Wishes (traducción)

22.- It's about what you have between your legs?

Esta historia no es mía pertenece a Yolandally.

***

Dinah rió y sostuvo mis hombros, haciéndome volver a sentarme en la cama.

“¡Estás tan enamorada, Mila!” Ella habló. Me ruboricé y negué. “Ah, ¿no lo estás? ¿Y entonces te ibas a levantar y pedirle a la chica salir para qué?”

“Me gusta.”

“No estás segura.”

“No, no lo estoy, pero quiero.”

“Camila, sólo mira. Aquieta ese culo, pues tú no puedes llegar a alguien y de la nada, pedirle salir.” Bufé y reviré los ojos. “No puedes ser egoísta a punto de simplemente tener todo de Lauren, siendo que ni tú misma sabes lo que vas a querer. ¿Y si surge otra persona pero ustedes no quieren lastimarse una a la otra? Esa es sólo una hipótesis y yo no voy a dejar que mi mejor amiga se lastime a por causa de alguien.”

“Sólo porque algo sucedió contigo o con Troye una vez, no quiere decir que va a suceder conmigo, China...”

“No sabes eso, y sólo nosotras estábamos allí cuando él lo necesito. Fue difícil hacer a Troye aceptar que todo era una ilusión, pero que ya había pasado.” Dinah llevo la mano derecha hasta mi rostro y acaricio con lentitud mi mejilla. “Eres la persona más importante para mí, y eres la única persona que aún no se rompe la cara por una relación... no hagas eso ahora, ¿okey? Tómate tu tiempo, todo saldrá bien, no importa cuál sea lo correcto.” Dinah sonrió y terminé abrazándola.

“¿Te agrada?”

“Arrasaste, mana. Estoy orgullosa de ti, y de ese encanto gavilán por haber dado una buena agarrada con las garras a su vagina.” Reí y Dinah me apretó más. “Vaya, mana. Esa es la cadena alimenticia, ¡¿estás riendo de qué?!” Escondí mi cabeza en su cuello. “Lauren es una pererecona, ya que sapão es termino masculino.” Reí y me alejé, luego respiré profundo.

[Pererecona: Mujer que presenta el órgano sexual femenino largo y profundo. |
Sapão: hombre fuerte y deseado.]

“Estoy feliz de que nos apoyes... después de todo, ¿nos apoyas no?”

“Apoyo la felicidad de mis amigos mientras que esa felicidad no les haga mal.” Sonreí y la apreté contra mis brazos.

¿Será que era el momento de contarle? Tanto secreto me dejaba loca, a decir verdad, pero simplemente no sabría qué decir. Fue fácil decirle a Lauren, tuve como probar aunque sin querer, después de todo, no quería estar semi desnuda después de aquel pelotazo, pero por cuestión de comodidad, al final termine prefiriendo probar que si verdad... foco, Camila.

“Dinah... necesito decirte algo...” Dinah asintió y se acostó en la cama, luego viéndome hacer lo mismo. “Eso sería como asumirme otra vez-“

“¿Te volviste hetero? Mira, si vas a hacerlo, toma un energético si encuentras a una mujer sensual, y sigue siendo top, o aquí acaba nuestro ciclo de amistad.” Reí y negué, luego abrace su cintura.

“No... no es eso.” Pensé por algunos segundos y limpié mi garganta.

“Chan... yo... debo tener noción de que es.”

“¿Qué? No, es verdad-”

“¿Es sobre lo que tienes entre las piernas?” Amplié mis ojos y miré a Dinah. “No sé lo que tienes ahí, pero percibo el volumen cuando estoy aquí, y también lo percibí cuando fui a hacer aquel diseño 3D para ti... mira, entiendo que tal vez no sea ese el punto-“

          

“¡No! Era lo que te quería contar...” Dinah bajo los ojos e hizo un puchero, luego rió.

“¿Por qué no me contaste antes?” Preguntó.

“Tú ibas a bromear si llegaba y te decía: ¡Hey, Dinah! Tenía cólicos, entonces fui a un restaurante chino con mi madre, y cuando llegue allá, gané una galleta de la suerte, y en el baño fui donde pedí una polla de 25 cm para dejar de sufrir siendo mujer! ¡¿Adivina?! ¡Ahora tengo una polla enorme!” Dinah rió, pero dejo de hacerlo cuando vio mi cara seria.

“Uh, ¿esa es la historia de verdad?”

“Sí...”

“¿Creí que eras intersexual...?” Levanté mi torso y fruncí el ceño, mirando a mi mejor amiga enseguida.

“Sí, lo soy, sólo que no nací así.”

“¡¿Sucedió de la nada?!” Asentí y continué mirando a Dinah. Ella devolvió la mirada y, por increíble que parezca, se sonrojó. “¿Qué pasó?”

“¡¿Cómo sabes el significado de intersexual?!” Dinah continuó sonrojada y miró el techo.

“Sabes que soy pan.” Asentí. “Soy pan, y por si acaso, muy curiosa.” Amplié mis ojos y Dinah se sentó, intentando ocultar su rostro sonrojado, que ni su piel bronceada conseguía disfrazar. “Mani es intersexual.” El silencio nunca fue tan grande entre nosotras.

“¿Una legitima intersexual?” Dinah frunció el ceño y terminé pensando mejor la pregunta. “Hm... tipo, ¿nació así, creció así, va a ser siempre así, pero no es Gabriela? ¿Es intersexual?” Ella rió.

[Gabriela: Enviada por Dios.]

“¿Sí...?” Levanté mis cejas y abrí la boca sorprendida, pero luego sonreí maliciosa.

“¡¿Tú estás metida con una polla, Dinah Jane?!”

“Soy pan, puedo tomar a cualquier persona. Peor eres tú, que eres lesbiana y deseaste un pito. ¡¿Quién está mal aquí?!” Reviré mis ojos y Dinah rió. “¡¿Fue realmente eso lo que sucedió, Camila?! Tipo, ¿surgió de la nada?” Asentí. “¿Dónde entra Lauren en esta historia?”

Nunca me sonroje tanto delante de Dinah.

Mi mejor amiga comenzó a reír. Fue tan alto, que tuve que tapar mis oídos.

“Lauren me ayudo cuando me lleve un pelotazo un cierto día, entonces le conté y le pedí ayuda para descubrir cómo tratar aquello. No quería contarle a otra persona pues aún no estaba preparada psicológicamente para ser burlada. Le pedí que hablara con su madre, que era ginecóloga, pero entonces percibí que no funcionaria mucho... al final, ella no tiene nada que ver sobre lo que tengo entre las piernas. Entonces su padre, que es urólogo, me ayudo. Fui a alguna consulta y terminaron sucediendo algunas cosas entre Lauren y yo, pero nunca implore nada, dejé que sucediera y funciono. Funciono más de lo previsto, y ahora estamos sólo tonteando... no hemos tenido sexo aún, al contrario de ti y Mani, que con seguridad ya hicieron a muchas personas embarazarse con la falta de preservativos en las farmacias y-“ Una almohada voló contra mi cara y terminé riendo, luego percibiendo a Dinah ponerse de pie.

“Está bien. Voy a aceptar tus justificaciones tontas y esa historia también, pues ya te vi de biquini antes, pero también ya sentí a tu amigo en mi culo. ¿Cuándo pretendes contarle a Troye? ¿Él sabe? ¿Tu madre sabe?” Negué rápidamente.

“Sólo tú, Lauren, y... puta mierda. ¡¿Y si quiero pedir permiso al padre de Lauren para salir con ella?! Digo, si un día quiero; voy a ser obligada a eso... él ya vio mí... ya toco... ¡Y va a creer que la estoy lastimando! ¡Maldición Dinah! ¡¿Qué hago?!” Ella comenzó a reír otra vez, y entonces tiré una almohada hacía mi rostro, escondiendo mi cabeza en la misma.

“Tu suegro ya toco tu polla. Él va a adorar saber que es de familia.” Tiré una almohada hacia Dinah y ella no paso de reír.

“¡Idiota!” Exclamé, riendo enseguida. “¿Pero háblame de Normani...?”

“¿Hablar de qué? Espere a darle tiempo y terminó contándome, Mani lloro, pero no iba a rechazarla. Muy por el contrario, fue el día exacto de nuestro primer beso, cuando le dije que me gustaba y que estaba todo bien por mí. A diferencia de ella con otras personas ni es tan diferente, digo, no es anda diferente.” Sonreí ampliamente.

“Cuidas de mí, pero caes de boca en una relación.”

“Ya me acostumbre a tener el corazón roto, Mila.” Ella confesó. Ya sabía aquello. Su ex novio había fallecido dos años atrás, sólo por el preconcepto que sufría al asumir ser transexual. Dinah era fuerte, y cualquiera percibía aquello. Ella me enseñaba, pero sólo vive de tristeza aquel que nunca sonrió, sabemos cuál es el mejor lado de ambos sentimientos, y Dinah todos los días estaba allí para expulsar la tristeza. Mirando por ese lado, hasta podría decir que estaba en lo correcto sobre esperar. La tristeza era sólo un sentimiento de no tener a mi padre cerca, al menos en la tierra, pues él era aquella estrellita en el cielo, que me hacía sonreír desde los 8 años.

“Gracias.” Hablé. Dinah sonrió y acaricio mi mejilla. “Tienes una bella alma, China. Eres maravillosa.” Me tiró a sus brazos, y esta vez no necesite preocuparme en no abrazarla bien por mis condiciones. La apreté contra mí y percibí mis hombros mojados, mientras me daba cuenta que Dinah sorbía. “¿Estás bien?”

“De repente me golpea la nostalgia...”

“Entiendo.” Acaricie su mechones rubios y Dinah suspiró. “Pero estoy aquí. Mani también está aquí, y ahora todo va a mejorar.” Mordí mi labio inferior, y luego miré hacia un lado, donde veía parte de mi gaveta abierta, exponiendo el gorro de dragón que era el regalo de Lauren. “Todo está mejor cuando nos enamoramos de la persona correcta, creo.”