₰ Deleite ₰
LEONID MANCINI
ITALIA / ROMA
La extravagancia que tenía mi madre era extensa, por ello no permitiría que su primogénito anduviera en cualquier auto; siempre tenía los vehículos de último modelo recién lanzados al mercado.
Hoy aparcaba en mi espacio designado el Ferrari F8 Tributo, regalo de mi querida madre sin ningún motivo. La cochera estaba repleta de autos, mi padre tuvo que comprar un lote para guardar lo que ya no cabía en la casa a pesar de eso no se atrevía decirle a madre que dejara de comprarlos.
Apenas toque el asfalto escuche el chillido de emoción que venía de parte de Ginevra, corrió hasta mi lugar dejándome de lado para abrazar el auto como si se tratara de algún peluche.
Rolando soltó un chiflido, Mario y Donato avanzaban igual que el con una sonrisa en su rostro.
-Otro regalo de tu madre –pregunto Mario
-Así es –mostré las llaves
Ronaldo dio suaves golpes en mi hombro –Ya quisiera yo una madre así; la mía lo único que me da es regaños.
-Cómo quieres que no te regañe si eres un idiota andante.
Ginevra se carcajeo, acompañando la burla de Mario hacia nuestro amigo.
Los cinco caminamos hasta la cafetería, aún era temprano y había poca gente ya que las clases los jueves comenzaban a las nueve de la mañana. De mi parte prefería huir de la casa evadiendo cualquier contacto con mi madre; siempre que me tenía a su disposición me trataba como una amiga a la cual contarle los chismes de la cuadra.
Era algo incómodo a veces.
-Tengo un apetito sorprendente –comento Ronaldo –Esta mañana mi vieja ordeno una tropa de comida y no eh quedado satisfecho, de camino le pedí al conductor que se detuviera para comprar una caja de donas y me las eh embutido todas.
Donato rodo los ojos mientras que Ginevra y Mario lo observaban con rareza.
Ronaldo parecía un agujero negro de comida, jamás estaba lleno y siempre lo pillabas comiendo.
Decidí pedir algo suave, una bebida para ser exactos. Tomamos asiento en una de las mesas circulares hablando, mis amigos parecían polos opuestos y eso era algo entretenido al momento en que estos chocaban entre sí.
Siquiera había empezado el día y ya quería irme.
Ronaldo dejo de parlotear poniendo su atención a mis espaldas, curioso me voltee para encontrarme con Afrodita Worsted y su mejor amiga creo se llama Lucrezia.
La tela gruesa que se mantenía alrededor de mi muñeca derecha empezó a picarme, seguí su trayecto con mi mirada; hoy tenía un vestido verde claro sus mangas eran largas pero la falda terminaba un poco más arriba de sus rodillas.
La piel morena lucia pulcra, me atrevía a decir que brillaba bajo los rayos del sol, su cabello castaño recogido en una trenza dejaba ver con más precisión su rostro.
-Se te va a salir la baba.
Aparte mis ojos de Afrodita recomponiéndome.
Ginevra movía sus cejas de arriba abajo con picardía, puse mi peor gesto enviando un claro mensaje de que no quería estupideces de su parte; eso se lo pasaron por el culo por que no dejaron de molestarme.
Admitía que sentía cierta atracción por Afrodita, no una romántica, estaba seguro de aquello, pero si llamaba mi atención y como no hacerlo si era una mujer despampanante. Sus senos eran firmes y grandes, tenía una cintura de avispa y un abdomen plano sin muestra de levadura, aunque sus caderas no eran anchas, sus piernas lo recompensaban y que decir de su trasero.
ESTÁS LEYENDO
PASIÓN [ En Proceso ]
De TodoTRILOGÍA LINAJES INFERNALES Libro #1: PASIÓN ... Libro #2 CASTIDAD [Sin Empezar] Libro #3 SATISFACCIÓN [Sin Empezar] Estamos llenos de emociones, sentimientos y pensamientos que no podemos evitar. Algunos nos hacen sentir bien, pero otros nos ator...