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₰ Heridas Que Prevalecen ₰

AFRODITA WORSTED

ITALIA / ROMA

Nunca fui perfecta. Yo no era lo que soy ahora.

Ese idioma, lo escuchaba en mis más profundas pesadillas; desde pequeña no volví a pronunciarlo y parecía que era un recuerdo oscuro.

Miraba como el ataúd descendía por el amplio hoyo, una mujer de edad lloraba de rodillas frente a él. Su llanto removía mi interior, el sentimiento de la culpa empezaba a ser asfixiante; todo esto era una completa mierda.

El cura daba las últimas palabras, bendijo el ataúd y se marchó. El lugar se fue desocupando, incluso la madre de Michaell se levantó sin fuerzas dándole la espalda a su único hijo muerto, mi hermana se acercó, tomo un puño de tierra y la dejo caer sobre el cajón negro.

Me junte a su lado abrazándola.

En las últimas semanas era poco lo que hablaba, Dalai intentaba mantenerla entretenida y en lo que mi concierte; permanecía en el cuarto a solas, en la noche Netla entraba pidiendo acostarse a mi lado y ambas intentábamos reconciliar el sueño.

-Cuando pasara el dolor –pregunto con voz baja

-No lo sé, hermanita, no lo sé.

Permanecimos allí paradas en total silencio, el auto esperaba en la entrada del cementerio, pero nosotras no abandonamos el lugar pasado una hora.

Al volver a la casa de nuestros primos, preferí quedarme un momento afuera caminando por el amplio patio.

El cuerpo inerte de Michaell volvía a mi mente una y otra vez, por más que lo tratara de ignorar ahí estaba. El enojo en mi crecía cada vez que veía a Netla con la mirada perdida, mi mama nos había acompañado las dos primeras semanas hasta que le pedí que se fuera.

Lucia me daba algunas visitas ya que no asistiríamos al colegio por un tiempo. Mi mejor amiga no pidió explicaciones, solo se dispuso a consolarme como tanto lo necesitaba.

-Te has perdido.

Gire mi rostro a un lado, la mirada calmada de Alhea llego a mí.

-Acaso te interesa.

Ella suspira –No, la verdad no.

Dejo de mirarla y me concentro en la fuente mediana, el sonido del agua caer es relajante dejándome darme cuenta que me había sentado.

Todavía siento la presencia de mi prima, es más cuando se acerca a mi lado y toma asiento sin decir nada. No dije nada y ella tampoco, junté mis manos con impaciencia al no saber que pretendía con su extraño acercamiento; no hablábamos ni siquiera viviendo bajo el mismo techo.

-Se quién es la responsable de la muerte de Michaell –hablo con una voz gélida

-Como sabes eso.

-Tome el atrevimiento de buscar, no fue difícil hablando con las personas correctas.

La observo acusatoriamente, esperando más, Alhea me devuelve la mirada soltando la información que obtuvo.

-Su alias es Gaviota, es de arabia saudita y al parecer no actuó sola. Ella planeo el ataque, pero los recursos no eran de ella; alguien mucho superior –parpadeo dos veces con dulzura –Recuerdas el atentado en la carrera de Florencia.

-Lo recuerdo.

-El Gavilán, él fue quien le dio las herramientas a esa tal Gaviota, lo que significa que trabajan juntos o ella trabaja para él.

PASIÓN [ En Proceso ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora