisiones.

-Yo también, Kyle. -volvió a decir en el mismo tono- Ahora debo irme, adiós.

-Te veré pronto, Dyl. -dijo todavía emocionado- Te quiero, hermana.

Dylan tomó una bocanada de aire.

-Yo también.

Dylan cortó el teléfono y soltó un par de lágrimas. Había vuelto a resistirse, no quería seguir llorando, se sentía estúpida, completamente patética.