Diciembre 21, 2020.
La casa estaba en completo silencio, ni siquiera se escuchaba el ruido de sus respiraciones o sus pasos.
Se vieron obligados a caminar despacio y a tientas, siendo lo suficientemente cuidadosos para evitar golpearse con algún mueble o, en caso de Alina, pisar alguna de las serpentinas y tropezar. Era bastante gracioso cómo siempre se terminaba resbalando y cayendo, no resultaba nada alarmante el hecho de que de repente tuviera algún moretón nuevo, desde pequeña había sido muy distraída.
Diego se posicionó a su lado una vez que encontró el espantasuegras y se colocó la boquilla entre los labios, Alina y Edson sujetaron la pancarta que habían decorado con el nombre de su extrovertida y gritona amiga de ojos verdes.
El sonido de las llaves los alertó, obligándolos a guardar todo el silencio posible, la puerta se abrió y el apagador de la sala de estar fue presionado, alumbrando la habitación justo cuando Edson y Alina exclamaron un alegre "sorpresa" al unísono junto al fuerte sonido del espantasuegras que Diego hizo sonar sacándole un susto tremendo a la ojiverde; todo pasó muy rápido, el sonido del objeto para fiestas se vió opacado por un fuerte grito agudo de Angi y uno un poco más grave proveniente de Diego.
Alcanzaron a ver a Angi con un spray de pimienta apuntando directamente a los ojos del menor, haciéndolo gritar con efusividad por la sensación irritante en sus globos oculares.
Para cuando ambos dejaron de gritar, Angi corrió en su dirección para revisar que no le hubiera hecho daño, o al menos no tanto, Edson estaba a punto de caerse por estarse riendo con tantas ganas, como si nunca hubiese reído y Alina se acercó también a tratar de controlar el pánico de su novio al estar repitiendo cosas como quedarse ciego y sobre que Angi era una amenaza para la sociedad.
Un escenario digno de admirar.
No le sorprendía que hubiera pasado eso, de una forma u otra, siempre terminaban sucediendo ese tipo de cosas durante los festejos de cumpleaños de Angi, pero aquello sobrepasó todas sus expectativas.
Alina llevó a Diego directamente a la cocina para enjuagarse los ojos lo más pronto posible, esperaba que no le hubiera hecho más daño de lo que el spray solía hacer.
Cerró el grifo del agua fría y lo observó reincorporarse, secándose la cara con una toalla pequeña que ella le entregó.
— ¿Sigue ardiendo? —. preguntó preocupada, esperando a que su novio abriera los ojos para asegurarse que todo estaba en orden.
— Ya no tanto —. respondió dando un par de parpadeos cortos y rápidos antes de abrir los ojos por completo.
— Te salió un barrito ¿estuviste comiendo chocolate y no me diste? —. entrecerró los ojos señalando con su dedo índice una parte del mentón de Alina.— Eres un... —. lo miró con indignación y sin esperar otra respuesta de su parte lo sujetó por la nuca y colocó su cara debajo del chorro de agua helada, haciéndolo gritar entre risas por la baja temperatura.
— Ya ya ya, me rindo, me rindo —. dijo siendo completamente ignorado pues ella abrió más el grifo. — Si me enfermo tú me vas a cuidar, Alina —. una vez que pudo cerrar el grifo, alzó la cabeza salpicando un poco a su novia. — Por eso te salió eso, Diosito te castigó por ser culera conmigo —. bromeó ganándose un manotazo en el brazo.
— Deja a mi barrito en paz ¿sí? es por las hormonas —. se defendió pasándole nuevamente la toalla para que se terminara de secar. — Y yo no soy culera, Diego, si lo fuera te habría echado agua con la manguera.
— No serías capaz.
— ¿Quieres ver que sí? —. Diego negó con diversión y le aventó la toalla mojada directamente al rostro para luego apretarla en uno de sus nada normales pero tiernos abrazos.
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𝙎𝙏𝘼𝙍𝙍𝙔 𝙀𝙔𝙀𝙎 ━━━━ 𝖣𝗂𝖾𝗀𝗈 𝖫𝖺𝗂𝗇𝖾𝗓
Random❝ 𝘊𝘶𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘦𝘭𝘭𝘢 𝘳𝘪𝘦 𝘵𝘪𝘦𝘯𝘦 𝘦𝘭 𝘱𝘰𝘥𝘦𝘳 𝘥𝘦 𝘶𝘯 𝘯𝘪𝘯̃𝘰 𝘦𝘯 𝘴𝘶𝘴 𝘰𝘫𝘰𝘴 ❞ ● 𝐡𝐨𝐧𝐞𝐦𝐨𝐧 𝟐𝟎𝟐𝟐 En curso. Prohibido adaptar. Vota, comenta y hazme saber tu opinión. 𓄹𓈒 𑑛 𝐀𝐥𝐭𝐡𝐞𝐚