25. Más que una mirada

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CAPÍTULO 25:

25. Más que una mirada

Dylan miró a su alrededor para verificar exactamente lo mismo que había hecho Luke anteriormente.

—¿Qué sucede? —a Dylan le sorprendía cada vez más las actitudes de ese chico. Parecía una persona totalmente distinta cada vez que lo veía y hablaba con él.

—¿Hay alguien aquí además de nosotros dos? —preguntó el rubio volviendo a ver por detrás suyo.

—El dueño está en su casa que es la conecta con la librería, estoy por terminar el turno y puede que venga en cualquier momento. —ella le explica— Además de eso, no hay nadie.

—¿Cuánto te falta para terminar? —Luke parecía impaciente.

Dylan mira la hora en la computadora y vuelve su vista a él.

—Unos veinte minutos. ¿Qué es lo que quieres decirme? —ella estaba por demás de tranquila. Sabía que usando esa estrategia iba a estar por encima de él, mucho más sabiendo cuáles son sus puntos débiles.

—¿Estás segura que estamos solos? —Dylan rió ante la inseguridad de su compañero— ¿Qué?

—No te alteres, ya te dije que no hay nadie. —ella sonrió— ¿Vas a decirme qué es tan importante que quieres que sea tan secreto?

Luke dio un último vistazo. Se rascó la nuca con su mano derecha y suspiró.

—¿Sabes quién es J. Tucker? —largó algo nervioso con rapidez.

Dylan levantó sus cejas y sonrió de lado al oír su nombre. Sabía muy bien quien era y le parecía muy extraño que ese nombre saliera de los labios de ese chico. JT, como todos lo solían llamar, tiene mucha fama en los barrios bajos del sur de Wisconsin. No cualquiera tiene acceso a él, mucho menos seguirle los pasos.

—¿Qué quieres saber de eso? —ella apoyó sus codos sobre su escritorio mirándolo fijamente. Luke todavía parecía estar incómodo.

—¿Sabes quién es o no? —él levantó la voz.

—Sí, sé quién es. —Dylan dice sin dar más vueltas— ¿Por qué preguntas?

—¿Dónde puedo encontrarlo? —ella levantó sus cejas aún más y se mordió los labios.

—No es un tipo fácil de encontrar. —la muchacha ladea su sonrisa.

—Pero sabes dónde está, ¿no es así? —Luke parecía desesperado, pero otra cosa que también parecía, era que no sabía de lo que estaba hablando.

—¿Sabes quién es ese tipo? —ella pregunta con interés— Estoy segura de que no tienes idea.

—¿Y eso importa?

—Por supuesto que importa. —Dylan levanta su voz— ¿Qué quieres con ese tipo? Cualquiera que pronuncie su nombre no lo hace para conseguir algo bueno.

Luke todavía parecía nervioso. Pensó bastante bien antes de acudir a ella pero sabía que era la única que podía darle la información que él necesitaba.

—¿Sabes dónde está o no? —él trató de evitar explicaciones. No tenía la necesidad de decírselas.

—No —responde en seco—, es lo mismo que me preguntes en qué lugar exactamente se encuentra la aguja en un pajar.

—Entonces no tengo más nada que preguntarte. —Luke dio la vuelta algo irritado y se dirigió a la puerta.

—Pero sé dónde buscar. —el chico de ojos azules frenó de golpe y volvió a verla. No podía entender cómo podía parecer tan tranquila mientras él no podía dejar de preocuparse por todo.

Addicted [l.r.h.] #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora