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Chapter nineteen
The Secret Dance

Diana's Pov:

1 de la mañana, los pies me dolían y la estaba pasando relativamente bien... quitando el hecho de que tenía que ver la insoportable escena de Cedric estando con Cho. Las risas, claro, no faltaron y los elogios hacia mi persona por parte de los gemelos me hacían sonreír y aceptar bailar con ellos, ya que Harry se había ido con Ron hacía unos minutos.

Había perdido de vista a mis amigos, así que intenté ver entre la multitud dónde estaban. Mónica bailaba con el chico de Slytherin en un costado del salón, Nick estaba con una chica que creo haberla visto en el salón de John y Zeus... Zeus estaba solo, lo cual se me hizo raro porque parecía pasárselo bien con Jane. Este se levantó y procedió a correr hacia la puerta que daba al vestíbulo.

Rápido corrí para intentar seguirlo, abandonando el salón y saliendo a las afueras del castillo, sosteniendo la falda de mi vestido y cuidando de no caerme con los tacones.

-¿Zeus?- la luz era poca, pero la silueta que se encontraba en frente del lago negro parecía ser mi amigo. Este se dio la vuelta y me vio, pero no hizo ademán de nada- ¿ha pasado algo, Zeus?- le pregunté en cuanto me coloqué a su lado y comencé a admirar el lago con él.

-Le gusto a Jane...

-pues sorpresa para nadie- solté. Todos éramos muy conscientes de cómo Jane miraba a Zeus, algo así como fascinada y... bueno, encantada. Nunca pude ver si Zeus le devolvía la misma mirada a ella, pero supuse que quizá era cuestión de tiempo.

-Nick piensa que ella me gusta a mi, tú me habías dicho que vaya con alguien que me gustara.

-pues si, pero-

-yo no podría ir con alguien que me gustara, Diana.- en su rostro pude notar la angustia, lo mucho que le costaba decir esas palabras pero también lo mucho que lo necesitaba y por eso la razón de que le salieran atropelladas.

Lo observé callada ¿por qué se resguardaba tanto del amor? ¿acaso tenía un amor imposible al igual que yo?

-Lo entiendo, Zeus.- coloqué mi mano en su hombro, pero este se apartó como si yo quemara.

-no, no lo haces, ¡nadie puede! Y si lo entendieran... si lo entendieran quizá ni siquiera querrían ser mis amigos.

-Créeme que si-

-¿Acaso a ti te gusta alguien...- pareció no querer decirlo, fruncí el ceño- ¿a caso a ti t-te gusta al-alguien de tu m-mismo género? Porque si es así entenderías cómo me siento.

Procesé su frase en silencio. De pronto todo encajó, sus actitudes evitativas, la manera en la que se incomodaba cada que John o Nick le insinuaban alguna cosa relacionado con cualquier chica, las innumerables veces en las que mi amigo evitaba hablar del amor... era porque sentía que era diferente a nosotros en aquel sentido. Este me miraba, como si se esperara que le dijera algo feo o malo.

Por el contrario, lo abracé.

-oh Zeus, debiste decírnoslo. No hacía falta que te escondieras de nosotros.

-Nick se espera que me guste una chica, siempre me dice que debería comenzar a-

-a Nick no le importa en lo absoluto los gustos de los demás, lo sabes- este soltó una pequeña risa.

Pero al preocupación me invadió en cuanto me puse a pensar. Lo último que quería es que juzgaran a Zeus, que se la pasara mal por culpa de los estúpidos chicos. Me propuse desde entonces proteger a Zeus con mi alma, a partir de este momento estaba a salvo a mi lado.

Essential-Cedric DiggoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora