XIX: Daki y Gyutaro 2/3

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Tanjiro daba lo que podía contra Daki

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Tanjiro daba lo que podía contra Daki.

Esa mujer era un salvajismo completo, no había forma de poder describir los golpes dolorosos directos al cuerpo del cazador.

La patada en la cara que recibió, lo mando a volar a unos cuantos metros de ella, impactando contra un techo de una casa, y de paso, destrozando está.
Daki, con su rapidez inhumana, cayó frente a el, y sonrió burlonamente.

-La ansiedad me mato, y tuve que poner el plan en marcha. Muzan-Sama te quiere muerto, y yo cumpliré su petición.- Tanjiro se paró y le lanzó una estocada con la Nichirin, tomando por sorpresa a Daki. -¡Uy, te ha faltado mucha más fuerza que esa para atinar un golpe mínimamente decente!

Ella, con su obi, lo tomo del brazo y lo lanzo lejos otra vez. Y en esta ocasión, cayó frente a Aime, quien estaba llena de tierra, y algunas heridas por ayudar y sacar de los escombros a varios pueblerinos.

-¡Tanjiro-Kun! - Gritó ella, aterrorizada de ver a esa mujer sonreír, y caer frente a ella.

Se agachó, y ayudo al cazador a ponerse de pie.

-Oh, esto es suerte. Tu eres la bastarda que anda enredada con un demonio, ¿Verdad? Escuché la charla que has tenido con ese...hombre. Si, esa eres tu, he de admitir que tú rostro es bello y joven, una buena comida para mí.- Soltó Daki con desdén, y sin faltar, su clásica mirada de asco.

Tomo a Aime de la cintura con el obi, y la alzó. La castaña, soltó un grito, sorprendida y asustada; escucho a Tanjiro gritar su nombre, recordó a Kokushibo, ¿Se había ido? ¿El planeo el ataque? Lo dudo, aunque, sabiendo bien aquello, quizás si.

-¡No te tengo miedo!- Chilló ella, sacando una mínima valentía. La Luna Superior río.

-¡Ha! ¡Es lo más tonto que he oído! Ahora sí lo tendrás.- De un solo movimiento, la lanzo contra los escombros de una tienda de joyas.

Todo paso rápido, Zenitsu apareció antes de que ella impactase, y uso su cuerpo para protegerla.

-¡Zenitsu, Aime!- Gritó Tanjiro, listo para ir a salvarlos de los pesados escombros que yacían sobre ambos. Para desgracia de el, Daki volvió a atacarlo, y el, logro parar el ataque con su Nichirin.

Los ojos de Daki, se posaron en la katana, notablemente mellada. Una terrible sonrisa cargada de psicopatía adorno su bello rostro demoniaco, y no optó por otra que burlarse de él, y de lo mal que estaba manejando la Nichirin.

-Eres una auténtica mierda manejando la Nichirin, ¿No notas lo mellada que está? Pero aún, la mierda del herrero que decidió crearte está basura, que dentro de poco, será destruida por mi.- Tanjiro se ruborizó por la vergüenza que sintió en esos momentos.
Ante lo último, ambos siguieron mientras Zenitsu sacaba al exterior a Aime, quien ya estaba con heridas considerablemente graves, junto al rubio con kimono y maquillaje gracioso.

ʟɪᴠɪɴɢ ᴡɪᴛʜ ᴛʜᴇ ᴅᴇᴠɪʟ《 Kokushibo 》©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora