Entre Sus Sábanas ○BUCRYSTAL○ (HOT + 18) EN PROCESO

12- Volviéndose A Conocer

Al día siguiente, Bucky despierta en la silla al costado de la cama de la princesa, se estira y mira a la castaña dormir y no pudo evitar dejar un pequeño beso en su frente rápidamente antes de que alguien lo descubriera. En eso llega Melina que sonríe al ver a la chica aún en el mundo de los sueños.

-Buenos días Sargento Barnes. ¿Cómo pasó la noche la princesa?- pregunta susurrando.

-Buenos días, doctora. Pasó buena noche, hablamos un poco y se durmió sin decir nada- responde despreocupado hablando con la voz baja omitiendo todo lo que había pasado realmente, pero la médica del reino era muy astuta y decidió hacerlo hablar. Ambos se alejaron de la chica para no despertarla.

-Sé muy bien lo que ocurre aquí Sargento, a mi no puede engañarme, sé que le gusta la princesa, y también sé que se preocupa por su bienestar- dice- Verá, ella no la pasó bien cuando se separó de Ronan, su ex marido. Ella estaba empezando a amarlo cuando lo suyo terminó. Luego conoció a Pietro y... Creo que ya sabe lo que pasó- Instintivamente el hombre frunce el ceño y aprieta el puño de vibranio, algún día le haria pagar al sokoviano el daño que le causó a la castaña- Si realmente quieres algo con ella, sé directo y ve de frente. Si no, sé honesto y díselo. Mi niña ya ha sufrido bastante- dice para luego alejarse y proceder a revisarla sin despertarla. Bucky decide abrir su corazón y decir la verdad y se acerca a la cama de la chica aún dormida quien era examinada por Melina.

-Melina, estoy enamorado de Crystal. Entiendo que quieres protegerla, lo sé. Y sé que con ella la he cagado, la traté mal, la humillé, la lastimé emocionalmente, y todo porque no quise admitir lo que sentía por ella desde el comienzo. Pero ahora todo será diferente, sanaré sus heridas y la haré feliz, sé que será complicado, pero no imposible- sonríe mirando a Crystal dormida.

-Eso espero, Sargento. O créame que sufrirá las consecuencias si daña a la princesa- amenaza la doctora seriamente.

-Pierda cuidado, Melina y por favor tutéame- la mira- También te pido discreción, es que...-

-Ya sé, Medusa y el señor Stark...- sonríe- Descuida, no diré nada- anuncia la médica haciendo unas anotaciones.

-Gracias Melina- sonríe y ve a la chica despertar cosa que lo hace acercarse a ella- Cariño, Buenos días- besa su frente.

-Buck...- murmura adormilada-Buenos días- saluda y este le da sorpresivamente un beso tierno en los labios frente a una sonriente Melina que la castaña retrocede al darse cuenta de la presencia de la médica.

-Descuiden, no diré nada. Sigan en lo suyo- sonríe y luego de unos minutos al fin le retira el suero a la castaña- Listo, Pero volverás a la cama después de ducharte y desayunar. Debes reposar y recuperar fuerzas- le advierte.

-Pero ya no quiero estar acostada, me da sueño y solo pienso en dormir- hace puchero.

-Está bien, saldrás, pero acompañada y no harás grandes distancias ni mucho menos podrás volar. Nada de usar sus poderes princesa- pide- Sargento, ayúdeme con eso, yo debo retirarme ahora- pide la doctora al pelinegro.

-Estaré con Crystal siempre y cuando tenga la oportunidad, en un rato el equipo estará aquí y todos la echan de menos, pero les diré a todos sus recomendaciones-responde y la doctora se retira cordialmente confiando en la palabra del sargento.

-Por mi no te preocupes, Bucky. Hiciste mucho por mi...- comenta la castaña cohibida- Si te quieres quedar, hazlo- el hombre la mira y se acerca a ella.

-Me quedaré solo si tu lo deseas, Crystal. Muero por quedarme a tu lado, y más porque lo que pasó anoche deseo repetirlo- la castaña se pone roja al recordar el sexo oral que Bucky le había hecho, que por cierto deseaba que ese momento se volviera a repetir porque le había gustado.

Pero no lo admitiría, no lo haría.

-L...lo que pasó anoche, fue un error- la chica evita mirarlo y se incorpora en la cama mientras él la interrumpe acercándose a su rostro y la mujer vuelve a mirarlo a los ojos.

-No lo fue, sé que te gustó, así como a mi también- susurra en sus labios pero cuando el hombre iba a besarla por enésima vez, la chica se levanta alejándose de él.

-Me daré una ducha y luego bajaré a desayunar, muero de hambre. Voy a estar bien- la chica abre su closet y saca su toalla evitando al hombre que la acorrala contra la pared sorprendiéndola. 

-Sé que vas a estar bien, princesa. Y para que empieces a creer que todo lo que digo es en serio, volvámonos a conocer- sugiere a centímetros de sus labios.

-Estás loco...- lo interrumpe riendo.

-Quizá, pero puede funcionar. Podríamos dejar todo el rencor y el odio que alguna vez nos tuvimos atrás y volver a empezar de nuevo tu y yo- responde seguro alejándose un poco de ella.

-Si tu lo dices...- accede no muy segura y el hombre se aparta un poco para presentarse.

-Bien... Aquí voy- sonríe mirándola- Hola, soy Bucky- estira su mano y esta sonríe.

-Hola, soy Crystal. Mucho gusto- la castaña toma la mano del ex soldado para luego estrecharla en un cordial saludo.

-El gusto es todo mio, preciosa- la halaga y la apega a él haciendo que sus labios estén a centímetros, otra vez.

-Ni siquiera estoy peinada, Bucky. Estoy en pijama, descalza y necesito ducharme. Y esto no hacen las personas que se conocen- rie algo nerviosa.

-Con todo y eso, sigues siendo hermosa para mi. Te dejaré duchar y seguiré con lo que acordamos pero antes, quiero hacer esto- no la deja hablar ya que nuevamente volvió a besarla apasionadamente tomándola de la cintura.

La chica mientras lo besaba se dió cuenta de cuando dejó caer la toalla al suelo y Bucky levantó el babydoll de la chica para luego quitársela y dejarla sin nada puesto. El hombre se detuvo y Crystal se cohibió al verla desnuda. La chica levantó la toalla rápidamente para cubrirse y el Soldado se aleja.

-Si no estuvieras enferma y no hubiésemos hecho ese trato, te hubiese hecho mía en este momento en esa cama- comenta el hombre- Me alejo porque no podría controlarme y quiero cuidarte- la mira con ojos de deseo.

-¿Y si yo no estaba mal y no quería lo mismo Bucky?- pregunta la chica algo incómoda cubriéndose con la toalla algo nerviosa.

-No hubiese hecho nada que no quisieras, Crystal... Eres preciosa- responde sin dejar de mirarla, el pelinegro sentía unos enormes deseos de poseerla en aquella cama, pero primero debía de convencerla de que la amaba y que quería todo con ella.

-Bucky, será mejor que te vayas y me dejes ducharme y alistarme. Te alcanzo yo luego- lo mira fijamente y con deseos de mandar todo al demonio y besarlo. 

-Me iré, no te preocupes, el trato empieza desde ahora. Soy paciente. Nos vemos después- se acerca para dejar un beso en su mejilla con ganas de quedarse con ella para luego salir de la habitación cerrando la puerta tras de él, que no tardó ni dos segundos la chica con sus poderes en ponerle seguro. Lo deseaba, lo quería en su cama desde ayer en la noche que la acarició y le provocó un gran orgasmo con solo su boca.

-Mierda... Bucky Barnes. ¿Que carajos estás haciéndome?- se pregunta en voz baja antes de entrar al cuarto de baño y por fin, ducharse y autocomplaciendose pensando en aquel soldado de brazo de vibranio semi estable de 100 años.