CAPITULO 9

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Es hermoso, ¿No? Tenerte a lado mío justo en este momento, viendo lo más significante de todo el mundo. Desearía estar así todas las noches contigo, tomando tu mano y demostrarte que puedo amarte como debe de ser.

El silencio no nos molestaba en lo absoluto, es como si tú también disfrutaras el momento, dime Anna... ¿Te gustaría estar así conmigo por el resto de tu vida?.

Porque yo lo haría. Tuve que moverme un poco, pues se nos hacía tarde y no quería que ningún empleado del Reino estuviera preocupado por nosotras.

— Perdón. — dije moviéndome para que Anna se levantara. — Es hora de irnos.

— Lo empezaba a disfrutar. — sonrió Anna, extendió su mano para que la tomara y así con su ayuda pudiera levantarme. Al hacerlo, quedé a centímetros del rostro de Anna con el mío. No lo niego, pero si quería tomar el valor para besarla.

— Lo siento. — me separé un poco de ella y empecé a caminar. Anna hizo lo mismo y se acercó hacia mí para estar más juntas.

Caminamos hacia el Castillo, gracias al universo nadie estaba ahí. Es como si todos tuvieran la idea en que Anna y yo ya hubiéramos regresado. Antes de entrar a nuestro hogar, mi hermana me tomó de la mano.

— He querido darte esto desde la mañana, pero esperaba tener el valor para dártelo como ahora. — extendió su mano y me entregó un lindo collar.
— ¿Sabías que pueden hacerte el diseño?.

— Es muy lindo, Gracias. — sonreí. Seguí viéndolo y era más hermoso de lo que notaba, no es porque sea un copo de nieve, sino que es por el hecho de Anna me lo regaló.

— ¿Quieres que te lo ponga?. — preguntó y asentí. Me di la vuelta y dejé que Anna me pusiera el collar alrededor de mi cuello. Sus manos estaban calientes, muy diferentes que los míos. — Listo.

Agradecí nuevamente y esta vez nos introdujimos en el interior del Reino. Acompañé a Anna hacia su habitación y me despedí de ella. Cuando llegué a la mía, lo único que pude hacer es irme directo a mi cama.

Estaba cansada, nerviosa y algo pensativa. Amé la noche, creo que será el mejor recuerdo que tendré con Anna... O eso creo.
El sueño me estaba venciendo, así que opté por dormir y dejar que todo lo que siento ahora se disminuya un poco.


















La mañana no estaba muy interesante, hice lo que una Reina debe de hacer, desayuné y quedé verme con Anna en la entrada del Reino. Tenía planeado disfrutar el día con mi hermana, así que en el desayuno dije mi plan.

A mi hermana le encantó la idea, pues ella quería estar cerca de mí y hacer cosas de hermanas. Por ahora que recuerdo, he dejado algo excluido a mi gran amigo, Olaf.

Suelo verlo a veces en la biblioteca, pero casi no he tenido el tiempo para tener una charla con el.
¿Sería algo malo invitarlo? Lo dudo. Estaba en frente de mí con los guardias, seguro preguntando cosas que ellos hacen en su rutina.

Lo llamé y él caminó hacia mi. Se miraba tan feliz y eso hizo que yo también lo estuviera.

— ¿Te gustaría dar un paseo conmigo y con Anna? Es que casi no hemos hablado lo suficiente. — Olaf aceptó. — Tengo que contarte todo.

— Tengo tiempo para escuchar. Mira. — Señaló a mi hermana. — Ahí viene Anna.

— Siento la demora, pero no encontraba... ¡Olaf!, ¿Vendrás con nosotras?. — preguntó con una emoción.

— Jamás me perdería una aventura con ustedes.

— Eres el mejor amigo. — Anna lo abrazó y empezamos a caminar. Las personas hacían lo suyo, cada una de ellas hacían reverencia y otras nos preguntaban.

Aunque Anna y yo ya conozcamos todo lo que es Arendelle, aún se nos hace divertido volver por acá. Porque, podemos conocer personas nuevas e incluso, alguna nueva idea que tienen algunos.

Fuimos hasta el lugar donde venden flores, a Olaf le gusta y si no me equivoco, creo que Anna también.

Cada flor me gustaba, incluso las rosas pero la única y hermosa flor la tengo a lado mío. A veces suelo ser un poco "Romántica" pero por favor.. es Anna la chica que amo y hace que saque mi lado tan tierno y romántico.

— ¿Te gusta esta?. — pregunté tomando la maceta con una flor de color azul, era muy linda.

— Me encanta. — respondió Anna.

— Será tuya. Solo espero que la cuides.

— Elsa, cuido todo lo que me das. No dejaré que se marchite esta flor. — con lo que había dicho, hizo que sonriera como loca.

Compré la flor azul para mi hermana, al principio me lo negaron solo porque soy la Reina pero insistí. También compré una para mi amigo, el vendedor fue muy gentil al llevárselas hasta el Reino.

Salimos del lugar e íbamos ir directo hacia el lugar donde venden todo tipo de chocolates, pero la multitud de gente que había en el centro hizo que ya no fuéramos hacia el lugar.

Cuando llegamos donde ellos estaban, me di cuenta que Kristoff había regresado y que todos estaban felices por ello. Anna salió corriendo hacia él y sentí como mi corazón se rompió. ¿Lo estuvo esperando?.

El rubio abrazó a mi hermana y al soltarse le dió un pequeño beso en los labios. Se notaba que él la extrañó demasiado, me hace pensar que Anna hizo lo mismo.

Sentí la mirada de Olaf en mí, el sabía que se acabó todo, que mi "Gran Plan" no iba a funcionar, ¿Y por qué? Porque se nota que Anna tiene al rubio, aunque haya dicho que está con el solo porque se siente bien.

¿Yo me estoy engañando o tú lo haces?, ¿Como puedes decirme un día que no lo amas y al otro irte corriendo por el?.

Olaf tomó mi mano e hizo un pequeño apretón. Eso hizo que volviera a verlos a los dos. Caminaron hacia mí y claramente vi como Anna tenía entrelazada su mano con la de Kristoff.

— Buenos días Majestad. — dijo el chico haciendo una reverencia. — Gracias por cuidar de Anna.

¿Disculpa?, ¿Cuando me dijiste que debía de cuidar de ella? ¡Lo hice por mi propia cuenta!.

— Bienvenido Kristoff. — dije lo más seco que pude. ¿Que debía hacer?, ¿Darle una abrazo y decirle que lo quiero? ¡No!. — Los dejaré solos, espero que disfruten su día.

Salí de allí, pero sentí que Anna se entristeció por lo que acababa de decir. Todo iba bien, ¿Verdad? Lo tenía todo hasta que llegó ese rubio apuesto. ¿Que tiene el lo que no tenga yo?. Por favor, solo dame una razón y me largo.

Si Anna llega a decirme que solo es porque "la trata bien", Dios, yo la trataría mejor que a nadie, le daría mi mundo entero, ella merece a alguien que de todo por ella, incluso daría mi vida por Anna. ¿Es que ella no lo puede notar?, ¡Maldición!, ¿Que Tan difícil es para decirte que Te amo?.

Acaba de regresar todo lo que no quiero que esté. Lo siento Anna, pero ya no tengo las ganas para seguir avanzando.

𝐅𝐎𝐎𝐋 𝐅𝐎𝐑 𝐘𝐎𝐔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora