AUDIFONOS POR FAVOR ... EN SERIO LEAN CON MUSICA NO SE VAN A ARREPENTIR.
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DÍAS ANTES....
JEON, JUNGKOOK.
Veía como el humo del cigarro se esparcía por el aire, mientras mis manos intentaban no temblar y mi mente luchaba por bloquear los recuerdos que me ponían así, era prácticamente imposible. Sabía que necesitaba ayuda profesional, pero ellos jamás me pagarían un psicólogo y yo no podría pagarlo por más que juntase todos mis ahorros y la plata de mis trabajos de medio tiempo y de fin de semana.
Me encontraba en el patio de mi casa, mirando como los niños pasaban a sus casas debido a la puesta del sol y la llegada de la noche. También, había observado a Taehyung en repetidas ocasiones salir con ese tipo y eso me estaba volviendo loco, eso sin contar el hecho de que mi madre no hacía más que pegarme e insultarme como si fuera la peor basura del mundo. Estaba desesperado, tenía unas ganas terribles de terminar de una vez por todas con ese sufrimiento, de rendirme y caer sin importar el golpe, después de todo a nadie le importaría. Ahora, hasta Taehyung me cambió por alguien más y lo entiendo, nadie quiere una basura como yo. Estaba cansado de buscar amor en todas partes, las personas no me quieren, mi madre tenía razón. ¿Cómo podrían querer a alguien como yo? Nadie quiere en su vida a una persona enferma, traumada y tan mierda como yo. Ni siquiera yo me quiero.
Vivir con ansiedad es una mierda, y sufrir insomnio peor, las noches se convierten en días interminables en los que vagas por las oscuras calles tratando de pasar el tiempo o miras el techo tratando de imaginar un mundo en el que el dolor no existe o tienes una vida normal. Pero, no es divertido, porque te hace mierda mental y sobre todo físicamente: no necesitaba verme en el espejo para darme cuenta de que las ojeras se habían incrementado drásticamente y que mi cuerpo estaba perdiendo demasiada masa muscular, ni siquiera podía tragar bocado, no en la misma mesa que ella y sin él a mi lado, dándome esperanzas. Siempre que estoy lejos de Taehyung, todo se vuelve más difícil. Con él, no necesito de un cigarro o de una nueva cicatriz en mi cuerpo para respirar sin sentir que me ahogo. Sin él, siento que puedo morir con tan solo respirar. Taehyung es calma, con él, los ruidos en mi cabeza desaparecen, la ansiedad cesa y las noches se sienten como noches. Con él, me siento persona y no solo un bicho raro. Es que estoy tan cansado y temeroso de volver a ese agujero negro, estoy cansado de decir que, si puedo, que no me afecta, que todo pasara cuando no es así. Nada cambiara mientras ella esté aquí.
El cigarro se terminó y mi piel se estremeció por el frio.
Entré a casa, con el miedo de encontrarme a mi madre en el pasillo, solo quería subir a mi cuarto, poner música deprimente para recordar lo patética que es mi existencia y desaparecer de la realidad, por lo menos una eternidad. Joder, estaba tan vacío. ¿Por qué nadie lo notaba?
La suerte no estaba de mi lado, sentí su perfume apenas crucé la puerta y tuve la desdicha de chocar contra sus ojos, aquellos a los que había sido heredero y que día a día me recordaban que mi propia madre me repudiaba con todo lo que tenía encima. Pasé delante suyo, suplicando que no me hablara, pero claro que ella no iba a perder la oportunidad de torturarme, para eso vivía.
