Capítulo 41.- Perdón.

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Nos fuimos a sentar al sillón de la sala para mayor comodidad.

Me mantuve en silencio porque quería que él comenzara a hablar.

-Cherry, realmente no sé como comenzar esto.-dijo siendo cuidadoso con sus palabras.

Lo escuchaba y sentía que ya había escuchado eso, en alguna parte. ¿Será que todos los hombres dicen eso para terminar una relación?

-Yo te quiero mucho.-habló.

Siempre diciendo las mismas cosas, las mismas mentiras, mentiras que acepto.

-He estado pensando mucho en ti últimamente, en qué es lo mejor para ti.-me miraba fijamente en cada palabra que decía.

Asentí.

-Crees que lo mejor es terminar esto.-solté.

Lo pensé y lo dije.

Daddy se quedó en silencio, ninguno de los dos dijo nada por un tiempo.

Comencé a sentir como mis ojos se llenaban de lágrimas, no quería llorar, pero sabía que de todas formas lloraría, mucho, siempre lloro mucho.

-Yo...-habló daddy.

-Lo sientes mucho.-completé con algo de ironía.

Daddy desvió la mirada, se le notaba un poco incómodo.

-No debes preocuparte por nada.-cambió el tema.-Te quedarás recibiendo tratamiento psicológico, te quiero ayudar en todo ese proceso.-habló con sinceridad.

-No hace falta.-negué rápidamente.

-Eso ya está arreglado con Adelaide, ella se encargará de que cumplas con las citas, así que deberás hacerlo, es por tu propio bien.-habló con voz firme.

No respondí nada.

-Te he comprado un departamento, no quiero que regreses a vivir a la agencia, y bueno también te dejaré una cantidad de dinero para tí, quiero que puedas vivir cómodamente, te apoyaré hasta que puedas encontrar lo tuyo.-hablaba pero yo ya no era capaz de escuchar lo que decía.

¿Será que daddy pensaba que el dinero y las cosas materiales solucionan los problemas? Bueno, en cierta forma es así, el dinero hace más fácil las cosas, pero el dinero no puede controlar los sentimientos, las emociones o al menos no en mí.

Siendo honesta, entendía el porqué de las cosas, solo que yo misma me había puesto una venda en los ojos, realmente no hay peor ciego que el que no quiere ver. Todo lo que pasamos nos trajo a esto, debería estar agradecida de todo el tiempo que pudimos estar juntos, o tal vez no tanto, solo debería estar agradecida de conocerlo. Daddy no podía darme las cosas que yo quería, él podía darme dinero y cosas materiales, pero no podía darme exclusividad ni fidelidad. Sin embargo no todo fue tan malo, me apoyó en todo lo que pudo, también me dio cariño y amor sincero. Porque como no creerle cuando me decía que me quería y me sonreía con tanta calidez que nadie nunca me había brindado. Supongo que de cierta forma, daddy si me quería, a su manera pero me quería. 

-¿Me estás escuchando?-daddy interrumpió mis pensamientos.

Asentí rápidamente por inercia.

-¿No dirás nada?-preguntó.

Lo abracé, lo abracé lo más fuerte que pude, queriendo recordar como se sentía abrazarlo. 

Daddy no dijo nada, solo me rodeó con sus brazos.

Solté un sollozo y me largué a llorar, daddy acariciaba mi espalda a modo de consuelo.

-Te quiero mucho.-solté entre sollozos.

Little Princess (Lil Pump//Daddy Kink)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora