Agotante | Harry Potter x Stranger Things | Draco Malfoy y Tú [TERMINADA]

•thirteen•

•DO YOU EXPECT ME TO SAY HERE, DOING NOTHING KNOWING THAT MY BEST FRIEND IS IN DANGER?•
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—U..un gorro rojo e..es una criatura semejante a un en...nano, que vive en hoyos de an..antiguos campos de batalla o en cualquier otro lugar do..donde se haya derramado sangre humana. Es fácil rep...p...p...pelerlos con encantamientos y ma..mal...diciones, pero son muy peligrosos para los muggles solitarios. Si un gorro rojo da con un muggle en una noche oscura, tra...tratará de golpearlo con su mazo hasta matarlo. —explicaba Quirrel a los Ravenclaw y Slytherins de primero. Jenna se horrorizó un poco, y lentamente levantó la mano sorprendiendo a algunos—.

—¿Como se pueden evitar? —preguntó con curiosidad bajando la mano cuando el profesor la miró y asintió con la cabeza, dándole el turno—.

—Pu...pueden ser evitados rociándolos con una poción embellecedora, ya que su a...apariencia "hermosa" temporal les resultaba rep...p..pulsiva. —los alumnos tomaban apuntes—. —Los gorros rojos normalmente mi...miden alrededor de un metro, con ojos rojos y uñas la...largas y afiladas. Se encuentran con mayor frecuencia en el nor...norte de Europa. —explicó. Alguien llamó a la puerta, interrumpiendo el silencio, solo roto por los tinteros y plumas sobre los pergaminos—.

—¿S..si? A...adelante. —cedió el profesor. Todos se giraron para ver entrar a la profesora McGonagall con una carta y rostro de suma angustia y preocupación—.

—¿Jenna Harrington? —preguntó con manos temblorosas, todos se giraron a ver a la niña—. —Ah, ahí estás. —dijo olvidándose completamente de tutearla—. —Quirrel, me la he de llevar inmediatamente a mi despacho. Es importante. —avisó con voz queda extendiendo su brazo para que Jenna fuera con ella. Rápidamente, se levantó y agarró sus cosas. Caminó hacia la subdirectora todavía guardado sus materiales en la mochila—.

—Más le vale que no nos haga perder puntos. —escuchó decir a Malfoy. Ambas salieron a paso rápido.

Decir que Jenna estaba asustada era poco, estaba aterrada, sumamente aterrada. ¿Y si la habían pillado subiendo al tercer piso y entrando junto al perro? Estaba en verdaderos problemas. Claramente era eso. O eso, o que la habían visto entrar en las cocinas. O tal vez las dos. Seguía a paso rápido a la profesora intentando calmarse, pero no funcionaba. ¿Que excusa pondría ahora? Que se había encariñado con un perro de tres cabezas en un pasillo prohibido para los estudiantes?! No, esa no era una opción válida. Pero no quedaba de otra. Tal vez les resultaría algo tierno que lo haya cuidado—.

—Minerva la hizo entrar a su despacho y sentarse. No se podía decir quien de las dos estaba más angustiada en ese momento. Minerva se sentó en su silla pensando cómo explicarle a su alumna lo que tenía que decir. Se sumieron en silencio mientras la subdirectora movía entre sus manos la carta. Jenna la miró, parecía una carta oficial. Claramente era su carta de expulsión. McGonagall la miró después de haber suspirado profundamente—.