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Doyoung recordaba todo.

En cuanto cuanto sucedió se convenció a sí mismo de que lo olvidaría una vez despertara, que sus acciones fueron solo impulsos debido a su situación complicada y sobre todo, intentó convencerse de que no había hecho nada malo.

Pero nada lo que que había pensado que pasaría pasó, así que ahí estaba él, con la memoria fresca y siendo totalmente culpable.

Había despertado algunos minutos antes de que marcaran las diez y media, pero se quedó en la cama por algunos minutos más asimilando todo.

Aún podía sentir el beso si se concentraba lo suficiente como para recordarlo y eso solo lo hacía sentir peor. El beso en sí no fue malo, aunque tampoco podía calificarlo como bueno. No había sentido nada mientras lo besaba, aún luego de realmente intentarlo.

En cuento sintió a Chittaphon moverse se preparó mentalmente para la charla que vendría, pero cuando esté despertó solo le sonrió como siempre antes de estirarse en la cama y decirle buenos días.

-¿Ya llamaste a Sicheng? -Chittaphon miró la hora antes de levantarse. Volvió a estirarse mientras Doyoung lo escaneaba con la mirada en busca de cualquier indicio de disgusto.

-¿Para qué? -Preguntó luego, con una sonrisa confusa.

-¿No lo recuerdas? Se fue con el chico rubio de anoche -Soltó una risa mientras se acomodaba el cabello frente al espejo que tenía en una esquina -Sigo sin poder creer que nos pagó la cuenta

-¿Nos pagó la cuenta? -Lo miró asombrado.

-Bueno, deberías agradecerlo porque entre lo tuyo y lo de Sicheng ya nos pasábamos del presupuesto por mucho -Lo miró de reojo con cierta burla y Doyoung le lanzó uno de los cojines que había caido al piso en algún punto de la noche.

Mientras Chittaphon se acomodaba la ropa y el pelo, Doyoung tomó su celular dispuesto a llamar a su mejor amigo pero encontró un mensaje suyo de hacia dos horas junto con una foto.

-No tiene vergüenza...

-¿Qué? ¿qué es?

Como buen chismoso, Chittaphon se acercó a ver y comenzó a reír al ver la foto en la que se podía distinguir al chico rubio de la noche anterior dormido junto a Sicheng y arriba un mensaje que decía "creo que no pasó nada :("

-Al menos fue decente -Se limitó a decir intentando sacarle el teléfono de las manos a Chittaphon.

-Es lo mínimo -Chittaphon negó, ahora sí devolviéndole el celular.

Doyoung, al ver a Chittaphon preparándose para irse comenzó a idear la forma de hablar con él, sabía que si no lo hablaban las cosas podrían ponerse incómodas entre los dos y aunque Chittaphon parecía no verse afectado, en el fondo le podría molestar.

Para su suerte, en ese mismo momento Jeno se acercó a su habitación y comenzó a llamarlo para desayunar. No había forma de que Chittaphon no se quedara.

-¿Te quedas a desayunar, verdad?

Chittaphon intentó negarse y está vez fue él el que insistió en qué aceptara, cosa que era un poco diferente a la forma en la que se solía dar todo entre ellos. Generalmente era el alfa quien siempre le insistía de forma juguetona hasta que aceptase hacer cualquiera de los disparates que se le metía en la cabeza.

Ciertamente, al verlo tan seguro de no acompañarlos en el desayuno, Doyoung pudo notar algo que no había hecho antes y es que Chittaphon parecía no estar del todo cómodo. Notarlo se sintió como un golpe, Doyoung no sabía que esperar luego de besarlo, pero definitivamente no esperó ese tipo de actitud en un alfa como él.

play date.  johndoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora