18# "Cotidianidad"

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Ambos niños salieron atropelladamente del Empire State, y Percy llamó inmediatamente a un taxi, utilizaron la tarjeta de crédito del casino loto para pagar el viaje, que fue sorprendentemente rápido.

Cristel asintió mientras bajaba del coche, Percy le había echo un resumen sobre lo sucedido en el viaje para recuperar el rayo y anteriormente.

-"Me alegro por tí"- Dijo el muchacho de ojos plateados mientras subían por las escaleras que llevaban al apartamento.

El hijo de Poseidón tocó el timbre, e inmediatamente una mujer que parecía estar en sus cuarenta, o un poco más joven quizás abrió la puerta, dando un abrazo de oso a Percy.

-"¡Percy, gracias al cielo que estás bien mi niño"- La mujer tenía algunas lágrimas acumuladas en los bordes de sus ojos.

-"También te quiero mamá"- El de pelo negro tenía una sonrisa feliz, y también estaba al borde de las lágrimas, por fin podía ver a su madre nuevamente.

La madre de Percy se giró hacia Cristel, para preguntarle quién era, cuando una voz tan horrible que Cristel casi olía su aliento a ajo con tan solo escucharla, interrumpió la conversación.

-"¿¡Donde está mi salsa Sally!?"- Bramó un hombre gordo desde el salón, Cristel pudo verle, piel grasosa, mejillas enrojecidas por el alcohol, poca higiene en general, y por su actitud, una persona despreciable.

Antes de que Sally pudiera contestar, el hombre vio a Percy con una sonrisa desdeñable, llena de malicia.

-"Vaya vaya ¿Que tenemos aquí? Un criminal juvenil y su cómplice"- La mirada del hombre pasó de Percy a Cristel, el chico casi sintió como la bilis subía a su garganta ante el espectáculo.

-"Por favor, Gabe"- Pidió Sally, intentando relajar los ánimos de la situación, levantando un poco sus manos hacia el hombre. Gabe alzó su puño con un rostro deformado por la ira, Sally cerró sus ojos al momento.

Ambos chicos entendieron lo que sucedió, Gabe había golpeado a Sally.

-"Percy ¿Eso es lo que me dijiste?"- La voz de Cristel sostenía una tensa calma mientras veía una caja en la mesa, las etiquetas de 'Hermes Express' lo confirmaba todo, Percy asintió a su amigo.

-"Señorita Jackson, tome esto"- Dijo con amabilidad mientras le tendía la tarjeta de crédito del Hotel Casino Loto. Sally miró el gesto del chico con confusión, mientras este se encogía de hombros -"Es mi forma de pedir perdón por lo que haré, supongo"-

Para este punto Gabe estaba furibundo al ser excluido de la conversación, dispuesto a golpear al de pelo castaño.

Antes de que cualquier participante en la conversación se diera cuenta, Gabe tenía una navaja incrustada en su puño, y Cristel se dio la vuelta hacia él.

-"¿Pueden dejarme a solas con el señor Gabe? Me gustaría tener una cordial conversación con el, nada más"- Pidió amablemente, tenía ganas de desfogar su ira contra ese hombre, pero no quería tampoco que nadie viera ese espectáculo.

Percy tiró de la manga de la camiseta de Sally, se dieron una mirada mutua de entendimiento antes de abandonar la estancia y el apartamento.

Cristel contorsionó su rostro hasta plasmar sus emociones actuales, la rabia y el odio desmedido inundaban su corazón mientras veía a aquel hombre retorcerse con su mano sangrante.

Sin darle tiempo a recomponerse, tomó el mango del cuchillo y con su otra mano aprisionó el brazo de Gabe, empezando a retorcer la navaja mientras la sacaba, arrancándole un alarido de dolor.

-"No nos hemos presentado formalmente ¿Cierto?"- Cuestionó el hijo de Artemisa mientras veía el cuchillo manchado de sangre, y a un Gabe en el suelo, llorando del dolor.

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