CAPITULO 30

373 59 24
                                    

¿Es posible que pueda amar a Anna cada día?
hemos estado mejor desde aquella noche en el fiordo, no hay ningún rumor, nadie sospecha de que Anna y yo tenemos una relación, todo es perfecto. Las semanas pasaron y por lo tanto seguimos como siempre. Empecé hacerme cargo del Reino, y Anna solo está allí con Olaf. A veces pienso sobre Kristoff y en de dónde podría estar... ¿alguna vez llegué a ser mala con él? me gustaría disculparme, es necesario.

Comprendí que el no es un mal chico, solo le tocó una mal jugada y... pensó que iba a tenerlo todo de enseguida. Kristoff... si supieras que a mí también me sucedió lo mismo. ¿Anna podría pensar en él? me temo que sí, es su... bueno, fue alguien importante en su vida y creo que lo será siempre.
Espero que dónde sea que esté sea feliz. Se lo merece.

Si la situación fuera diferente, ¿Anna me dejaría? no sería capaz de dejarla, creo que no la amo suficiente para dejarla ir en cualquier situación. Quizás eso es lo que es el amor, creo.

—Majestad— habló Kai. Había tocado la puerta de mi oficina y le pedí que pasara. —Me recordó que le llamara la atención para esta hora. Recuerdo que dijo que saldría con su hermana y que quería estar lista. Es la hora.

Y otra vez me olvidé de tomar el tiempo.

—Gracias— sonreí. Guardé algunas cosas y salí de mi despacho. Me dirigí a mi habitación porque allí tenía algunas cosas para Anna. En secreto salí del Reino para buscar algunos obsequios para la pelirroja, sé que ella ha pasado por esos lugares pero por ser la Reina puedo pedir un regalo personalizado. —¿Le gustará?

Encima de mi cama estaba una canasta que contenía chocolates, algunas girasoles, los obsequios y unas cartas que hice para ella.
En verdad Anna, esto y muchas cosas más te mereces.

Este tiempo he hablado con Anna sobre tener un momento muy especial ella y yo, sinceramente le comenté que era lo que más deseaba pero podría esperar si ella no sentía lo mismo. Para mí buena suerte dijo que también lo deseaba y que siempre buscaba el momento indicado pero respetaba cuando yo evitaba algún contacto con ella.

Así que decidí tener esta noche con ella, si es que acepta claro, y si no lo hace no habrá ningún problema. Le pedí ayuda a Olaf sobre...
¿el lugar? bueno eso lo decidí yo, estaba justo por el bosque, lejos de aquí y sin nadie más alrededor. Siendo la primera vez me gustaría hacerlo lejos de todo el mundo, mi primera opción era en el castillo y que nadie más estuviera en él, solo Anna y yo. Pero luego pensé que no sería tan romántico, así que ésta es la segunda opción.

Se hace un poco tarde y por mala suerte o buena, hay mucho frío. Quizás el universo me está ayudando. No sé que decir pero gracias.
Antes de llegar a la cabaña me encontré a Olaf y Anna caminando.

—Elsa, que bueno encontrarte— saludó Olaf viendo lo que tenía en mi mano derecha.
—Anna también tiene algo para ti — sonrió.

—Elsa, te ves hermosa — dijo Anna acercándose a mí. —Olaf me dijo que tienes planeado cenar cerca de aquí.

¿Habló de cenar? pero no hice nada.

—Sí, así es — dije sonriendo. ¿Y ahora qué haré?

—Ahora pueden seguir sin mí — habló Olaf.
—Estaré en el castillo, espero que les vaya muy bien — antes de irse se acercó a mi para hablarme en el oído. —Todo está en orden, no te preocupes.

¿Que querrá decir con eso? sin más que decir nuestro pequeño amigo se marchó.
Anna y yo nos quedamos en silencio, me sentía como si fuera mi primera vez en una cita, ¿por qué las palabras no me salen?

—Y bien... ¿que haremos? — preguntó y a lo lejos ví aquel lugar donde Anna estaría conmigo.

—Solo quiero estar contigo Anna, podríamos hacer cualquier cosa— sonreí y entramos al lugar. En verdad Olaf puso mucho empeño con esto, pero espera... ¿hace cuánto lo hizo?
Habían muchas velas para alumbrar el lugar, las rosas no faltaban y... ¿copas? oh, hay 5 botellas de vino, en verdad Olaf... eres el mejor.

𝐅𝐎𝐎𝐋 𝐅𝐎𝐑 𝐘𝐎𝐔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora