Holis. El capitulo extra que les debo por el trato se los publico mañana 🙈👀👉🏼👈🏼 estoy atariada con tarea perdón 🌹🌹
Hanna
25 de diciembre
—Manhattan, debemos hablar. He intentado contactarte. Por favor, llámame en cuanto escuches este mensaje. Cometí un...
Bloqueo el teléfono, terminando con el mensaje de voz.
Mi mano tiembla ligeramente, demostrando cuanto me afecta escuchar su voz.
—Aquí está la ensalada —deja un gigante tazón sobre la encimera—. Ya le di su regalo al gruñón de mi hermano, claro, no le importo.
Coloca los codos sobre la superficie, agotada.
—¿Qué sucede? —cuestiona, notando mi estado.
Me obligo a sonreír.
—Nada —le quito importancia haciendo un vago movimiento con la mano—. Estoy agotada por cocinar todo el día —sujeto su muñeca—. Gracias por traer la ensalada.
Bufa, enderezándose.
—No es nada. Desearía quedarme aquí y no ir a casa de mis suegros.
Decide subir a la barra, tomando asiento en ella.
—¿Mala relación con ellos?
Roba una manzana, propinándole una mordida.
—Ellos me odian. Van a tener una fiesta de navidad, donde todos deben ir de gala y sonreír como estrellas de televisión —imita la sonrisa, sacándome una risa pequeña—. Edgar les dijo que iríamos, por ende, estoy obligada a acompañar a mi esposo.
Columpia sus pies.
—Es fantástico, ahora podre estar atrapada por varias horas en un auto —ironiza.
Frunzo el ceño.
—¿Edgar no se crio cerca del pueblo?
Niega, haciendo una mueca.
—No. Él es de una ciudad ubicada a seis horas de aquí. Por eso es por lo que sus padres me odian, creen que lo secuestre —agranda los ojos, aun sin poder creerlo.
Me carcajeo.
—¿Cómo es que se conocieron?
Sonríe, recordando algo de su pasado.
—¡Cassidy! Vamos, nena —llama Edgar, bajando las escalera.
—Creo que será una historia para otro día —lamenta, bajando de un salto.
—Nos vemos, Hanna —se despide Edgar, agitando la mano en el aire.
—Adiós —imito su gesto.
La puerta de la entrada se cierra cuando Edgar empuja a Cassidy fuera de la casa, criticando su comportamiento infantil.
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Vida Soñada
RomancePor cientos de años, las personas destinadas a pasar el resto de su vida juntos se conocían en algún bar, parque, instituto, en el trabajo, incluso, en la calle. Siempre fue así, excepto para Hanna, quien al ya no tener nada que perder, decide encon...