Pasión por la Música

Capítulo 43

Ya llegué, ahhh. Por fin pude terminar este capítulo, hace mucho que quería hacerlo, pero no llegaba el momento donde poner todo esto, me moría por contar la historia de Kakashi, Obito y Rin, aunque claro, todavía faltan cositas, pero espero que medio vayan entendiendo por qué Obito lo odia tanto y qué está haciendo para vengarse de él, jajaja.

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Historia de un amor Parte 2

A pesar de lo mucho que disfrutaba de ver felices a sus estudiantes, Kakashi se sentía exhausto cada vez que se celebraba el festival cultural de la escuela, debido a las muchas cosas en las que él tenía que trabajar para que todo saliera perfectamente. Cuando las puertas del elevador de su edificio se abrieron, él suspiró, todo lo que quería era tirarse a su cama y dormir hasta el otro día.

Mientras iba por el pasillo hacia su departamento, se dio cuenta de que su vecina estaba sacando la basura y que su pequeño perro se asomó por la puerta, moviendo la cola alegremente. La chica tiró la bolsa negra a través de la pequeña puerta del depósito de basura y luego lo miró, sonriéndole.

—Kakashi-san, buenas noches, ¿trabajando hasta tan tarde?

El hombre hizo una pequeña reverencia a modo de saludo, su sonrisa apenas y se podía notar a través de su máscara.

—Hoy se realizó el festival cultural de mis estudiantes, mañana es el segundo día, tuve mucho que hacer así que estoy bastante cansado —respondió el profesor, no podía dejar de ver a ese adorable perrito, que continuaba moviéndole la cola—. ¿Hoy tuvo un buen día, Hanare-san?

—Sí, muy bueno, aunque aburrido, no trabajo los sábados, así que sólo estuve en casa —contestó ella, alzando entre sus brazos a su mascota—. Por cierto, imagino que no ha cenado, preparé mucha comida, ¿le gustaría un poco? Sabe bien, lo prometo.

Desde que Kakashi había empezado a vivir en aquel edificio, siempre era distante con los demás vecinos, estaba seguro de que había muchos rumores sobre él, ya que era un hombre solo que no se relacionaba con nadie, rara vez los saludaba o siquiera los miraba, pero todo había sido diferente con Hanare desde el inicio, quizá porque ella era nueva, no tenía absolutamente ningún prejuicio hacia su persona, por eso siempre era amable y era fácil llevarse con ella.

—Eso me sería de gran ayuda, muchas gracias, la verdad es que no quería cocinar —respondió Kakashi, así que ella sonrió una vez más, indicándole que pasara. Él se sintió un poco nervioso, esperaba que ella le diera la comida para llevársela a su casa, pero no, en cambio, ella quería que él entrara a su hogar.

Kakashi dudó por un momento, su falta de socialización con otras personas de su edad que no fueran del trabajo le pasaba la cuenta, le daba miedo decir o hacer algo inapropiado, pero no creía que Hanare tuviera ese tipo de preocupaciones, es más, ella era bastante relajada.

—Entonces, ¿salió bien el festival de sus estudiantes? —le preguntó la joven mujer, al mismo tiempo que le servía un gran cuenco de arroz y dejaba sobre la mesa varias guarniciones, era cierto que había preparado bastante comida, así que Kakashi no dudó en probar un poco; sabía bastante bien.

—Todo resultó perfecto, los chicos son demasiado talentosos, me recuerdan a mis días de escuela —confesó, casi no hablaba de eso con nadie, era terrible recordar cómo acabaron las cosas, cómo se había destruido su sueño—. Me gustaba muchísimo la música.

Hanare se sentó frente a él, era difícil no sentirse atraída por alguien como Kakashi, ese aire de misterio que lo rodeaba era intrigante, parecía una persona distante, pero siempre era amble con ella, incluso su pequeño perro parecía tenerle aprecio.