Wishes (traducción)

63.- Karlinsaurio

Esta historia no es mía pertenece a Yolandally.

***

"Camila, ¿por si acaso ya intentaste descubrir por cuantos kilómetros por hora consigues correr? Mike preguntó. Sonreí inocente.

"No, ¿por qué?"

"Por qué si fueras a menos de cincuenta ahora, voy a cortar tu polla ahora." Amplié mis ojos y me quede esperando, parada.

¡¿Qué estaba espetando?!

¡CORRE BOLLERA!

Salí corriendo por la cocina. Fui a la sala, subí las escaleras hasta el cuarto de Lauren, empujé la ventana, y al mismo tiempo, miraba hacia atrás, veía a Mike corriendo con un nuevo objeto detrás de mí. Corrí durante cinco minutos alrededor del gran árbol que había en el jardín, un momento hasta parar para respirar.

Coloqué una mano sobre mi pecho y la otra en el tronco del árbol, agachándome un poco al tomar aire. Mike hizo lo mismo a mi lado.

"Vaya, correr cansa ¿no?" Hable. Vi a mi suegro asentir.

"Ni estoy sintiendo mis piernas... pero es por un buen motivo."

"Está bien, mira, usted cuenta hasta tres mientras salgo corriendo y volvemos con la persecución." Él asintió. "No vale hacer trampa, ¡¿eh?!"

"¡No lo haré! Odio hacerlo, ¿podemos hacer piedra, papel o tijera para ver quién es quién va a perseguir esta vez?"

"¡Eh! ¡Tú eres café con leche! Pero yo soy quien embarazo a su hija, no tendría sentido."

"Ah, eh" Mike apoyó las manos en su rodillas y me miró. "Cierto, es bueno que vuelvas a correr, Camila." Sonreí. Él hizo mención de levantar el torso y aquello me hizo sentir un enorme miedo, entonces salí corriendo, con la esperanza de no perder mi polla. Karlin Camssauro no merecía morir ahora.

Mike nuevamente ya corría detrás de mí cuando entre en la cocina, parando detrás de Lauren.

"¡Papá! ¡Detente!" Michael giro los ojos y coloco la sartén –no sé cuando él había tomado eso –en la mesa, que aún tenía a Nelson y Neyde muertos. "Eso es innecesario eh. Está bien, estoy embarazada, ¡pero maldición! ¡Camz y yo ya hicimos tantas cosas solas durante eso... debería enorgullecerte de cómo estamos lidiando con el embarazo! ¡De cómo YO estoy lidiándolo!" Sentí un inmenso orgullo en mi pecho y abracé a Lauren por detrás. Era simplemente un honor. Lauren tenía un antiguo trauma que para mí era un sueño, y poco a poco se tornaba el de ella también.

"¿Estás feliz con eso?" Clara preguntó, haciéndonos acordarnos de los otros Jauregui's que estaban presentes.

"Sí, madre. Y estoy feliz." Mi bolita de arroz know habló. La abracé más fuerte, pero con cuidado de no lastimar su barriga.

Mike y Clara intercambiaron una mirada que me dio miedo, y suspiraron al mismo tiempo. Mirándonos juntos. Pacto del demonio, sólo podría ser.

"¿Quieren nuestras bendiciones?" Asentí rápidamente, poniéndome al lado de Lauren y sosteniendo su mano.

"Siempre que pueda escoger el nombre..." Taylor se encogió de hombros. Todos la miramos, con cierto punto de interrogación. "¿Qué? No voy a bromear, en nada ustedes le colocaran el nombre a la criatura Sergio u otro nombre de alguna puta-"

"Taylor..." Clara reprendió. Mike soltó una carcajada.

"Es ver-" La Sra. Jauregui lo miró y mi suegro trago en seco. "Mentira."

"Si Camila concuerda, no me importaría."

"No, quiero Nelson. ¡Helloson, ese nombre es jodelon!" Moví los hombros, haciendo a mi novia reír bajo.

"Taylor. Tú escoges el nombre." Lauren rio al decirlo, al mismo tiempo, viendo mi
cara de indignación.

"Hay gente... ¿Lauren está embarazada?" Todos miramos al chico, estando pasmados con la lentitud del niño.

"Madre, Chris es adoptado." Taylor bromeó.

***

"Me gusta Douglas-"

"Cierra la boca, muñeco de aire-"

"Taylor Jauregui, mira como le hablas a tu hermano." Estábamos en la sala, interactuando como cualquier humano haría.

"No se va a llamar Douglas, Chris-" Mi novia exclamó.

"Hay, gente, va a ser Nelson-"

"¿Pero y si es niña?" Mike preguntó.

"Podemos llamarla Joanne-"

"¡Mi madre cantaría Lady Gaga todo el día, Taylor! ¡No! No tienes idea del trauma que tengo de escucharla cantar Alejandro en medio de la madrugada cuando era niña-" Lauren rio bajito.

"Podrían llamarla Maicon."

"Sí, Chris. Maicon. Ella sería muy feliz." Taylor bromeó a su hermano una vez más.

"¿Qué tal Neyde?" Como siempre, nadie me escucho. ¿Qué tenían las personas contra Neyde?

"¡CARAJO! ¡LISTO! Mi hijo no se va a llamar Carlos Alberto, ni Carlos Roberto, Ni Carlos el carajo a de cuatro. ¡Y no va a tener nombre del álbum de Lady Gaga, ni el apellido de Britney! ¡Sólo lo que me falta! ¡De aquí a poco ustedes dirán que debemos llamarlo o llamarla Disneilandia!"

"Disneilandia me recuerda mi infancia... me gusto." Exclamé feliz. Recordé los viejos tiempo, donde pasaba horas delante de la tv viendo los padrinos mágicos, tomando mi juguito de cajita y siendo idiota al dar un show cuando pasaban high school musical. No voy a mentir, siempre amé ser Troy.

"¡No! ¡¿Quieren saber?! No quiero saber el sexo del bebé, no quiero darle un nombre hasta el día del nacimiento. Esa es mi decisión y punto. Estoy feliz con lo que viene aunque tengamos que llamar al bebé por números, hasta que escojamos un nombre bueno." Mi novia habló. "Y eso te incluye, Karla Camila. Tú ni inventes intentar descubrir el sexo del bebé con la obstetra. Hago como Mike y te corto la polla." Todos hicieron silencio, pero luego comenzaron a reír.

"¡Voy a ser abuelo!" Mike exclamó, acercándose y quedando de rodillas delante de Lauren. Claro que me aleje un poco. La intención era permanecer con mi salchicha entre las piernas.

"Entonces... ¿está todo bien para ustedes?" Pregunté.

"Si están siendo responsables al punto de cuidar de esto desde el comienzo, si están dispuestas a luchar por ese bebé como cualquier padre haría y si están dispuestas a cuidarlo para el resto de su vida... si están felices..." Mike miró a Clara, sonriendo al recibir su mirada. "También lo estamos."

Y un tiempo después, terminamos abriendo una botella de champagne –Taylor acertó el corchó en el ojo de Chris y él tuvo que ir de emergencia, pero estaba bien –en medio del hospital.

Varias personas encontraron aquello extraño, después de todo, parecía que estábamos celebrando la muerte de alguien, pero era sólo el futuro nacimiento de Karlinssauro.

LA PUTA MADRE, KARLINSSAURO. LAUREN NECESITABA PENSAR SOBRE ESE NOMBRE.